El pesimismo, rasgo com¨²n en los mensajes de fin de a?o de los dirigentes europeos

La mayor¨ªa de los gobernantes europeos ha puesto de manifiesto en los mensajes de fin de a?o los temores derivados de la crisis econ¨®mica internacional y del actual panorama pol¨ªtico. Desde Le¨®nidas Breznev, jefe del Estado sovi¨¦tico, que reconoci¨® las preocupaciones de la URSS ante la coyuntura econ¨®mica interna, hasta el jefe del Estado polaco, Jablonski, que subray¨® que en el a?o 1981 ?las esperanzas basadas en las experiencias de 1980 se cumplir¨¢n si no se alteran la paz y el orden?, los l¨ªderes europeos mantienen una ¨®ptica generalizada de pesimismo sobre el a?o que comienza.

Los problemas econ¨®micos y, sobre todo, el aumento de la producci¨®n de bienes de consumo son dos de los principales objetivos de los dirigentes sovi¨¦ticos para 1981, seg¨²n dijo en su discurso de fin de a?o el jefe del Estado de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, Le¨®nidas Breznev, que asegur¨® que su pa¨ªs ?se pronuncia de una manera categ¨®rica a favor de la distensi¨®n?.Breznev a?adi¨® que la pol¨ªtica exterior de la URSS ?persigue objetivos claros y nobles? y asegur¨® que la Uni¨®n Sovi¨¦tica se pronuncia por el reforzamiento de la cooperaci¨®n y dice un no rotundo a la carrera de armamentos, a las complicaciones y a los conflictos provocados por la pol¨ªtica imperialista?. Agreg¨® tambi¨¦n que la capacidad defensiva sovi¨¦tica ser¨¢ mantenida. En el plano interior, Breznev subray¨® que ?es preciso desarrollar la construcci¨®n de viviendas, lograr una aceleraci¨®n del progreso cient¨ªfico y mejorar la eficacia de la producci¨®n?.

Para el jefe del Estado polaco, Henryk Jablonski, el desarrollo de los acontecimientos pol¨ªticos y sociales en Polonia a lo largo del a?o 1980 ha supuesto ?una victoria conjunta de las fuerzas renovado ras del Partido Obrero de Unificaci¨®n polaco y de las protestas de los trabajadores?. Jablonski dijo que ?los conflictos y tensiones sociales que se iniciaron el pasado mes de agosto en el movimiento huelgu¨ªstico del B¨¢ltico se debieron a los errores cometidos en la pol¨ªtica social y econ¨®mica durante largo tiempo y a las transgresiones de los dirigentes polacos en el desempleo de sus funciones?.

Por su parte, el canciller de la Rep¨²blica Federal de Alemania, Helmut Schmidt, en su mensaje de fin de a?o, asegur¨® que los alemanes del Oeste ?pueden tener confianza en el porvenir, pese a las dificultades que les aguardan en 1981?. ?El nuevo a?o?, seg¨²n Schmidt, ?no va a ser un a?o de importantes satisfacciones?.

Val¨¦ry Giscard d'Estaing, en su discurso de fin de a?o, dijo a los franceses que ?Francia es una gran naci¨®n y continuar¨¢ si¨¦ndolo?, para a?adir luego que el nuevo a?o, ?que sigue siendo de futuro incierto?, ser¨¢ ?dif¨ªcil, pero descansa sobre la estabilidad y la eficacia de las instituciones francesas, sobre la independencia y el poder¨ªo de su defensa, su activa diplomacia de paz y su contribuci¨®n a la organizaci¨®n del mundo?.

Para Margaret Thatcher, primera ministra de Gran Breta?a, el porvenir se presenta m¨¢s halag¨¹e?o, pues ?se respira una atm¨®sfera de realismo? en la situaci¨®n pol¨ªtica de su pa¨ªs.

En cuanto a Kenan Evren, m¨¢ximo dirigente pol¨ªtico de Turqu¨ªa, en su mensaje de fin de a?o justific¨® la intervenci¨®n de las fuerzas armadas turcas en la pol¨ªtica de su pa¨ªs, mediante la que ?se ha podido maniatar a quienes imped¨ªan el funcionamiento del sistema democr¨¢tico?. Agreg¨® adem¨¢s que en Turqu¨ªa ?se han adoptado ya las medidas necesarias para lograr el equilibrio econ¨®mico en el pa¨ªs?.