Pol¨ªticos, militares y banqueros masones, implicados en un gigantesco esc¨¢ndalo en Italia
Ha estallado en Italia el mayor esc¨¢ndalo de la historia de la Rep¨²blica desde la segunda guerra mundial, con la publicaci¨®n, en la madrugada de ayer, de la lista de los integrantes de la logia mas¨®nica Propaganda 2, acusada de haber funcionado como una organizaci¨®n delictiva. Est¨¢n implicadas 953 personalidades pol¨ªticas, incluidos tres ministros, decenas de militares, diputados, banqueros, altos funcionarios y periodistas. Intensos rumores sobre una posible crisis gubernamental circulaban ayer en Roma.
Estos ¨²ltimos d¨ªas la Prensa italiana asegur¨®, citando a algunas fuentes judiciales, que la logia preparaba un golpe de Estado para reformar la Constituci¨®n y restringir las libertades.En la lista, que fue dada a conocer por el presidente del Consejo, el democristiano Arnaldo Forlani, figuran tres ministros (dos democristianos, Adolfo Sarti y Franco Foschi, y un socialista, Enrico Manca), veintitr¨¦s parlamentarios (incluidos el portavoz del grupo parlamentario socialista, Lelio Lagorio, y el secretario general del Partido Socialdem¨®crata, Pietro Longo), dos prefectos (uno de ellos, Mario Semperini, jefe de gabinete del primer ministro), ocho jefes superiores de polic¨ªa, seis almirantes (incluido el actual jefe del Estado Mayor, Torrisi), seis generales de carabinieri (entre los que destaca el jefe de los servicios secretos, general Grassini, el m¨¢ximo responsable de la lucha antiterrorista, general Dalla Chiesa, y siete generales de la Polic¨ªa Fiscal (cuerpo militar dirigido por el general Gianinni, tambi¨¦n implicado).
La lista menciona tambi¨¦n a veintid¨®s hombres de negocios, veintid¨®s banqueros, unos veinte periodistas y diecis¨¦is magistrados. En este ¨²ltimo lote destaca muy especialmente Roberto Calvi, presidente del Banco Ambrosiano, primer banco industrial privado italiano que acaba de adquirir parte del capital del grupo de la editorial Rizzoli, que edita el Corriere della Sera, principal diario del pa¨ªs. Angelo Rizzoli, propietario del grupo editorial, est¨¢ tambi¨¦n involucrado.
Cabe resaltar que s¨®lo tres grupos pol¨ªticos -radicales, comunistas y nueva izquierda- no tienen a ninguno de sus militantes en la famosa lista que el Consejo Supremo del Poder Judicial decidi¨® entregar al presidente de la Rep¨²blica, Sandro Pertini, y al jefe del Gobierno, Arnaldo Forlani. Este ¨²ltimo opt¨® por publicarla, aunque se ignora si en su totalidad, al tiempo que el jefe del Estado llamaba urgentemente a Par¨ªs el secretario general del Partido Socialista, Bettino Craxi, para pedirle que regresase a Italia.
Un poder oculto ligado a las altas finanzas
La logia mas¨®nica, cuyas actividades se comprometi¨® el martes ante el Parlamento a investigar a fondo Forlani, ha sido acusada por la Magistratura de haber actuado como un poder oculto implicado en numerosos esc¨¢ndalos financieros y pol¨ªticos. Su m¨¢ximo responsable, Licio Gelli, sospechoso de vinculaciones con sectores golpistas, ha huido al extranjero.Mientras la izquierda limpia ha empezado a pedir la dimisi¨®n de todos los personajes que figuran en la lista, los observadores romanos se?alan con cierta sorpresa que ninguno de los implicados ha sido procesado hasta el momento, sin duda porque la investigaci¨®n sobre esta ?presunta asociaci¨®n de delincuentes?, como la llama la Magistratura, no ha concluido.
Qu¨¦ duda cabe que la publicaci¨®n de la lista y de sus actividades va a traer importantes consecuencias para toda la clase pol¨ªtica italiana. La difusi¨®n de los diarios aument¨® ayer espectacularmente en toda Italia, mientras los corresponsales extranjeros comentaban que este es un pa¨ªs lo suficientemente parad¨®jico como para generar un alto n¨²mero de esc¨¢ndalos y al mismo tiempo desvelarlos. Esto pone de manifiesto el grado de democracia existente en la pen¨ªnsula.
A ¨²ltima hora de la tarde de ayer la direcci¨®n del Partido Comunista italiano (PCI) solicit¨® ya la dimisi¨®n del Gobierno Forlani, como consecuencia del esc¨¢ndalo mas¨®n.
El partido de Berlinguer exige un "asentamiento del Estado? y considera incapaz ?al Gobierno democristiano presidido por Arnaldo Forlani de llevar a cabo tal operaci¨®n?, ante lo cual exigen la dimisi¨®n del Gabinete, con las consecuencias pol¨ªticas propias de plantear una nueva crisis en el pa¨ªs.
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