Oscar Alzaga: "Hace falta una cierta renovaci¨®n de la direcci¨®n"
El dirigente cr¨ªtico Oscar Alzaga hizo la principal intervenci¨®n contra la gesti¨®n del Comit¨¦ Ejecutivo saliente, pidiendo la abstenci¨®n de los compromisarios. En sus palabras hizo hincapi¨¦ en que no se analizan suficientemente los errores y la, en su opini¨®n, deficiente situaci¨®n del partido, y consider¨® necesaria una ?cierta renovaci¨®n del equipo de direcci¨®n? de UCD. En parecidos t¨¦rminos se expres¨® el senador Luis Miguel Enciso, mientras Antonio Jim¨¦nez Blanco y Jes¨²s Mar¨ªa Viana pidieron el voto favorable. La gesti¨®n fue aprobada por amplia mayor¨ªa en votaci¨®n de tanteo.Enciso comenz¨® agradeciendo la dedicaci¨®n y los m¨²ltiples, aciertos de Adolfo Su¨¢rez, as¨ª como el infatigable trabajo de Rafael Calvo, pero advirti¨® que no se puede desembocar en falsos triunfalismos. Del informe del secretario general destac¨® que no ha sido respaldado por todos los miembros del Comit¨¦ Ejecutivo y que no cubre el objetivo fundamental de ser cr¨®nica y expresi¨®n de la vida del partido. A?adi¨® que quedan al descubierto dos graves deficiencias, que son las servidumbre del partido respecto al Gobierno y el predominio de una maquinaria de oficinas y papeles. Tambi¨¦n se quej¨® del predominio de las actitudes pragm¨¢ticas u oportunistas sobre las ideas y dijo que la carencia de ideolog¨ªa permite que los conflictos se deban m¨¢s a luchas de intereses que a confrontaciones de principios.
Atac¨® lo que calific¨® de ?pobre registro? del Consejo Pol¨ªtico, por haberse reunido s¨®lo tres veces, principalmente para refrendar la labor de un secretario general y elegir a otro. Asimismo lament¨® la escasa atenci¨®n que el partido dedica a los senadores, y concluy¨® que estas carencias se deben a que UCD no ha escuchado suficientemente la voz de sus bases, sus electores y el pueblo espa?ol. Termin¨® afirmando que ning¨²n progresismo ser¨¢ posible sin democratizaci¨®n.
Jes¨²s Mar¨ªa Viana comenz¨® su intervenci¨®n indicando que ¨¦l no pertenece a ning¨²n sector, sino que es s¨®lo un hombre de UCD. Sostuvo que el saldo de la gesti¨®n del partido es positivo, a pesar de los errores, y dijo de ¨¦stos que es preciso reconocerlo, aunque tampoco se debe caer en masoquismos. Respecto al deseo de democratizar la organizaci¨®n, afirm¨® que es un¨¢nime en todos sus integrantes, de los que dijo que tienen derechos y deberes, tanto para pedir como para cumplir. En este sentido agreg¨® que si culpable es quien no cumple, tambi¨¦n lo es quien no pide cuando debe hacerlo.
"Adolfo; ?chapeau?"
Oscar Alzaga comenz¨® tambi¨¦n expresando su fe profunda en el papel pol¨ªtico de UCD y su reconocimiento del trabajo del equipo saliente, as¨ª como su adhesi¨®n al emotivo agradecimiento a Su¨¢rez: ?Adolfo: sinceramente, chapeau?.
No obstante, advirti¨® que las cosas, de un tiempo para ac¨¢, no van demasiado bien. Record¨® las elecciones parciales al Senado en Andaluc¨ªa, cuyos resultados juzg¨® insatisfactorios, y dijo que la grandeza de los partidos no se mide por la cantidad de locales, sino por los votos que obtienen. A este respecto hizo menci¨®n a los anteriores fracasos en las elecciones auton¨®micas en el Pa¨ªs Vasco y en Catalu?a.
Insisti¨® en que los hechos no se analizan suficientemente, y dio como ejemplo que probablemente UCD fue el ¨²nico partido que no reuni¨® a su ejecutiva para analizar los resultados de las elecciones en Andaluc¨ªa. Pidi¨® que se reconociese que la opini¨®n p¨²blica se ha despegado en bastante medida del Gobierno, y se quej¨® de que muchos ciudadanos que comparten los principios de UCD est¨¢n desilusionados con ¨¦sta.
M¨¢s adelante explic¨® que ?no hay cr¨ªticos ni oficialistas?, sino hombres de UCD que ven los errores y la necesidad de reconocerlos: ?Debemos y podemos darle a este partido una etapa ascendente, arreglar los problemas de las provincias, generar una pol¨ªtica local m¨¢s concertada y de apoyo a nuestros concejales?.
En suma: dijo que UCD puede tener un funcionamiento infinitamente mejor de sus ¨®rganos ejecutivos, y que para esto no se trata de rebelarse contra nadie, sino cada cual contra s¨ª mismo. Del Comit¨¦ Ejecutivo se?al¨® que no ha funcionado como deb¨ªa y que es necesaria una cierta renovaci¨®n en el mismo, mientras se quej¨® de que no se han dado las razones por la escasez de reuniones del Consejo Pol¨ªtico.
Se refiri¨® despu¨¦s a la dimisi¨®n de Su¨¢rez, diciendo que obliga a todos a un cambio hacia adelante, para el que es preciso un acuerdo de comprensi¨®n y sentar las bases con tal de que ¨¦ste sea el congreso del entendimiento sincero en el debate democr¨¢tico. Anunciando que se abstendr¨ªa en la votaci¨®n, record¨® que UCD tiene la uni¨®n, es decir, hay que unir y no separar; el centro, o sea, que contra las acusaciones de derechizaci¨®n hay que afirmar que este partido no es la derecha de Espa?a, y la democracia, que no hay que tener miedo en usarla.
Pocas diferencias de fondo
Antonio Jim¨¦nez Blanco recogi¨® la frase de Alzaga y, dirigi¨¦ndose a ¨¦l, le dijo: ?Querido Oscar: chapeau?. Puso de manifiesto en su intervenci¨®n que eran muy pocas las diferencias de fondo entre los que hablaron antes que ¨¦l, y record¨® que UCD no se puede permitir aventurismos como en los partidos que no est¨¢n en el Gobierno.
Justific¨® el tono del informe de Rafael Calvo diciendo que no se le puede acusar de ser fr¨ªo y detallado, puesto que es conveniente esa enumeraci¨®n prolija de la actividad del partido, aparte de que el discurso de Su¨¢rez hab¨ªa tenido un contenido estrictamente pol¨ªtico.
Subray¨® lo que calific¨® de gesto de grandeza hist¨®rica del ex presidente, y dijo que la dimisi¨®n de ¨¦ste permitir¨¢ un juego democr¨¢tico Pleno. Asimismo manifest¨® que es preciso analizar todo el partido y que todos asuman la responsabilidad. Recordando esa totalidad, pregunt¨® qui¨¦n puede tirar la primera piedra.
Aunque terminados los turnos de debate, Rafael Calvo obtuvo la posibilidad de hablar por alusiones para replicar a Oscar Alzaga y Enciso que el informe que hab¨ªa le¨ªdo no es s¨®lo del secretario general, puesto que en ¨¦l se recogen todas las actividades del partido. Respecto a que la fortaleza de ¨¦ste se mida en votos y no en sedes, afirm¨® que no se debe olvidar que detr¨¢s de ¨¦stas hay mucho trabajo y mucha ilusi¨®n de los militantes. Por ¨²ltimo pidi¨® que se votase s¨ª o no, af¨ªrmando que ?la abstenci¨®n ya la ensayamos una vez y fue muy mala pol¨ªtica?.
Votaci¨®n por tanteo
La decisi¨®n de los compromisarios sobre la gesti¨®n de la direcci¨®n saliente se realiz¨®, por iniciativa de la mesa, por tanteo, dada la dificultad de contar entre los compromisarios, seg¨²n dijo el presidente, P¨¦rez-Llorca. No obstante, ¨¦ste advirti¨® que, si hab¨ªa dudas, se contar¨ªa. Para mayor garant¨ªa, pidi¨® que subiesen al estrado los cuatro compromisarios que hab¨ªan intervenido en los turnos ordinarios del debate.
La votaci¨®n se decidi¨® sin necesidad de contar, ya que nadie puso en duda la abrumadora mayor¨ªa de votos afirmativos, que los compromisarios expresaron levantando una tarjeta verde con la palabra s¨ª. Aunque imposible de cuantificar, se estima que los votos no positivos pueden ser aproximados a los seiscientos largos que por la ma?ana votaron a favor del candidato del sector critico a la presidencia del congreso. Hay que se?alar que no todos los votantes cr¨ªticos siguieron la recomendaci¨®n de abstenerse de Oscar Alzaga, ya que al menos m¨¢s de un centenar votaron con la tarjeta no en rojo, mientras el resto lo hicieron levantando la blanca de abstenci¨®n.
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