Juan Pons bar¨ªtono, describe sus progresos en el mundo de la opera
Interpreta un importante papel en "Lucia di Lammermoor", de Donizetti
?Estoy luchando mucho para que se note una evoluci¨®n de un a?o a otro y me gustar¨ªa conseguirla. Quisiera que. este, progreso llegara al p¨²blico?, afirma el joven bar¨ªtono mallorqu¨ªn Juan Pons, consagrado como. figura de talla internacional, al inaugurar la temporada de la Scala, con el papel principal -de Falstaff, en la ¨®pera de Verdi Lucia di Lammermoor.- Juan Pons empez¨® a cantar como bajo en el coro del Liceo, en el verano de 1970, y a principios de 1978 super¨® su prueba de fuego con el Nabucco, despu¨¦s de ser descubierto como bar¨ªtono por Montserrat Caball¨¦. Actualmente acaba de rodar una pel¨ªcula de Cavalleria rusticana y Pagliacci, con el director Zefferrelli.
Pregunta. Usted empez¨® a cantar ¨®pera en el coro del Liceo. ?C¨®mo ingres¨® en ¨¦l?Respuesta. Interpretando como solista del coro de la catedral de mi pueblo Ojos de Espa?a, en una gira por Barcelona, me escucharon y propusieron incorporarme a aqu¨¦l. Estaba a punto de casarme, pero decid¨ª probar y aplazar la boda por un a?o. Era el verano del setenta hasta entonces no hab¨ªa escuchado nada de ¨®pera. Me gustaba la zarzuela y era un gran entusiasta-de Manuel Asensi, pero la ¨®pera ni siquiera la entend¨ªa. Empec¨¦ en aquel coro y, poco a poco me fueron dando papeles secundarios de bajo: Gioconda, Don Carlo, Forza, un aria en el recital homenaje a Lauri Volpi... Hasta que un d¨ªa hube de sustituir a-tltima hora al Banquo de Macbeth. Este fue mi primer papel de importancia. Entretanto ya hab¨ªa aprendido italiano y hecho los cursos delConservatorio de Barcelona. Me hab¨ªa casado y mi mujer tambi¨¦n cantaba en el coro, para as¨ª ayu-dar a los gastos familiares.
P. ?Qui¨¦n le indic¨® que usted. no era realmente bajo, sino bar¨ªtono?
R. Un d¨ªa, cantando- Aida, con Pl¨¢cido,Domingo y Montserrat Caball¨¦, ella me dijo -que quer¨ªa, escucharme en su casa. En vez del aria. de Felipe II me pidi¨® el Di Provenza il Mare, de Traviata, que como era de bar¨ªtono no lo conoc¨ªa y hube de ensayarlo con la partitura delante. Entonces me dijo: ?T¨² eres bar¨ªtono?, y a m¨ª me sent¨® muy mal porque, "con toda la ilusi¨®n que hab¨ªa ido all¨ª, ahora estaba perdido. Continu¨¦ buscando consejo y, en Palma, Bergonzi y Giaiotti me confirmaron aquella impresi¨®n. A partir de entonces comenc¨¦ a alternar ambos repertorios, pues Montserrat me iba ofreciendo papeles principales de bar¨ªtono y en ocasiones, incluso, imponi¨¦ndome en algunos teatros. Por ello la estoy tremendamente agradecido.
P. ?Cu¨¢ndo pens¨®.que podr¨ªa alcanzar categor¨ªa internacional?
R. A principios de 1978, Cuando Carlos Caball¨¦ me propuso un contrato en exclusiva, y como prueba de fuego un Nabucco, en Las Palmas. Aunque me dio mie-do, acept¨¦. Ya en 1979 actu¨¦ en Colombia, San Francisco, Covent G¨¢rdeh..., y, de nuevo, en el Liceo,- ya como bar¨ªtono, en Andrea Chenier.
P. ?Y c¨®mo surgi¨® el contrato para la Sc¨¢la?
R. En el verano de 1980, Carlos me concert¨® una cita en Madrid con el maestro Siciliani, director de la Scala, que hab¨ªa venido a Madrid para escuchar a Montserrat en Mar¨ªa Stuardo. Hice una audici¨®n y me habl¨® de Pagliacci.
Por aquel entonces andaban buscando un bar¨ªtono para Falstaff y creo que mi fisico le dio la idea.
Semanas despu¨¦s, ante mi incredulidad, me comunic¨® que adem¨¢s de Paghacci deseaba que inaugurase la temporada como Falstaff. Fui a Mil¨¢n, hice una prueba, me vio StrehIer y en un secreto casi total me pusieron un maestro durante quinced¨ªas para estudiar la obra. Despu¨¦s de un mes de ensayos absolutamente agotador, de nueve d¨¦ la ma?ana a doce de la noche," con comida en el camerino, lleg¨® el d¨ªa? de la, premier y francamente, creo que fue un ¨¦xit¨® enorme de p¨²blico y cr¨ªtica. Muy superior a lo que yo pod¨ªa esperar.
P. ?Cu¨¢l es su repertorio preferido? ?Le gusta la ¨®per¨¢ alemana?
R. Todo Verdi y algunas ¨®peras ver¨ªstas como Pagliacci, Ch¨¦nier y, en especial, Tosca. La ¨®pera alemana no me atrae nada de momento.
P. ?A qu¨¦ bar¨ªtonos del pasado admira?
R. Bastianini y Gobbi. Yo'no tengo realmente una discoteca, pero para estudiar Falstaff compr¨¦ cinco versiones: Stabile, Valdengo, Fischer-Dieskau, Geraint Evans y Gobbi. Me gust¨® mucho la interpretaci¨®n de Gobbi.
P. ?Cu¨¢les son sus proximas metas?
R. De momento, cumplir lo que tengo en perspectiva. Con esto ya estoy contento. Estoy luchando mucho para que se note una evoluci¨®n de un a?o a otro y me gustar¨ªa cons¨¦g¨²irlo. Estos d¨ªas comenc¨¦ a escuchar por radio una grabaci¨®n de mis Payasos de hace tres a?os y tuve que apagarla, porque me pareci¨® horrible. Quisiera que est¨¦ progreso le llegase al p¨²blico.
P. ?Que proyectos hay en cari¨¦ra?
R. Acabo de rodar un filme de Cavalleria rusticana y Pagliacci, con Zefferrelli. En cuanto a actuaciones, tengo Don Carlos y Traviatas. por la Rep¨²blica Federal de Alemania, y Luc¨ªa, Chenier y Tosca, en Viena. En la Opera de Par¨ªs har¨¦ Falstaff y Payasos. Debutar¨¦ con Macbeth, en Washington... Por Italia hay que el a?o pr¨®ximo volver¨¦ a la Scala con el Falstaff y otra obra.
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