La temporada de la ¨®pera de Madrid ofrecer¨¢ ocho t¨ªtulos y 32 representaciones

Hoy, mi¨¦rcoles, comienza la XVIII Temporada de la Opera de Madrid con la primera representaci¨®n, en el teatro de la Zarzuela, de El trovador, de Verdi. El programa se extiende hasta el 27 de junio con ocho t¨ªtulos, cuatro de ellos: El trovador, Tosca, Luc¨ªa de Lammermoor y Elektra, son producciones realizadas por artistas y t¨¦cnicos espa?oles, y los restantes: Boris Godunov, Bodas en el monasterio, Eugenio Oneguin y La novia del zar, a cargo de la ¨®pera del teatro Kirov, de Leningrado. Se ofrecer¨¢n cuatro representaciones de cada espect¨¢culo, las dos primeras de abono y las siguientes con venta ¨ªntegra en taquilla y para las asociaciones de los Amigos de la Opera.

La presente edici¨®n se considera temporada en lugar de festival y se crea una cuarta representaci¨®n dirigida a los aficionados al g¨¦nero oper¨ªstico no residentes en Madrid, que ser¨¢ canalizada a trav¨¦s de las asociaciones de Amigos de la ?pera de Madrid, Oviedo, Santa Cruz de Tenerife, La Coru?a, Bilbao, Santander y Valladolid. El precio de las localidades para las dos primeras representaciones oscila entre 3.000 pesetas (butaca de patio) y 1.000 (butaca tercer piso), y para tercera y cuarta, entre 500 y 150 en las mismas localidades.Como es tradicional, las entradas se agotan r¨¢pidamente, ya que s¨®lo las asociaciones de Amigos de la Opera ocupan el 80% seg¨²n coment¨® el intendente general del teatro de la Zarzuela, Federico Ordu?a, quien recuerda que para la funci¨®n libre del a?o pasado se llegaron a formar colas 72 horas antes de abrirse la taquilla. El presupuesto de la presente temporada es de noventa millones de pesetas y el Ministerio de Cultura, a trav¨¦s de la Direcci¨®n General de M¨²sica y Teatro, subvenciona con cerca de treinta millones. Se van a ofrecer 32 funciones, cinco m¨¢s que el a?o anterior, cuyo festival tuvo un coste similar. Federico Ordu?a destaca la progresiva ocupaci¨®n de profesionales espa?oles en las tareas musicales y de direcci¨®n esc¨¦nica, con cuatro t¨ªtulos producidos por el Teatro Nacional de la Zarzuela.

Espect¨¢culo total

Jos¨¦ Luis Alonso, director de escena de El trovador, de Verdi (1813-1901), es tambi¨¦n el autor de la escenograf¨ªa, inspirada en los grabados de Gustavo Dor¨¦ y el ambiente rom¨¢ntico en que fue escrita la ¨®pera, con libro de Salvatore Cammarano basado en el drama del gaditano Antonio Garc¨ªa Guti¨¦rrez. Es uno de los pocos directores, espa?oles amantes de la ¨®pera, ?un espect¨¢culo total, lleno de inter¨¦s y posibilidades?.Desde hace dos a?os, Jos¨¦ Luis Alonso es profesor interino en la c¨¢tedra de Escuela L¨ªrica en la Escuela Superior de Canto, donde, a instancias de su directora, Lola Rodr¨ªguez Arag¨®n, ha montado como ejercicios Don Pasquale, el primer acto de La flauta m¨¢gica, de Mozart, y un programa que presenta varias ¨¦pocas de la historia de la ¨®pera, desde la ¨®pera bufa, el verismo italiano y la ¨®pera moderna. La temporada pasada dirigi¨® en Madrid Pelleas y Melisande, de Debussy, con Victoria de los Angeles.

?Es asombrosa la sabidur¨ªa de Verdi?, dice Jos¨¦ Luis Alonso, ?para componer m¨²sica dram¨¢tica y sus conocimientos de teatro. La mayor¨ªa de sus obras tienen su origen en piezas teatrales, como Macbeth, Otelo, Falslaff, y se muri¨® sin componer El rey Lear?. El trovador forma parte del tr¨ªo de las obras populares de Verdi junto con Rigoletto y La traviata. ?Verdi crea la m¨²sica adecuada a este drama rom¨¢ntico espa?ol, de amores y venganzas sin l¨ªmites, y este gran melodrama (texto para la m¨²sica) est¨¢ perfectamente servido. Aunque El trovador me divierte mucho, entre las, obras de Verdi me quedar¨ªa siempre con Don Carlos. Ser¨ªa asombroso poderla montar en El Escorial?.

En la actualidad, seg¨²n Jos¨¦ Luis Alonso, ya no hay discusi¨®n sobre la primac¨ªa de la m¨²sica o la palabra en la ¨®pera. A partir de las interpretaciones de Mar¨ªa Callas se empieza a revalorizar la palabra, con trabajos preliminares de los contextos y las motivaciones de la m¨²sica. ?El director de escena tiene su protagonismo, tal vez excesivo, pero creo que era conveniente revalorizar la palabra. Ahora ya se habla de t¨ªtulos de ¨®pera identific¨¢ndolos con montajes de directores como Zeffirelli, Visconti, Ronconi o Polanski. Se suele olvidar que Stanislavski ten¨ªa una escuela de actores para trabajar en ¨®peras y mont¨® varias, entre ellas La Boheme, con un completo cuaderno de direcci¨®n?.

?El trovador es una ¨®pera apasionante, con una enorme teatralidad, entusiasma a los aficionados y es tremendamente dura para los cantantes, muy arriesgada vocalmente y seguida por el p¨²blico. La relaci¨®n entre el director esc¨¦nico y el musical suele ser dif¨ªcil y a veces tormentosa, pero en esta, ocasi¨®n ha habido una colaboraci¨®n muy estrecha con Od¨®n Alonso?.

No hay proyectos

Los limitados presupuestos estatales para la cultura es el principal obst¨¢culo para una normalizaci¨®n de la ¨®pera en Espa?a, caso excepcional en los pa¨ªses europeos de carencia de un teatro de la ¨®pera. El actual director general de M¨²sica y Teatro del Ministerio de Cultura, Juan Antonio Garc¨ªa Barquero, no ha tenido en cuenta los proyectos expuestos por su antecesor, Manuel Camacho, a su vez inspirados en los planes de Jes¨²s Aguirre como director general de M¨²sica.En junio de 1980, el ministro de Cultura, Ricardo de la Cierva, y el director general de M¨²sica y Teatro, Manuel Camacho, anunciaron la puesta en marcha de un teatro l¨ªrico nacional, con base en el teatro de la Zarzuela, de Madrid, con objeto de plantear ?la acci¨®n del Estado en materia l¨ªrica?. Seg¨²n este proyecto, el teatro de la Zarzuela acoger¨ªa las manifestaciones del teatro l¨ªrico nacional y en ¨¦l tendr¨ªan su sede la Compa?¨ªa Nacional de Opera, la compa?¨ªa l¨ªrica titular de la Zarzuela y los ballets nacionales.

Despu¨¦s de definir como ?un hecho cultural ocasional? la situaci¨®n de la ¨®pera en Espa?a, hicieron referencia a la limitada significaci¨®n como centro de producci¨®n del Liceo de Barcelona, ?los breves y costosos festivales promovidos por asociaciones de Amigos de la Opera, y la organizaci¨®n oficial del Festival de Madrid, este a?o convertido en temporada. El informe oficial se?ala la carencia de un teatro de la ¨®pera (no se hace menci¨®n a una posible reconversi¨®n del teatro Real en centro estable u ocasional de ¨®pera, como es habitual en el tema pol¨¦mico de la ¨®pera), y la insuficiencia y alto coste de los festivales, sobre todo el de Madrid.

La pol¨ªtica a medio plazo del ministro De la Cierva consist¨ªa en la creaci¨®n, ?ya en avanzado estado de elaboraci¨®n?, de una compa?¨ªa nacional de ¨®pera estable, con sede en el teatro de la Zarzuela, con un car¨¢cter itinerante y repertorio propio. Este proyecto de compa?¨ªa nacional de ¨®pera, para el que se hab¨ªa asignado un presupuesto de 65 millones de pesetas, est¨¢ descartado en la actual Direcci¨®n General de M¨²sica y Teatro. El director esc¨¦nico Rafael P¨¦rez Sierra confirm¨® a este peri¨®dico que hab¨ªa trabajado en el tema, junto con otros profesionales, durante a?o y medio. Seg¨²n los diversos medios consultados, el tema de la ¨®pera seguir¨¢ bloqueado con los actuales presupuestos, se continuar¨¢ con aislados festivales, que cubren una parte de la demanda oper¨ªstica o se acomete el proyecto de un teatro de la ¨®pera como centro estable, con la formaci¨®n de compa?¨ªa, orquesta y coros.