Quieren desmantelar el Estudiantes
El Estudiantes, que desde siempre marc¨® una ¨¦poca y un estilo en el baloncesto espa?ol, est¨¢ de moda, despu¨¦s de unos a?os de aguantar entre la espada y la pared, entre el puro amateurismo y las firmas comerciales con americanos incluidos. Con ¨¢nimo o intenci¨®n de ponerse al d¨ªa va en busca de encontrar el equilibrio, pero sin perder su idiosincrasia. Ahora, que est¨¢ en sus horas altas y los resultados le favorecen, surgen los problemas internos, debido en gran parte a las injerencias externas.
No es nuevo que los colegiales sean tentados por otros clubes que quieren hacer uso de la cantera del Ramiro de Maeztu. Las ofertas llueven sobre los aut¨¦nticos protagonistas de la Liga 1980-1981.La pretemporada se present¨® verdaderamente inc¨®moda e incluso peligrosa para el Estudiantes. El fichaje de Jones no llegaba y Fernando Mart¨ªn parec¨ªa con un pie en el Madrid. Del Corral estaba en El Ferrol para jugar con el OAR. Inmediatamente se habl¨® del conjunto colegial como uno de los candidatos al descenso. Al final todo se solucion¨® y Jes¨²s Codina logr¨® reunir un cinco presentable, pero del que nadie esperaba tanto. Por si fuera poco, a los Gil, Del Corral, L¨®pez Rodr¨ªguez, Fernando Mart¨ªn y Jones hay que a?adir en primer lugar a Nacho Pinedo y despu¨¦s al resto, que cuando el t¨¦cnico echa mano de ellos saben cumplir por dif¨ªcil que sea el compromiso.
En pleno ¨¦xito, la sombra del desmantelamiento del equipo es como un punto negro en Serrano, 127. Se culpa a la directiva de no saber sujetar a sus jugadores. Esta, a trav¨¦s de su gerente, Jos¨¦ Pedro Bufal¨¢, que present¨® su dimisi¨®n y no le fue admitida, se defiende y argumenta que todo se trata de falta de medios econ¨®micos.
?El Estudiantes, como es f¨¢cil imaginar, hace todo tipo de esfuerzos para tener el mejor equipo posible, pero esto, que es un deseo no siempre puede hacerse realidad. Por otro lado, desgraciadamente ha sido ley de vida en el Estudiantes que los jugadores se vayan. Intentamos ponernos al d¨ªa y ya estamos buscando desde hace tiempo apoyos econ¨®micos, pero no es tan f¨¢cil?.
La marcha de Fernando Mart¨ªn
El tema de la marcha de Fernando Mart¨ªn al Real Madrid es quiz¨¢ el m¨¢s complicado y escabroso de todos. ?En efecto, hay presiones de todo tipo. No hay nada firmado, pero existe un compromiso verbal con el Madrid. Y, salvo que cambien mucho las cosas, se marchar¨¢, porque el Estudiantes siempre cumpli¨® con su palabra?.A Fernando Mart¨ªn le han salido despu¨¦s de este compromiso verbal muchas ?novias?, pero parece que el padre del jugador es un gran partidario del color blanco. El Madrid ofrece cuatro millones al Estudiantes y dos al jugador. El Barcelona se ha descolgado con bastante m¨¢s dinero. Otros clubes ni se han atrevido a hacer ofertas. La marcha de Fernando Mart¨ªn podr¨ªa tener mucho que ver con la de Alfonso del Corral y Juan Carlos L¨®pez Rodr¨ªguez.
L¨®pez Rodr¨ªguez no quiere irse del Estudiantes, pero ?si las ofertas son tan altas y mi club no se pronuncia, no tendr¨¦ m¨¢s remedio. A m¨ª me apetece seguir aqu¨ª, pero tambi¨¦n que no se desmantele el equipo?. L¨®pez Rodr¨ªguez cobra sobre las 70.000 pesetas al mes. Parece que el Joventut le ofrece seis millones por tres a?os, pero no ser¨ªa muy dif¨ªcil que llegara a los siete y medio.
En t¨¦rminos parecidos se pronunci¨® Alfonso del Corral: ?La verdad es que esta temporada me estoy divirtiendo m¨¢s que nunca. Con el Estudiantes es bonito todo. La campa?a es como para estar contento y mantener una alegr¨ªa que es muy importante en el deporte. La verdad, no me esperaba tanto cuando fich¨¦. S¨ª, he tenido ofertas, algunas penosas, no por lo que te ofrecen, sino en la manera de hacerlo. Hay clubes que deber¨ªan cuidar m¨¢s el elegir a sus interlocutores. No es que tenga mayor importancia, pero no deja de ser deprimente. Yo no me quiero ir del Estudiantes. Me gusta el ambiente y estoy a gusto, pero lo que de verdad me interesar¨ªa es que me encontrasen un trabajo, por ejemplo, el poder estar junto a un buen m¨¦dico. Algo claro relacionado con mi profesi¨®n. No, no me quejo de lo que me da el Estudiantes?.
Se suprimieron las primas
Alfonso del Corral est¨¢ a punto de terminar medicina, dej¨® el Tempus, hoy Inmobank, para marcharse al OAR, pero en seguida abandon¨® la idea. No obstante, sus relaciones con el club ferrolano son buenas y le han vuelto a hacer otra oferta. Como el Valladolid, el Joventut y el propio Inmobank, entre otros. Del Corral gana en el Estudiantes unas 100.000 pesetas mensuales. Hay que insistir en que la Junta Directiva tom¨® el acuerdo de que en la temporada 1980-1981 no habr¨ªa primas a cambio de subir los sueldos. Es este un dato que en cierto modo dice mucho en favor de los jugadores, que no s¨®lo han conseguido m¨¢s triunfos que nunca, sino que luchan cada jornada como si tuvieran unas suculentas compensaciones.Jes¨²s Codina, el t¨¦cnico triunfador, se queja en este sentido de que la directiva deber¨ªa hacer esfuerzos para tener alg¨²n detalle con los jugadores, sobre todo en atenci¨®n a que nadie so?aba con que se hiciera esta temporada. Codina tambi¨¦n ha tenido ofertas, pero casi todo, por no decir todo, lo supedita, como los jugadores, a que el equipo no se desmantele. ?Si al final nos quedamos todos, yo creo que todas esas ofertas quedar¨¢n en nada?.
Falta de ¨¦tica a la hora de fichar
El Estudiantes ocupa el primer plano de la actualidad y est¨¢ en pleno ¨¦xito. De ah¨ª que haya que denunciar la falta de ¨¦tica de todos los clubes que, sin esperar a que termine la temporada, se han dirigido a estos j¨®venes jugadores y les han llenado la cabeza de millones y, sobre todo, de promesas que luego no siempre se cumplen. En este sentido, Jes¨²s Codina no oculta su indignaci¨®n, porque ?es una faena, que distraigan a los jugadores, que sin querer piensan en otra cosa que no sea defender a un club con el que de momento est¨¢n contentos. El funcionamiento del equipo creo que debe respetarse?.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.