La fauna pisc¨ªcola de los r¨ªos espa?oles se mantiene desde hace a?os de forma artificial
La fauna pisc¨ªcola de los r¨ªos espa?oles se est¨¢ manteniendo desde hace a?os de forma artificial, gracias a las repoblaciones realizadas por el Icona en las veinticuatro piscifactor¨ªas que mantiene en todo el pa¨ªs, seg¨²n los informes presentados en las Primeras jornadas de Ictiolog¨ªa Ib¨¦rica, que se clausuraron el pasado fin de semana en Le¨®n, con asistencia de unos 150 t¨¦cnicos espa?oles, portugueses, yugoslavos, franceses, italianos, daneses, canadienses, irlandeses y polacos. El furtivismo y, sobre todo, la contaminaci¨®n constituyen los dos principales peligros de la poblaci¨®n pisc¨ªcola espa?ola. Al menos una especie, el cangrejo aut¨®ctono, se encuentra en peligro inmediato de desaparici¨®n, por lo que este mismo a?o podr¨ªa declararse su veda absoluta en todo el territorio nacional.
Para Leopoldo Cu¨¦llar, jefe del departamento de acuicultura e ictiopatolog¨ªa del Instituto Nacional para la Conservaci¨®n de la Naturaleza (lcona), la totalidad de las enfermedades que est¨¢n afectando a las especies pisc¨ªcolas de la Pen¨ªnsula tienen relaci¨®n directa con la contaminaci¨®n, sin que sea posible cuantificar el coste de los da?os que ¨¦sta produce. A t¨ªtulo de ejemplo, se se?ala que el vertido de las aguas residuales de Madrid en el Manzanares impide cualquier tipo de vida en este r¨ªo y en unos cien kil¨®metros del r¨ªo Tajo, esta situaci¨®n se reproduce a peque?a escala en todas las regiones del pa¨ªs, incluidas las zonas rurales. cuyos n¨²cleos de poblaci¨®n carecen en su totalidad de estaciones depuradoras de aguas.Hasta el momento, las especies m¨¢s afectadas son los salm¨®nidos, y en particular las truchas, cuya poblaci¨®n tiene que renovarse continuamente desde las piscifactor¨ªas, tiempo atr¨¢s con ejemplares del subgrupo arco iris, importado del exterior, y ahora en un 70% con alevines de trucha com¨²n, adaptados en los criaderos despu¨¦s de varias generaciones. Para los expertos, ni siquiera las zonas monta?osas m¨¢s apartadas pueden considerarse ya como regiones v¨ªrgenes en cuanto a contaminaci¨®n, debido a la creciente movilidad de las poblaciones humanas. ?Con el autom¨®vil, los pl¨¢sticos llegan a todas las sierras?, dicen.
De acuerdo con los mismos informes, el cangrejo aut¨®cto no es en estos momentos una especie en peligro de extinci¨®n, calcul¨¢ndose que s¨®lo en los tres ¨²ltimos a?os el n¨²mero de ejemplares en los r¨ªos espa?oles se ha reducido a la mitad. Este dr¨¢stico descenso tiene su origen en la peste que afecta a la especie en todas las provincias del pa¨ªs, en la pesca indiscriminada a que est¨¢ siendo sometido por los altos precios que alcanza en el mercado y en la progresiva, contaminaci¨®n de las peque?as corrientes de agua.
La gravedad de la situaci¨®n ha obligado al lcona a plantearse las posibilidades de repoblar los r¨ªos afectados con especies alternativas y, en concreto, con el llamado cangrejo se?al, originario de Estados Unidos y que, en principio, aparece como m¨¢s resistente a la enfermedad, aunque pueda ser tambi¨¦n portadora del hongo que la produce. No obstante, pr¨¢cticamente en toda Europa han tenido que recurrir a la repoblaci¨®n con este tipo de can grejo.
Cat¨¢strofes pesqueras
En cuanto a la fauna marina, otros informes se han referido a la necesidad de arbitrar medidas que eviten futuras cat¨¢strofes para algunas de las especies de pesca m¨¢s frecuentes, entre ellas la sardina. Seg¨²n Manuel G¨®mez Larra?eta, del Instituto de Investigaciones Pesqueras de Vigo, ?recuperar los niveles de riqueza pisc¨ªcola que manten¨ªan las costas espa?olas en la d¨¦cada de los cuarenta costar¨ªa no menos de diez anos para otras especies, como la merluza, y no menos de cinco para la langosta?.Para G¨®mez Larra?eta, el riesgo de colapsos en el sector pesca no est¨¢ tanto en funci¨®n de la contaminaci¨®n de los mares o del exceso de capturas, como en factores naturales que todav¨ªa no han sido suficientemente estudiados. En concreto, se?ala que ?los ciclos de reproducci¨®n de las distintas especies no son en modo alguno constantes, sino que siguen una determinada din¨¢mica de generaciones. Este es uno de los problemas m¨¢s complejos y, pr¨¢cticamente, el m¨¢s importante que tiene hoy planteado la ecolog¨ªa?. Pero considera que esta hip¨®tesis es v¨¢lida tambi¨¦n para cualquier otra especie animal, desde los roedores hasta las plagas de langosta, dando lugar peri¨®dicamente a una enorme abundancia de individuos ?que termina generando una gran cat¨¢strofe para ellos mismos, ya que en el mar puede venirse abajo toda una pesquer¨ªa sin que aparentemente existan razones para ello?.
En cuanto a las zonas pesqueras espanolas, se?ala el experto del lcona que existe en ellas una especie, la sardina, ?que puede estar siempre al borde de una cat¨¢strofe de este tipo?. Y a falta de cuantificaciones exactas sobre los da?os econ¨®micos que ocasionar¨ªa, a?ade que ?la producci¨®n bajar¨ªa aproximadamente del orden de veinte veces sobre la actual, de 100.000 a 20.000 toneladas?.
Opinan los t¨¦cnicos, sin embargo, que estos riesgos repercutir¨ªan en la econom¨ªa espa?ola no tanto en funci¨®n de los caladeros nacionales, como en relaci¨®n con las pesquer¨ªas exteriores, que requieren para conservarse la aportaci¨®n de estudios e investicaciones de los pa¨ªses concesionarios, entre ellos Espa?a, ?para tener un derecho diplom¨¢tico e, incluso, moral sobre ellas?.
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