Son ya seis los muertos y 141 los afectados por el brote epid¨¦mico en Madrid y su provincia
Al menos seis personas han muerto en Madrid en los ¨²ltimos d¨ªas a causa de la epidemia de neumon¨ªa at¨ªpica detectada en Madrid hace unos d¨ªas, y un m¨ªnimo de 150 personas est¨¢n aquejadas de esta enfermedad e internadas en las principales cl¨ªnicas madrile?as, seg¨²n informaciones procedentes del Ministerio de Sanidad. Ayer fallecieron dos personas en el centro Ram¨®n y Cajal, una mujer de cincuenta a?os y otra de diecinueve, aunque los m¨¦dicos que las trataron se negaron a facilitar sus nombres. Las otras cuatro personas fallecieron durante la pasada semana (v¨¦ase EL PA?S del domingo). El resto de los ingresados tienen distintos grados de gravedad, aunque parece que ninguno corr¨ªa anoche peligro de muerte.
No obstante, las mismas fuentes oficiales solamente reconocen como v¨¢lida la cifra de cinco muertos, ya que, aseguran, una de las personas falleci¨® a causa de complicaciones cardiovasculares y no est¨¢ probado que la denominada neumon¨ªa at¨ªpica pudiera influir decisivamente en el desenlace.Mientras tanto, a medida que se ha ido facilitando informaci¨®n de la extensi¨®n de la epidemia (el Ministerio de Sanidad reconoci¨® ayer por vez primera este t¨¦rmino), un sentimiento generalizado de alarma ha cundido entre la poblaci¨®n de Madrid y su provincia, hasta el punto de que ayer se colapsaron los servicios de urgencia de cl¨ªnicas y ambulatorios. En este sentido, el Ministerio ha hecho una llamada a la serenidad, al asegurar que, si bien no se conoce a¨²n el origen de la enfermedad ni la enfermedad misma, se dispone de un medicamento -un antibi¨®tico- que combate eficazmente la neumon¨ªa at¨ªpica.En el mismo sentido tranquilizador, las fuentes citadas aseguraron que los fallecimientos pudieron ser debidos a fallos en la detenci¨®n de la enfermedad y a su tardanza en el tratamiento. Por esta raz¨®n, desde el pasado fin de semana la Secretar¨ªa de Estado para la Sanidad ha montado un ampl¨ªsimo dispositivo sanitario-log¨ªstico que abarca a la totalidad de la provincia. En s¨ªntesis, consiste en la centralizaci¨®n del tratamiento de la enfermedad en los principales catorce centros sanitarios de la capital de Espa?a -La Paz, Primero de Octubre, hospital Cl¨ªnico, Puerta de Hierro, Concepci¨®n, Ram¨®n y Cajal, Gran Hospital, Hospital Provincial, hospital del Rey, Ni?o Jes¨²s, General¨ªsimo, G¨®mez Ulla, hospital de la Armada y hospital del Aire, los cuatro ¨²ltimos, militares- y la creaci¨®n de una oficina permanente de coordinaci¨®n, instalada en la misma Secretar¨ªa de Estado.
Todos los m¨¦dicos de la provincia han sido advertidos del cuadro cl¨ªnico de la enfermedad, y tienen instrucciones concretas de enviar a todos los sospechosos a cualquiera de los catorce centros, cuyos servicios de urgencias est¨¢n tambi¨¦n concertados, para lo cual se ha dispuesto una flota especial de ambulancias. Cincuenta m¨¦dicos estudian la enfermedad
Hasta el momento, las autoridades han asegurado que el brote epid¨¦mico no ha trascendido los l¨ªmites geogr¨¢ficos de la provincia de Madrid, aunque parece ser que en algunas zonas lim¨ªtrofes, especialmente Segovia, se han podido detectar casos similares, extremo este que fue imposible confirmar oficialmente en el d¨ªa de ayer. No obstante. todas las delegaciones territoriales del pa¨ªs est¨¢n advertidas y preparadas para hacer frente a la epidemia. seg¨²n el Ministerio de Sanidad. El principal problema con el que se enfrentan los m¨¦dicos es el desconocimiento de la enfermedad, el germen que lo produce no se sabe a¨²n si es una bacteria o un virus, aunque parece que es este ¨²ltimo y el origen de la epidemia. Para ello, un equipo de cincuenta m¨¦dicos trabajan en el tema desde hace unos diez d¨ªas. La dificultad principal consiste en que para establecer estos puntos es necesario realizar cultivos de los g¨¦rmenes en animales -especialmente en ratas-, y este proceso dura unos quince d¨ªas, por lo que el Ministerio no estar¨¢ en condiciones de pronunciarse sobre el tema hasta la pr¨®xima semana. ?En cualquier caso?, se?al¨® S¨¢nchez Hanguindey (v¨¦ase art¨ªculo suyo en p¨¢gina 29), ?no se puede hablar de la enfermedad del legionario, como se ha, publicado. Es una neumon¨ªa at¨ªpica y se le pondr¨¢ apellidos en su momento?. Las autoridades sanitarias est¨¢n en contacto permanente con la Orzanizaci¨®n Mundial de la Salud, organismo este que apoya las medidas adoptadas por el Ministerio de Sanidad, seg¨²n comunic¨® un portavoz oficial de este organismo, y se han enviado para su estudio g¨¦rmenes y cultivos al laboratorio de Glasgow. Se estudia tambi¨¦n la posibilidad de enviar muestras a otro laboratorio de Atlanta (Estados Unidos), en la actualidad el m¨¢s avanzado del mundo. En Madrid, los estudios los est¨¢ realizando el Centro de Microbiolog¨ªa y Virolog¨ªa de Majadahonda y un departamento especializado del centro Ram¨®n y Cajal. Seg¨²n medios sanitarios, parece descartado que esta especie de neumon¨ªa se transmita a trav¨¦s del agua y parece m¨¢s bien que el contagio se produce por v¨ªa a¨¦rea, en unas determinadas condiciones de humedad, temperatura y altitud, por lo que no es posible hacer recomendaciones especiales de prevenci¨®n, exceptuada una mayor higiene personal. Este hecho, junto con los s¨ªntomas de la enfermedad, comunes en
los 150 casos tratados (v¨¦ase recuadro aparte) -s¨ªntomas por otra parte muy comunes, aunque es dif¨ªcil que se den todos ellos juntos-, y la profusi¨®n de todo tipo de rumores han hecho que, en cierto modo, haya cundido la alarma en la poblaci¨®n. Ayer, los servicios de urgencia de hospitales y ambulatorios, como ha quedado dicho, fue un colapso continuo, lo que entorpeci¨® no poco la marcha normal de los hospitales. Los continuos llamamientos hechos a la poblaci¨®n, y especial mente a los m¨¦dicos, por la Secretar¨ªa de Estado para la Sanidad, no fueron ajenos a esta psicosis colectiva. Estos llamamientos (los ya citados de enviar inmediatamente a aquellos sospechosos a centros grandes) provocaron no pocos problemas en los hospitales: centenares de personas hubieron de ser devueltas a sus domicilios y han tenido que ser reforzadas las plantillas m¨¦dicas, as¨ª como habilitados pabellones especiales en los mismos, aunque el peso lo est¨¢n llevando fundamentalmente tres centros m¨¢s especializados en enfermedades contagiosas: Ram¨®n y Cajal, Hospital del Rey y el hospital infantil del Ni?o Jes¨²s, ya que una gran parte de los afectados son ni?os. Tratamiento por antibi¨®ticos
El tratamiento que se est¨¢ dispensando a los aquejados de la neumon¨ªa consiste en un antibi¨®tico que se administra bien por v¨ªa oral, bien por v¨ªa intravenosa. Se trata de un medicamento de amplio espectro, que se aplica tambi¨¦n en la llamada enfermedad del legionario, y que a pesar de ser poco usual se encuentra en las farmacias.
Para evitar el acopio de este medicamento, y el hecho de que la gente se lo autoadministre, el Ministerio de Sanidad ha decidido no hacer p¨²blico el nombre del mismo -EL PA?S tambi¨¦n se reserva la difusi¨®n de la marca- y al mismo tiempo ha logrado reunir un importante almacenamiento del mismo, que actualmente est¨¢ depositado tanto en la secretar¨ªa permanente contra la epidemia como en una de las dependencias del complejo del Hospital del Rey. Una flota de coches especiales distribuyen este medicamento por los catorce hospitales principales
de Madrid y por los ambulatorios de las localidades m¨¢s pobladas de la provincia. Seg¨²n fuentes oficiales, por el momento no existe problema de abastecimiento de este producto farmac¨¦utico. Seis focos principales
Aunque se desconoce el foco de la epidemia y c¨®mo pudo llegar a Espa?a, y concretamente a la provincia de Madrid, se estima que el foco inicial est¨¢ en Torrej¨®n de Ardoz, y concretamente en un domicilio de la calle Campilla de esta localidad, donde el pasado 27 de abril falleci¨® el ni?o de ocho a?os Jaime Vaquero Garc¨ªa. Posteriormente se extendi¨® a otros puntos de la geograf?a madrile?a y, en concreto se han registrado casos en Pozuelo: Somosaguas, San Fernando de Henares -donde este fin de semana muri¨® la ni?a de cinco a?os Vanesa Gavil¨¢n-, Alcal¨¢ de Henares, Coslada, el propio Torrej¨®n de Ardoz y varios barrios de Madrid, entre ellos Aluche, Campamento y Santa Mar¨ªa, este ¨²ltimo al noreste de Madrid, en el distrito de Hortaleza. Marat¨®n de reuniones
Una marat¨®n de reuniones entre altos cargos del Ministerio y representantes de todos los hospitales de Madrid se viene sucediendo desde hace varios d¨ªas. Una no menos importante serie de notas oficiales de todo tipo se vienen produciendo igualmente en estas ¨²ltimas fechas, junto con numerosas declaraciones de los responsables sanitarios, con ¨¢nimo de tranquilizar a la poblaci¨®n. En todas ellas existe un denominador com¨²n: la confianza en el control y en la erradicaci¨®n de la enfermedad. Se insiste en la necesidad del tratamiento precoz; por ello, a las autoridades sanitarias no les preocupa el elevado n¨²mero de personas hospitalizadas. Por esta raz¨®n era imposible anoche precisar con exactitud el n¨²mero de afectados. De hecho, el Ministerio de Sanidad decidi¨® anoche hacer p¨²blica una nota oficial en la que se hablaba de cinco muertes y de m¨¢s de un centenar de internados, pero un sondeo realizado por redactores de EL PA?S en los principales centros hospitalarios permiti¨® confirmar que esta cifra supera los 150 casos.
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