Cinco candidatos a la presidencia del COI

Cinco candidatos a la presidencia del COI fueron anunciados oficialmente ayer tarde en la conferencia de prensa que sigui¨® a la sesi¨®n de trabajo del comit¨¦. Aunque se especul¨® con la posibilidad de que la mayor¨ªa de los precandidatos abandonara, la realidad es que los cinco nombres con los que se han barajado posibilidades han anunciado su candidatura. Junto a Juan Antonio Samaranch aspiran a la sucesi¨®n de lord Killanin el neozeland¨¦s Cross, el alem¨¢n Daume, el suizo Hodler y el canadiense Worral.

A partir de las dos y media de la tarde de hoy comenzar¨¢ la votaci¨®n y se da la circunstancia de que Cross, Worral y Hodier, junto al representante de Costa de Marfil, Louis Girandou-Ndiane, aspiran a la vicepresidencia. Esta doble presentaci¨®n a las elecciones debe interpretarse como un deseo de no quedar descolgados y seguir perteneciendo a la comisi¨®n ejecutiva del COI. Ayer, por la ma?ana, se anunci¨® la presencia en Mosc¨² de 79 de los 86 miembros del COI, y por la tarde llegaron el franc¨¦s conde de Beaumont y el tunecino Mzali, que son dos votos seguros para Samaranch. El conde de Beaumont, que personalmente es partidario del boicoteo, ha venido a la capital sovi¨¦tica con el ¨²nico objetivo de asistir a la elecci¨®n de presidente.El lunes corri¨® el rumor de que Samaranch ten¨ªa asegurados entre 45 y 50 votos. Jo?o Havelange, con quien convers¨¦ brevemente, fue rotundo en este sentido y afirm¨® que eran exactamente 48. Havelange y todos los miembros del COI de Am¨¦rica Latina se reunieron en el hotel y parece que la conversaci¨®n dur¨® hasta las cinco de la ma?ana.

Juan Antonio Samaranch necesita en este momento, si no se produce ausencia a la hora de emitir el voto, 41 papeletas a su favor. Gentes pr¨®ximas al embajador de Espa?a en Mosc¨² aseguraban ayer, antes de la llegada de los dos miembros citados con anterioridad, que ten¨ªa exactamente 38 personas a su favor. De ser cierta esta cuenta, est¨¢ a falta de un voto para ser presidente.

La elecci¨®n se realizar¨¢ por el sistema tradicional. Si alguno de los candidatos en la primera vuelta obtiene los votos necesarios, ser¨¢ proclamado presidente. Caso de que no ocurra tal se proceder¨¢ a una segunda vuelta con eliminaci¨®n del candidato que menos votos obtenga en la primera ronda. El problema est¨¢ en ver sobre qu¨¦ persona van recayendo los votos de los eliminados caso de que se necesiten varias vueltas. En opini¨®n de los conocedores del COI, la elecci¨®n est¨¢ planteada de tal manera que Samaranch tendr¨¢ que luchar contra los otros cuatro aspirantes que se considera ir¨¢n uni¨¦ndose a medida que se produzcan las votaciones.

La sesi¨®n de ayer del COI trat¨® el tema de su propia agenda y se propuso posponer la designaci¨®n de la sede de 1988 para el congreso de Baden Baden del pr¨®ximo a?o. El COI ha manifestado que no ha tenido conocimiento del problema suscitado con la televisi¨®n alemana, a la que no se le ha permitido transmitir un programa por cuestiones de censura. Al parecer, en ese programa se trataba de alguna manera el tema de Sajarov.

El gran problema protocolario est¨¢ planteado sobre el tema de la bandera norteamericana. Estados Unidos, por escrito y en dos ocasiones, ha pedido que su bandera no sea izada en la ceremonia de clausura como es habitual al anunciar la ciudad sede de los pr¨®ximos Juegos. El COI tratar¨¢ durante los veinte d¨ªas que restan para la ceremonia este conflicto, sobre el que no se aventura una soluci¨®n satisfactoria.

Castej¨®n, galardonado

El Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional concedi¨® ayer sus recompensas anuales. Entre las veinte personas que han sido galardonadas con la Medalla de Plata del Orden Ol¨ªmpico figura Benito Castej¨®n, ex director general del Consejo Superior de Deportes.

En la ceremonia de entrega de condecoraciones ol¨ªmpicas a destacados deportistas y personalidades, los participantes en la sesi¨®n del COI pudieron ver por videotape la comunicaci¨®n telec¨®smica con la tripulaci¨®n del complejo orbital Salyut 6, Soyuz 36 y Progress 10. Los cosmonautas Leonid Popov y Valeri Ryumin conversaron con los campeones ol¨ªmpicos: la gimnasta Nelli Kim y el baloncestista Serguel Belov. Los cosmonautas aprovecharon para mandar su mensaje. Desearon ¨¦xitos a sus compatriotas en las competiciones, porque ellos servir¨¢n para el fortalecimiento de la amistad entre los pueblos.

Saporta, reelegido

Durante la celebraci¨®n de los Juegos, como es habitual, se re¨²nen las federaciones internacionales. Estos congresos, que sirven para establecer normas de actuaci¨®n deportiva, son tambi¨¦n la ocasi¨®n para la renovaci¨®n de los cuadros directivos. Por el momento, el espa?ol que ha conseguido ocupar un puesto de trascendental importancia ha sido Raimundo Saporta, reelegido presidente de la comisi¨®n de organizaci¨®n de la Federaci¨®n Internacional de Baloncesto. Saporta, que ha sido siempre un experto en el manejo de la formaci¨®n de grupos y sorteos de eliminatorias, tendr¨¢ ahora en sus manos todo el poder para establecer los calendarios de todas las competiciones mundiales.

Saporta, en este aspecto, coment¨®: ?Tenga usted en cuenta que la FIBA ya ha superado el tema de los sorteos. Nosotros hacemos emparejamientos l¨®gicos para defender los intereses econ¨®micos y al mismo tiempo evitar confrontaciones de selecciones que por razones pol¨ªticas no pueden competir entre s¨ª?.

Solemne apertura

La ¨²nica gran ovaci¨®n de la solemne apertura de la 831 sesi¨®n del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional el lunes fue para lord Killanin. El teatro Bolshoi, que no se llen¨® ni siquiera en el patio de butacas por razones del boicoteo, recibi¨® con palmitas de cortes¨ªa las palabras del presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico de la URSS, S. Paulov, que habl¨® en primer lugar, y con id¨¦ntica escasa emoci¨®n la alocuci¨®n de Kouznetsov, primer vicepresidente del Presidium del Soviet Supremo de la URSS, en nombre del cual habl¨®. La ovaci¨®n a lord Killanin son¨® a contestaci¨®n de los hombres del deporte.

Paulov se refiri¨®, de entrada, a la significaci¨®n de las sesiones del COI, que en su opini¨®n son la esperanza de ver triunfar los Ideales ol¨ªmpicos.

Kouznetsov tambi¨¦n hizo referencia a los ideales ol¨ªmpicos, a los millones de personas que en la URSS practican el deporte y a la importancia de la formaci¨®n f¨ªsica. Tras palabras de bienvenida, de esperanza y de la satisfacci¨®n de ver reunidos a hombres de diversos pa¨ªses, razas y religiones, no olvid¨® decir que la sesi¨®n del COI deber¨¢ tratar importantes problemas, como el relativo al desarrollo posterior del movimiento ol¨ªmpico.

Lord Killanin comenz¨® por poner el dedo en la llaga de entrada., al se?alar que las dos sesiones de este a?o van a ser vitales para la historia del comit¨¦. Las injerencias pol¨ªticas habidas en Lake Placid las consider¨® contraproducentes. Lord Killanin se?al¨® que hablaba por ¨²ltima vez en un acto de este tipo como presidente y record¨® las horas amargas de Munich, los problemas de Montreal, y se lament¨® de que todos los atletas, a causa de los dictados pol¨ªticos, no est¨¦n en este momento en Mosc¨².

Lord Killanin, en su despedida de la presidencia, pas¨® revista a los grandes problemas de la organizaci¨®n ol¨ªmpica, como son los himnos y las banderas, que calific¨® de postura chovinista; al gigantismo de los Juegos, y, sobre todo, a las injerencias pol¨ªticas. Lord Killanin anunci¨® el deseo de que la ciudad sede de los Juegos de 1988 no sea designada hasta la sesi¨®n del COI en 1982, en R¨ªo de Janeiro.

Lord Killanin pareci¨® despedirse con tristeza y recibi¨® de los presentes un aplauso ferviente. El acto tuvo ausencias notables. No todos los diplom¨¢ticos invitados acudieron y tampoco estuvieron en el patio de butacas todos los hombres del deporte cuya presencia era previsible. El boicoteo dej¨® 144 butacas libres de las 510 que tiene el teatro, y en los palcos tambi¨¦n se not¨® la ausencia de numerosas personas. Y eso que el programa era atractivo, porque la sesi¨®n musicial, con int¨¦rpretes de primera magnitud, solistas, orquesta, coros y grupos de baile cl¨¢sico y folkl¨®rico, tuvo una calidad inmejorable.