La gasolina no subir¨¢ antes de final de a?o
La factura petrolera espa?ola no experimentar¨¢ ninguna gran convulsi¨®n durante el resto de 1981 y el consumidor podr¨¢ disfrutar durante todo el a?o de unos precios estables en los productos derivados del petr¨®leo, incluida la gasolina. Esta es la conclusi¨®n m¨¢s pr¨®xima a Espa?a que se puede sacar de los resultados de la sesenta conferencia ministerial de la Organizaci¨®n de Pa¨ªses Exportadores de Petr¨®leo (OPEP), que concluy¨® el martes por la noche en Ginebra.
Aunque todav¨ªa queda por despejar la inc¨®gnita de la evoluci¨®n de la peseta, cuya tendencia a la baja est¨¢ repercutiendo negativamente en el coste interno de la factura petrolera, parece previsible que los precios energ¨¦ticos no experimentar¨¢n ninguna variaci¨®n, tal como adelantaron a EL PAIS fuentes oficiales la pasada semana.El supuesto con el que los responsables energ¨¦ticos espa?oles trabajaban entonces era de que la reuni¨®n de la OPEP podr¨ªa acabar con una ligera alza del petr¨®leo saud¨ª, quiz¨¢ de uno o dos d¨®lares. Esta alza hubiera supuesto un ligero encarecimiento del barril medio importado por Espa?a, quiz¨¢ de algo menos que un d¨®lar. Afortunadamente, esta previsi¨®n no se ha cumplido, al menos por el momento.
El jeque Yamani, ministro de Petr¨®leo de Arabia Saud¨ª, insisti¨® ayer en Ginebra, quince horas despu¨¦s de concluida la reuni¨®n de la OPEP, que su pa¨ªs no tiene ninguna intenci¨®n de elevar en el m¨¢s inmediato futuro su precio de 32 d¨®lares. Yamani despej¨® asimismo las especulaciones en torno a un eventual recorte de su producci¨®n, al desmentir que Riad vaya a reducir sus 10,3 millones diarios.
Por ello, mientras el petr¨®leo se cotiza a la baja, el d¨®lar sube con relaci¨®n a la peseta, lo que hace que la ganancia primera quede absorbida por la segunda p¨¦rdida.
Con todo, los expertos del mercado del petr¨®leo estiman que los pa¨ªses consumidores podr¨¢n beneficiarse en los pr¨®ximos meses, y quiz¨¢ durante la primera parte de 1982, de una situaci¨®n ventajosa en el frente del petr¨®leo. La actitud de Arabia Saud¨ª, que ha recuperado el liderazgo de la OPEP, que perdi¨® con la revoluci¨®n iran¨ª, es de seguir inundando el mercado de petr¨®leo a riesgo de desplomar los precios.
Su objetivo es doblegar las voluntades de sus colegas de consorcio y forzarles a aceptar una estructura uniforme de precios basada en el llamado precio de referencia. Todo indica que si Yamani no ha conseguido alcanzar su meta en Ginebra, lo har¨¢ en Abu Dabi el pr¨®ximo diciembre.
Como el propio jeque saud¨ª declar¨® en Ginebra, ?lo que yo pretendo es dar un respiro a las econom¨ªas occidentales para que recuperen sus niveles tradicionales de crecimiento?. Lo que no dijo es que, de paso, Yamani apuntala el petr¨®leo como fuente principal de energ¨ªa, algo que tanto Arabia Saud¨ª y otros fuertes productores podr¨ªan perder a medio plazo de continuar la extravagante carrera alcista de los precios.
Estas afirmaciones, junto al irregular acuerdo alcanzado la noche anterior por el consorcio para congelar los precios hasta finales del a?o, dan margen para pensar que el mercado mundial de crudos permanecer¨¢ con la misma t¨®nica que en los ¨²ltimos meses.
Los precios seguir¨¢n bajando
Esto equivale a decir que los precios de los crudos continuar¨¢n bajando en los mercados internacionales, pese a la decisi¨®n de diez miembros del consorcio (todos menos Arab¨ªa Saud¨ª, Ir¨¢n e Irak) para reducir en un 10% sus vol¨²menes de producci¨®n.Los expertos est¨¢n de acuerdo que este ¨²ltimo convenio es pr¨¢cticamente ficticio. Tras la palabra reducci¨®n, lo que verdaderamente se esconde es incapacidad para vender crudo, dado el exceso de oferta (entre dos y tres millones diarios de barriles) que registra el mercado.
Incluso en el caso muy supuesto de que estos diez miembros de la OPEP, que apenas controlan la mitad de la oferta del consorcio, consiguieran restringir ese glut (superabundancia) de dos millones de barriles, la recuperaci¨®n de Ir¨¢n e Irak como exportadores de crudo en los pr¨®ximos meses dar¨ªa al traste con sus planes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.