Roxy Music nuevo disco y concierto en Madrid

El pr¨®ximo martes, 15 de los corrientes, quienes todav¨ªa permanezcan en Madrid tendr¨¢n ocasi¨®n de escuchar un concierto que puede marcar nostalgias futuras: Roxy Music, Eric Burdon y Original Mirrors.

A pesar de ciertos despistes informativos por parte de los organizadores, el concierto tendr¨¢ lugar sin mayores problemas o, al menos, eso se espera, ya que el permiso est¨¢ y el orden parece asegurado.Roxy Music es uno de los productos m¨¢s t¨ªpicos y originales de los a?os setenta. Se form¨® en noviembre de 1970, cuando Bryan Ferry, estudiante de arte, hijo de un minero y reci¨¦n rechazado como voz de King Crimson, decidi¨® organizar su propio grupo. En plena onda glamourosa, Roxy ten¨ªa cuatro elementos fundamentales. El mismo Ferry, cantante y teclados era el compositor y l¨ªder. Brian Eno, sintetizadores conceptuales era un elemento con demasiada personalidad como para estar a la sombra, dejando el grupo tras sus dos primeros ¨¢lbumes. Phil Manzanera, el guitarrista, ha grabado en solitario varios discos, posiblemente los m¨¢s experimentales e interesantes que se hayan hecho al margen de Roxy. Andy Mackay saxos, encuentra, sin embargo, su lugar en esta banda y sus intentonas en solitario no valen ni la mitad de lo que hace en Roxy.

La marca de identidad del grupo, aparte de unas carpetas alucinantes y dise?adas siempre por Ferry, consist¨ªa en una sabia mezcla de canci¨®n, rock y electr¨®nica susceptible de ser Incluida en singles de ¨¦xito (Virginia plains, Pyjamarama) y de ser entendida por todos sin que por ello perdiera un cierto carisma de buena m¨²sica. En directo, Roxy Music es todav¨ªa mejor que en disco, con un sonido potente, matizado y elegant¨ªsimo sobre el que surge la voz dram¨¢tica de Ferry, verdadero crooner del rock, un hombre que canta demasiado bien, tanto que el ¨¦xito de sus discos en solitario llev¨® a la disoluci¨®n del grupo en 1975-1976. La cuesti¨®n era que la influencia de Roxy se mostr¨® en muchos grupos en los ¨²ltimos setenta (Only ones, Cars, The pop, Magazine y otros). de manera que Ferry vio llegado el momento de salir de nuevo a los escenarios.

As¨ª naci¨® Manifesto. un ¨¢lbum sorprendente, porque a todo lo que hab¨ªa hecho anteriormente Roxv se le uni¨® la m¨²sica disco, con la cual consiguieron un rosario de singles vendedores que en cuesti¨®n de unos meses les pusieron de nuevo en primer plano.

Ahora acaba de salir Flesh and blood, su ¨²ltimo. Es un disco que ha recogido amargas cr¨ªticas en Inglaterra, casi todas de tipo tan subjetivo como afirmar que ?Brian Ferry ha dejado de ser el h¨¦roe para convertirse en int¨¦rprete?, y otras de ese estilo.

En realidad, y siguiendo este tipo de argumentaci¨®n, Roxy Music ha metido en este elep¨¦ una m¨²sica m¨¢s pulida si cabe, una m¨²sica en la que hay de todo, desde versiones del soul de los sesenta (In the midnight hour) hasta el Eight miles high de los Byrds. O una balada super pop como es Oh yeah, disco music descarada (Same old scene) o un reggae (Rain, rain, rain). Fles and blood es un estupendo disco de un aran grupo, pero eso no tiene mucha importancia: sus conciertos superan este y todos sus otros discos. Son, sencillamente, demasiado fuertes, demasiado bellos.