Japon incrementar¨¢ este a?os su exportaciones a la CEE en un 30%
, Jap¨®n aumentat¨¢ este a?o sus exportaciones a la Comunidad Econ¨®mica Europea en, al menos, un 30%, en comparaci¨®n con 1979. Las exportaciones de los nueve a ese pa¨ªs disminuir¨¢n, por el contrario, en un 2%, en t¨¦rminos reales. El espectacular d¨¦ficit de la balanza de pagos comunitaria con Jap¨®n fue el principal tema de discusi¨®n entre el vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Willy Haferkamp, y el enviado del Gobierno de Tokio, Saburo Okita, ex ministro de Asuntos Exteriores, durante la visita -ayer Bruselas.Las conversaciones de Haferkamp y Okita no parecen haber desembocado en ning¨²n acuerdo. El diplom¨¢tico japon¨¦s se limit¨® a escuchar y a mostrarse comprensivo, sin adelantar en ning¨²n momento si su pa¨ªs est¨¢ dispuesto o no a autolimitar sus exportaciones, sobre todo autom¨®viles y televisiones, y a favorecer las ventas de los nueve. La respuesta, seg¨²n se?al¨® Haferkamp, deber¨¢ producirse antes del Consejo de Ministros a celebrar el pr¨®ximo d¨ªa 25 de noviembre.
Seg¨²n los datos preparados por la Comisi¨®n Europea, el d¨¦ficit de la balanza de pagos de la CEE con Jap¨®n fue, en los seis primeros meses de este a?o, de 4.900 millones de d¨®lares, lo que supone cerca de un 50% m¨¢s que en igual per¨ªodo de 1979. El d¨¦ficit global para 1980 se calcula en m¨¢s de 9.000 millones de d¨®lares, cuando el a?o pasado se cifr¨® en 7. 100 millones.
Todo esto, unido a la disminuci¨®n real de las exportaciones europeas a Jap¨®n, la reducida tasa de crecimiento de la econom¨ªa comunitaria y los siete millones de parados de la CEE, hace que e empiecen a alzar en los nueve voces que exigen medidas proteccionistas contra los productos nipones. Este ha sido el principal fantasma esgrimido por la Comisi¨®n Europea en sus conversaciones con el Gobierno de Tokio. La CEE, afirman los pol¨ªticos comunitarios, es contraria a las medidas proteccionistas y luchar¨¢ contra ellas; pero la opini¨®n p¨²blica europea se solivianta cada d¨ªa m¨¢s y exige una actuaci¨®n severa y eficaz de sus gobernantes.
La soluci¨®n, seg¨²n los expertos de la CEE, es que Jap¨®n, como ya hace en sus relaciones comerciales con Estados Unidos, autolimite sus exportaciones, especialmente en los dos sectores m¨¢s afectados: industria automovil¨ªstica y electr¨®nica. Al mismo tiempo, Tokio debe estudiar la mejor manera de promover las compras de productos europeos, levantando las pesadas barreras aduaneras que existen en la actualidad para ciertos productos alimenticios o el cuero. El nuevo giro en las relaciones comerciales entre Jap¨®n y la CEE debe completarse, siempre seg¨²n Bruselas, con una pol¨ªtica de inversi¨®n, por parte de Tokio, tendente a crear nuevos puestos de trabajo en Europa.
Haferkarnp insisti¨® repetidamente en sus contactos con Okita en que la CEE no pretende una reducci¨®n r¨¢pida del actual d¨¦ficit comunitario, porque es consciente de las propias dificultades japonesas, un pa¨ªs dependiente en el plano energ¨¦tico en mayor grado a¨²n que Europa. Pero, al mismo tiempo, la CEE reclama una moderaci¨®n progresiva de la presi¨®n que la industria japonesa ejerce en sectores especialmente sensibilizados o que se encuentran en per¨ªodo de reestructuraci¨®n dentro de la Comunidad Europea.
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