?So?aba
usted con ver un futuro libre y claro? M¨ªrese al espejo: hematomas periorbitales. ?Esperaba poder trabajar con el sudor de sus hombros? Vana ilusi¨®n: est¨¢n plagados de hematomas. ?Quer¨ªa sentarse cada ma?ana para ver nacer el d¨ªa? Imposible: sus gl¨²teos est¨¢n destrozados. Esperaba con gozo que ya pod¨ªa caminar hacia adelante, pero alguien ha quemado las plantas de sus pies. Intent¨® respirarPasa a p¨¢gina 12
?So?aba
Viene de p¨¢gina 11hondo, ante la nueva Constituci¨®n, pero no fue posible: sus pulmones estaban encharcados. Quiso usted sonreir, pero ten¨ªa un estado estupefacto que se lo imped¨ªa, un estupor producido por tantas y tantas incoherencias y cinismos. Ni siquiera pod¨ªa ya abrir el pico, pues su lengua, saburral y blanquecina, evidenciaba que hab¨ªa recibido muchos golpes en la boca del est¨®mago. Pronto, amigo, nos har¨¢n poner firmes, al levantarnos cada ma?ana, tras las obligadas oraciones para iniciar el d¨ªa./ periodista.
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