Iglesia, divorcio y Estado
No aprenderemos nunca. ?Se puede saber qu¨¦ hace una democracia occidental, parlamentaria y liberal con una Iglesia que se mete en todo menos en salvar sus propias y ajenas almas?Este pa¨ªs est¨¢ ya un poco harto de tanta injerencia y de tanta tonter¨ªa. Si ahora, por el divorcio, montan lo que est¨¢n montando, ?qu¨¦ no har¨¢n cuando empiecen a tener s¨®lo el dinero que los cat¨®licos les den?
Cuando dos personas han dejado de quererse, de entenderse, y deciden que lo mejor que pueden hacer es separarse, dejar de vivir juntos y buscar, si as¨ª lo quieren, a una nueva persona para vivir, ?qu¨¦ derecho tiene nadie a prohib¨ªrselo?
Nosotros no nos metemos en lo que hace la Iglesia en sus concilios, ni en s¨ª los curas deben tener posibilidad de decir una misa o quince por d¨ªa. Son asuntos de ellos, como el divorcio es asunto de quien pueda divorciarse y no de quienes han decidido no casarse. ? es que se trata de ser como el perro de? hortelano?/
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