Vista del antejuicio contra el juez instructor del sumario de "El Papus"

En la Sala Segunda del Tribunal Supremo se celebr¨® ayer la vista p¨²blica del antejuicio promovido por Ediciones Amaika, SA, editora de El Papus, contra el titular del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 2 de la Audiencia Nacional, juez Alfredo V¨¢zquez Rivera, por presuntos delitos cometidos por dicho juez en la instrucci¨®n del sumario sobre el atentado perpetrado contra dicha revista el 20 de septiembre de 1977, con el resultado de un muerto.

El antejuicio, seg¨²n est¨¢ concebido en la ley de Enjuiciamiento Criminal, constituye un procedimiento previo y especial a la admisi¨®n de las querellas formuladas contra jueces y magistrados, y su finalidad es determinar si los hechos que se imputan son constitutivos de delito, en cuyo supuesto deber¨¢ admitirse a tr¨¢mite la querella con el objeto de apurar la investigaci¨®n sobre los mismos, tomar las declaraciones pertinentes.En el antejuicio promovido por Ediciones Amaika, SA, contra el instructor del sumario de El Papus, la parte acusadora mantiene que este ¨²ltimo ha cometido, en el ejercicio de sus funciones instructoras los delitos de haber retrasado maliciosamente la administraci¨®n de justicia, haber dictado resoluciones injustas y haber dejado de promover la persecuci¨®n y castigo de los autores del atentado que sufri¨® la revista el 20 de septiembre de 1977. El ministerio fiscal, en una breve intervenci¨®n que no pas¨® de cinco minutos, se opuso a la admisi¨®n de la querella y dio explicaciones no delictivas a los hechos que se imputan al juez instructor del sumario de El Papus. Por su parte, el letrado Juan Barja de Quiroga, que ejerce la acusaci¨®n particular en nombre de Ediciones Amaika, SA, mantuvo, en primer lugar, que el instructor del sumario de El Papus ha retrasado maliciosamente la administraci¨®n de justicia, porque ha cerrado el sumario sin haber cumplido lo ordenado por la Audiencia Nacional en auto de 2 de agosto de 1979 de continuar y apurar la investigaci¨®n y de resolver las peticiones de procesamiento formuladas por la acusaci¨®n particular contra ocho activistas de extrema derecha, sobre los que recaen sospechas fundadas de ser los autores del atentado contra El Papus. Tambi¨¦n, seg¨²n puso de manifiesto el letrado Barja de Quiroga, el instructor del sumario de El Papus dict¨® resoluci¨®n injusta en su auto de fecha 10 de abril de 1980, por el que proces¨® a algunos de los encartados s¨®lo por tenencia de explosivos, pero no por el hecho del atentado a la revista. ?La causa 29/1977?, a?adi¨® el letrado Barja de Quiroga, ?se sigue por un atentado contra la redacci¨®n de la revista El Papus. Es esta la base de la acusaci¨®n: el atentado con muerte. Y sin embargo, el instructor, sin tener en cuenta la base de la acusaci¨®n, las pruebas practicadas y las declaraciones, y en varios casos las confesiones de los encartados, decide, el 10 de abril de 1980, procesar por tenencia il¨ªcita de armas a algunos de ellos solamente, y sin resolver sobre los hechos fundamentales?.

Finalmente, la acusaci¨®n particular tambi¨¦n mantuvo ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo que el instructor del sumario de El Papus ha dejado de promover la persecuci¨®n y castigo de los autores del atentado contra la revista a pesar de los indicios racionales existentes contra ellos, y que el propio juez reconoci¨®, en conversaci¨®n mantenida con el gerente de Ediciones Amaika, SA, y con el director de El Papus. La acusaci¨®n particular solicit¨® del tribunal la admisi¨®n a tr¨¢mite de la querella y la apertura del correspondiente sumario, la designaci¨®n del magistrado que lo haya de instruir y la suspensi¨®n del juez V¨¢zquez Rivera, con comunicaci¨®n al ministro de Justicia a los efectos procedentes.