El grupo de Mart¨ªn Villa desea una UCD capaz de "autogobernarse"
Los principales dirigentes centristas del grupo que aglutina el ministro Rodolfo Mart¨ªn Villa han presentado una propuesta de texto alternativo a la ponencia de estrategia para el II Congreso de UCD, que, entre otras cosas, afirma que el partido debe lograr un sistema coherente de autogobierno, propenso a una continuidad de prop¨®sitos y actuaci¨®n, y que permita los relevos necesarios sin el temor a las tormentas o sin necesidad de los vaivenes de un p¨¦ndulo. Entre otros, firman el documento Jes¨²s Sancho Rof, P¨ªo Cabanillas, Juan Jos¨¦ Ros¨®n, F¨¦lix Manuel P¨¦rez Miyares, Sebasti¨¢n Mart¨ªn Retortillo y el propio Mart¨ªn Villa.
El referido documento dice, entre otras cosas: ?En un an¨¢lisis de la sociedad espa?ola y su sistema pol¨ªtico, reconociendo la etapa del consenso, estima que los acuerdos preconcertados deben dejar paso ahora a la libre discusi¨®n p¨²blica, al debate institucionalizado de las cuestiones, principio este sobre el que descansa la democracia de tipo parlamentario, que debe ser eminentemente eficaz?.Seg¨²n el documento, en la consideraci¨®n de la crisis econ¨®mica se apoya la libertad de sindicaci¨®n y huelga, que no contribuy¨® a agudizar la crisis, sino que, simplemente, la puso al descubierto, aunque quiz¨¢ con ligereza e imprevisi¨®n.
El terrorismo carece de justificaci¨®n en el actual Estado democr¨¢tico, y por ello no hay m¨¢s f¨®rmula para su erradicaci¨®n que una amplia cobertura de las fuerzas y cuerpos de la Seguridad del Estado, una decidida colaboraci¨®n internacional y una eficaz acci¨®n policial y de la justicia.
Se estima que la sensaci¨®n de la sociedad espa?ola no es tanto de falta de seguridad como de inquietud por el principio de igualdad ante la ley y ante el horizonte vital de los espa?oles, que se deben sentir iguales en la naci¨®n y ser, tambi¨¦n, due?os por igual de su Estado.
El documento rechaza como falsas soluciones las de un Gobierno de concentraci¨®n, de un Gobierno de coalici¨®n entre los dos partidos mayoritarios y de una convocatoria anticipada de elecciones legislativas, por cuanto el sistema democr¨¢tico necesita ser consolidado, y ello tendr¨¢ lugar cuando se haya cumplido una legislatura, cuando se haya cumplido con normalidad un mandato parlamentario. Tambi¨¦n rechaza el documento la reforma constitucional, que en este momento ser¨ªa inoportuna y podr¨ªa causar serias dificultades adicionales.
Seg¨²n el documento, la verdadera respuesta reside en instaurar un realismo democr¨¢tico ajeno a deseos totalitarios y a las utop¨ªas del signo que sean. Todos cuantos son conscientes de sus responsabilidades de ciudadanos vienen obligados, a pesar de la permanente tentaci¨®n al desencanto, a coadyuvar con su esfuerzo ante las dificultades. Nadie tiene derecho a desinteresarse de lo que a todos afecta, y, por ello, la democracia debe y quiere ser la democracia de todos los espa?oles, cualquiera que sean sus lugares de nacimiento, sus ideolog¨ªas o sus opiniones. Hay que renunciar a disputas sin sentido y hay que evitar las querellas sobre la realidad hist¨®rica, social y pol¨ªtica de Espa?a. Por otra parte, este realismo democr¨¢tico exige una fecunda dial¨¦ctica pol¨ªtica; pero sin pretender recurrir a f¨®rmulas de forzada convergencia, que no estaban ni estar¨¢n en el ¨¢nimo del electorado.
En la defensa de las libertades es necesaria una justicia que haga respetar la ley desde su insobornable independencia y que, con su unidad y coherencia, se haga obedecer. Adem¨¢s, la justicia debe ser accesible a todos, sin que su administraci¨®n resulte tan lenta, compleja y costosa como lo es actualmente.
En el terreno econ¨®mico se propone una ambiciosa pol¨ªtica de inversiones, fundamentalmente privadas, y un notable aumento de la productividad. Es preciso, adem¨¢s, continuar la firme restauraci¨®n del principio de libre empresa. La agricultura puede ser un sector prioritario, del que en gran parte depende el presente y del que, sin duda, depender¨¢ en alto grado.
Se propone, adem¨¢s, un acuerdo b¨¢sico para el Estado de las autonom¨ªas y la superaci¨®n de la crisis, de modo que los antagonismos deben dejar paso a las solidaridades. En lo pol¨ªtico, todos los partidos deben contribuir a levantar las paredes maestras del Estado de las autonom¨ªas, afirmando a la vez el hecho mismo del Estado, que tiene especial¨ªsimas e indeclinables responsabilidades. En las relaciones sociales, el Estado, los sindicatos y las patronales deben elaborar y ejecutar una estrategia para superar la crisis, que no se va a resolver espont¨¢neamente, y, en este sentido, debe procederse, sin m¨¢s dilaciones, a la creaci¨®n del Consejo Econ¨®mico-Social, seg¨²n la Constituci¨®n.
Se reconoce que los espa?oles, en n¨²mero importante, se sienten defraudados en su vida concreta, y no pocos optan por culpar de tal situaci¨®n al actual sistema y a sus efectivos puntales, esto es, a los partidos pol¨ªticos. Pero si los partidos buscan soluciones internas, ello no es, seg¨²n el documento, porque olviden los problemas del pa¨ªs, sino porque necesitan poner a punto sus medios de actuaci¨®n para poder afrontar los problemas con mayor fuerza y con m¨¢s claros objetivos.
UCD como partido
En lo que se refiere a UCD, aceptados sus valores, el documento rechaza pretendidas heterodoxias de hoy que pueden ser verdades para ma?ana, y se?ala que principios que ahora se creen inmutables, ma?ana pueden ser reliquias en el camino de la evoluci¨®n social y pol¨ªtica. En consecuencia, se propone no ser un partido dogm¨¢tico. Sin embargo, una vez que el congreso haya definido una l¨ªnea de actuaci¨®n y elegido unos ¨®rganos, ¨¦stos deben ejercer el poder en el partido conforme a los estatutos y, en su caso, conforme a los pactos o f¨®rmulas establecidos para lograr la elecci¨®n de su estructura directiva. Una vez establecidas las reglas del juego, cualquier desviaci¨®n que pretenda legitimarse en la ideolog¨ªa de un grupo o de una familia debe ser asumida y expuesta con todas sus consecuencias, sin que de entrada deba ser permitida su prevalencia por suponer una actitud clara de incumplimiento.Seg¨²n lo expuesto, el partido tiene ideas y prop¨®sitos para su labor y para la labor de gobierno de la naci¨®n, y se niega a entender la ideolog¨ªa como un cors¨¦ r¨ªgido del pensamiento y del alma de los hombres, y ni siquiera de sus necesidades y aspiraciones. Los programas de UCD deben surgir de la propia praxis del partido, de sus recursos y de sus hombres, de su posici¨®n dentro del espectro social de la naci¨®n y de la capacidad de movilizaci¨®n que posea.
Finalmente se afirma que es cualidad indispensable que el partido logre un sistema de autogobierno coherente, eficaz, propenso a una continuidad de prop¨®sitos y actuaci¨®n que permita los relevos necesarios sin el temor a las tormentas o sin necesidad de los vaivenes de un p¨¦ndulo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.