El Ayuntamiento no incrementar¨¢ el impuesto de la circulaci¨®n

El Ayuntamiento madrile?o no subir¨¢ la cuant¨ªa del impuesto municipal de circulaci¨®n, a pesar de que el ¨²ltimo Consejo de Ministros autoriz¨® un incremento de hasta un ciento por ciento. La decisi¨®n municipal, seg¨²n inform¨® ayer a EL PAIS Baltasar Aymerich, delegado municipal de Hacienda, est¨¢ basada en que este a?o se comienza a cobrar por la Operaci¨®n de Regulaci¨®n de Aparcamiento (ORA), con lo que, de incrementar el impuesto de circulaci¨®n, el conductor se ver¨ªa fuertemente gravado por los impuestos.Las cantidades que actualmente se cobran y que no experimentar¨¢n cambios, por lo menos, hasta enero de 1982, son: ochocientas pesetas para turismos con menos de ocho caballos de potencia fiscal; 2.250 pesetas para turismos que tengan de ocho a doce caballos; 4.800 pesetas para veh¨ªculos de m¨¢s de doce caballos hasta diecis¨¦is, y 6.000 pesetas para veh¨ªculos que superen este n¨²mero de caballos. El decreto aprobado por el Consejo de Ministros fija cantidades m¨¢ximas a cobrar justamente en el doble de las citadas.

Ni justo ni oportuno

?No nos parece aportuno ni justo subir ahora este impuesto, sobre todo cuando tenemos que mejorar el censo de veh¨ªculos. Seg¨²n calculamos, en las arcas municipales s¨®lo entra el 60% de la recaudaci¨®n que te¨®ricamente tendr¨ªa que lograrse?, manifest¨® Aymerich.Los ingresos anuales que tiene el Ayuntamiento por el impuesto de circulaci¨®n se elevan, seg¨²n parece, a unos 1.500 millones de pesetas, una vez cobrados todos los recibos bien en per¨ªodo voluntario o a trav¨¦s de procedimiento ejecutivo.

Seg¨²n el decreto sobre R¨¦gimen Jur¨ªdico de las Corporaciones Locales, aprobado el pasado viernes, la Jefatura Provincial de Tr¨¢fico no tramitar¨¢ expedientes de baja o transferencia de veh¨ªculos si su propietario no acredita estar al corriente en el pago del impuesto.

En el decreto se fija asimismo la cuant¨ªa m¨¢xima que se podr¨¢ cobrar en concepto de tarifas de publicidad, de acuerdo a una deterininada tabla en la que se dividen las poblaciones seg¨²n su n¨²mero de habitantes. Sobre la adopci¨®n o no de este incremento, Aymerich manifest¨® que no hab¨ªa ninguna decisi¨®n, ya que a¨²n estaba en estudio.