Seguimiento masivo en Polonia de la huelga de advertencia

Millones de obreros polacos siguieron ayer en completa calma la orden dada por los sindicatos independientes Solidaridad en todo el pa¨ªs: strajk (huelga), que fue seguida masivamente, seg¨²n la propia agencia oficial PAP, de ocho a doce de la ma?ana. A pesar de ello, las conversaciones entre Lech Walesa, presidente de Solidaridad, y el viceprimer ministro, Miezcyslaw Rakowski, se reanudaron a las 17.30 horas, en la sede del Consejo de Ministros de Varsovia, para tratar de impedir el paro general ilimitado anunciado para el pr¨®ximo martes.

La huelga de ayer se realiz¨® sin incidentes y fue ampliamente secundada en los grandes, centros industriales del pa¨ªs: Varsevia, el B¨¢ltico y S ?lesia.En Bydgoszcz, ciudad donde se origin¨® el actual conflicto a causa de la represi¨®n de militantes de Solidaridad por fuerzas de la polic¨ªa, la huelga fue general en todas las empresas.

A las ocho de la ma?ana, las sirenas de las f¨¢bricas anunciaron el comienzo de la huelga y los obreros dejaron el trabajo y permanecieron en sus puestos. No se reparti¨® la Prensa, pero la radio inform¨® puntualmente del desarrollo del paro.

En Gdansk, lugar de nacimiento del sindicalismo independiente polaco, la paralizaci¨®n fue pr¨¢cticamente total, salvo los servicios imprescindibles, como hospitales, ferrocarriles y servicios el¨¦ctricos; pero sus empleados llevaban brazaletes con los colores nacionales (rojo y blanco) en se?al de solidaridad con sus compa?eros en paro.

Los piquetes se colocaron a las puertas de las f¨¢bricas para controlar rigurosamente las salidas y entradas de personal.

La huelga fue ampliamente secundada en Wroclaw y Bielsko-Biala, regiones; donde se produjeron alteraciones sociales el pasado mes de febrero por grupos de campesinos privados. En Kattowice, coraz¨®n de la Silesia minera, el paro comenz¨® a las seis de la ma?ana.

Llegar hasta el fin

Lech Walesa, presidente de Solidaridad, se traslad¨®, durante las horas de huelga, a la factor¨ªa de tractores de Ursus, a. las afueras de Varsovia, y donde el sindicato regional de la capital, Mazowsze, instal¨® el mi¨¦rcoles su cuartel general.?Solidaridad est¨¢ decidida firmemente?, dijo Walesa, ?a luchar hasta el final, pero no desea desencadenar la huelga general ilimitada del pr¨®ximo martes, 31?, a fin de ?asegurar una verdadera renovaci¨®n? en Polonia.

Hablando ante los obreros de Ursus, el l¨ªder polaco asegur¨® que su organizaci¨®n ?no ten¨ªa otra elecci¨®n (que ir a la huelga) y no puede ceder en sus reivindicaciones esenciales?.

La efervescencia en la f¨¢brica de Ursus simboliz¨® la que rein¨® en todo el pa¨ªs. Altavoces colocados en m¨²ltiples talleres difundieron las ¨²ltimas informaciones del desarrollo de la huelga y repet¨ªan a intervalos el siguiente llamamiento: ? La democracia est¨¢ en peligro.

Sabemos que la huelga provocar¨¢ que Polonia pierda un poco m¨¢s de dinero, pero es el ¨²nico medio. Solidaridad es la ¨²ltima esperanza para el pa¨ªs. Se hace huelga hoy para evitar la huelga ilimitada del martes?.

Los obreros en huelga, con el brazalete y la insignia de Solidaridad, fumaban y beb¨ªan zumos de frutas, porque el alcohol fue prohibido.

Escenas en un taller

En uno de los talleres, al que tuvo acceso la Prensa, todo el mundo estaba de acuerdo con el sindicato libre. De los 420 obreros, uno de los m¨²ltiples de la gran factor¨ªa Ursus, 380 pertenec¨ªan a Solidaridad, apoyada incluso por los ¨²nicos veinticinco miembros del POUP de este colectivo obrero.Los trabajadores improvisaron tertulias, animadas con la presencia del disidente Adam Michnik, y aceptaban cigarrillos Marlboro a los periodistas. ?Un paquete de estos?, dijo un obrero humor¨ªsticamente, ?me cuesta dos horas de trabajo?.

Contrariamente a ocasiones anteriores, la Prensa occidental tuvo impedimentos para realizar su trabajo. Adem¨¢s de que las autoridades polacas han prohibido la entrada de periodistas occidentales, las televisiones extranjeras destacadas en Polonia no pudieron transmitir im¨¢genes a sus pa¨ªses respectivos.

El Papa, polaco, sigui¨® los acontecimientos con preocupaci¨®n, y dijo ayer en Roma a unos peregrinos de su pa¨ªs que ?una vez m¨¢s reine (en Polonia) el sentido de la responsabilidad por el bien com¨²n?. Wojtyla pidi¨® a los miles de asistentes que ?recen por mi patria?.