Ha muerto el pianista de "jazz" Bill Evans
El pasado lunes muri¨® en Nueva York Bill Evans, uno de los m¨¢s importantes pianistas de jazz de los ¨²ltimos veinte a?os. Al parecer, la muerte tuvo lugar como consecuencia de la perforaci¨®n de una ¨²lcera g¨¢strica que Evans padec¨ªa desde hace varios a?os. Bill Evans naci¨® en Plainfield, Estado de Nueva Jersey, y comenz¨® a estudiar piano, viol¨ªn y flauta desde casi su ni?ez. Tambi¨¦n muy joven entr¨® en el jazz, para formar en tr¨ªo junto al guitarrista Mundell Lowe y el gran contrabajista Red Mitchell. Poco despu¨¦s pas¨® a formar parte de la orquesta de Herbie Fields, que hubo de abandonar para realizar el servicio militar, hecho este que le produjo ?largas series de pesadillas en las que se ve¨ªa all¨ª para toda su vida?, seg¨²n sus propias palabras.
Una vez fuera del Ej¨¦rcito, su actividad, su creatividad y su influencia no har¨ªan sino crecer. Al poco tiempo (1956) grab¨® el primer elep¨¦ bajo su nombre y con un t¨ªtulo bien expresivo: New Jazz Conceptions. Tras una serie de grabaciones junto a otros solistas, llega para Evans uno de los momentos claves de su carrera: una corta estancia en el sexteto de Miles Davis. Aquel grupo de genios, en el que tambi¨¦n estaba John Coltrane, Paul Chambers, Cannonball Adderley y Jimmy Cobb, produjo en 1959 un ¨¢lbum llamado Kind of blue, que marca el comienzo de una nueva etapa (el modalismo) en el mismo Miles y a la larga se convertir¨ªa en uno de los elep¨¦s de jazz m¨¢s influyentes de los a?os cincuenta.Sin embargo, y a pesar del avance musical que supon¨ªa esa uni¨®n, Evans no permaneci¨® junto a Davis m¨¢s que unos ocho meses. De hecho, ese mismo a?o form¨® su primer gran tr¨ªo, junto al jovenc¨ªsimo bajo Scott La Faro (que morir¨ªa dos a?os despu¨¦s, de resultas de un accidente, no sin haberse mostrado como uno de los grandes innovadores del instrumento con apenas un par de discos grabados) y el bater¨ªa Paul Motian, que despu¨¦s pasar¨ªa a acompa?ar a un disc¨ªpulo de Evans, el tambi¨¦n pianista Keith Jarret. A trav¨¦s de los a?os, esta formaci¨®n en tr¨ªo fue casi la ¨²nica con que trabaj¨® Bill Evans, quien curiosamente grabar¨ªa muy poco en solitario, apenas los discos titutados Bill Evans alone y Conversations with myself. Hace un par de a?os ten¨ªa que haber venido al festival de jazz de San Sebasti¨¢n, pero a ¨²ltima hora decidi¨® no acudir, en vista de una serie de atentados producidos en esos mismos d¨ªas. A finales del a?o pasado, Bill Evans estuvo en Espa?a en olor de minor¨ªas (clubes peque?os y dem¨¢s), pero afortunadamente sus actuaciones fueron grabadas en televisi¨®n.
La importancia de Evans en el jazz, y m¨¢s concretamente en el piano, no tiene un equivalente en los ¨²ltimos a?os. Todos los pianistas que surgieron a partir de los sesenta le deben algo, aunque sean tan diferentes como Keith Jarret, Chick Corea, Joe Zawinul o McCoy Tyner. Y es que Evans cambi¨® tanto la melod¨ªa como la armon¨ªa en los teclados. Much¨ªsimas veces se han buscado en ¨¦l influencias cl¨¢sicas que ,efectivamente existen, pero acumuladas de tal manera (Bach, Debussy, Chopin o Ravel) que finalmente resultan algo original y nuevo. Y, sin embargo, el mismo Evans habla m¨¢s bien de Nat King Cole, Earl Hines o Bud Powell a la hora de mencionar sus maestros. La manera de Evans es de una elegancia y un buen gusto que para algunos resultaba excesivo, hasta el punto de intentar incluirle en las filas de los pianistas ambientales. Pero para cualquier sensibilidad medianamente despierta lo que hac¨ªa era simplemente m¨²sica bell¨ªsima.
Babelia
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