Tensa situaci¨®n en Casablanca tras los enfrentamientos del s¨¢bado entre manifestantes y polic¨ªa

El Ministerio del Interior marroqu¨ª hizo p¨²blico ayer el balance oficial de v¨ªctimas de los disturbios registrados en Casablanca durante el pasado fin de semana, que asciende a 66 muertos y 110 heridos. Las fuerzas de oposici¨®n, sin embargo, hablan de m¨¢s de doscientos muertos en los graves enfrentamientos.

El comunicado oficial indica que la mayor¨ªa de las v¨ªctimas sufrieron heridas causadas por ?arma blanca, piedras u objetos contundentes?. Por otra parte, un dirigente de la Uni¨®n Socialista de Fuerzas Populares (USFP), grupo de oposici¨®n, estim¨® ayer en por lo menos doscientos muertos y varios millares de heridos el balance de v¨ªctimas, y a?adi¨® que ?todas ellas fueron alcanzadas por balas?.Numerosos edificios, entre ellos los que albergaban a veintitr¨¦s sucursales bancarias, fueron destruidos o da?ados en los disturbios del fin de semana, indica el comunicado. Se registraron actos de pillaje e incendios, de acuerdo con la versi¨®n oficial.

El Ministerio del Interior afirma, finalmente, que ?no tolerar¨¢ que actos criminales similares atenten contra las libertades de los ciudadanos, sus bienes o su tranquilidad?.

En Par¨ªs, el primer secretario de la USFP, Abderahim Buabid, declar¨® anoche que el Gobierno de Rabat es el ?¨²nico responsable? de los sucesos de Casablanca, y juzg¨® ?rid¨ªcula? la acusaci¨®n de que existe una complicidad exterior detr¨¢s de estos incidentes.

El rey de Marruecos, Hassan II ten¨ªa previsto viajar hoy, martes, a Nairobi, donde se celebra la cumbre de la Organizaci¨®n para la Unidad Africana (OUA), que tiene en su agenda el tema del Sahara occidental. Anoche no se sab¨ªa con certeza si el soberano marroqu¨ª aplazar¨ªa o no su viaje a la capital de Kenia a causa de los graves disturbios de Casablanca.

Todas las actividades laborales de Rabat y Casablanca, las dos principales ciudades marroqu¨ªes, y especialmente los transportes p¨²blicos y el comercio, quedaron paralizados el s¨¢bado, en protesta por la carest¨ªa de la vida.

Ayer, la situaci¨®n hab¨ªa vuelto a la normalidad, aunque persist¨ªa una cierta tensi¨®n puesta de relieve por la presencia, en Rabat y Casablanca, de importantes efectivos del Ej¨¦rcito y la gendarmer¨ªa ante los edificios p¨²blicos y en los puntos neur¨¢lgicos de las ciudades,

Casablanca estaba a¨²n el domingo tomada por las fuerzas de orden p¨²blico, sobrevolada por helic¨®pteros y el acceso a los barrios de Mohammadi y Shata, donde los comerciantes permanec¨ªan en huelga, estaba prohibido.

Entre los fallecidos figura un ciudadano franc¨¦s, Alexandre Dubois, de 63 a?os de edad, muerto al volante de su veh¨ªculo al recibir una pedrada. Un coronel alem¨¢n jubilado, Dieter Zimbal, result¨® herido en la cabeza.

En Madrid, Mustaf¨¢ Aziz, primer secretario de la Uni¨®n de Dem¨®cratas Marroqu¨ªes (UDM, clandestino) asegur¨® ayer que unos 250 militantes de su partido hab¨ªan sido detenidos.

Las dificultades econ¨®micas que atraviesa Marruecos constituyen el tel¨®n de fondo de la explosi¨®n de violencia que conoci¨® Casablanca, la capital comercial del pa¨ªs. La sequ¨ªa excepcional, que ha reducido en un 50% la cosecha de este a?o, ha obligado al Estado a incrementar las importaciones de cereales. Paralelamente, la guerra del Sahara perjudicaba gravemente las finanzas del Estado, a pesar de la ayuda econ¨®mica saud¨ª.

El 28 de mayo pasado el Gobierno anunci¨® un alza media del 30% de los productos alimenticios de primera necesidad (76% para la mantequilla, 14% para la leche). La protesta genem1izada de todos los partidos pol¨ªticos incit¨® al Gobierno a disminuir las alzas en un 50%, pero esta concesi¨®n no pareci¨® suficiente a la Confederaci¨®n Democr¨¢tica del Trabajo, que opt¨® por convocar una huelga de protesta el pasado s¨¢bado.

El primer ministro marroqu¨ª, Maati Buabid, lanz¨® el domingo por la noche una seria advertencia a los ?instigadores de des¨®rdenes?.

En una declaraci¨®n le¨ªda en tono en¨¦rgico por radio y televisi¨®n, Buabid dio claramente a entender que los disturbios de Casablanca hab¨ªan sido teledirigidos desde el extranjero y record¨® que su desencadenamiento coincide con el desplazamiento a Nairobi del rey Hassan II para ?acabar definitivamente con el artificial problema del Sahara?.