Escaso eco en Argentina de la huelga general convocada por los sindicatos peronistas

La huelga general de veinticuatro horas organizada ayer por la Confederaci¨®n General del Trabajo argentina -tendencia peronista- no ha recibido m¨¢s que un apoyo parcial, seg¨²n las primeras indicaciones procedentes de Buenos Aires. Los sindicatos de transportes, del sector p¨²blico y de los empleados de comercio no siguieron la consigna de huelga y han quitado una gran parte de su fuerza a la protesta, que ha sido seguida fundamentalmente en el cintur¨®n industrial de la capital argentina.

Buenos Aires presentaba ayer un aspecto pr¨¢cticamente normal, lo mismo que las grandes capitales provinciales. En la periferia de la capital, donde se concentran las industrias m¨¢s afectadas por la grave crisis econ¨®mica argentina, los huelguistas se estiman en alrededor del 35%.En el puerto bonaerense, la huelga fue muy escasamente seguida por la ma?ana. Lo mismo sucedi¨® en ciudades como Rosario y C¨®rdoba, al noroeste de la capital, donde la actividad era casi normal en todos los sectores. El de Prensa fue uno de los pocos que se sum¨® al paro general.

Los ferrocarriles han sufrido retrasos en algunas I¨ªneas, pero en general no se produjeron alteraciones graves del transporte.

La huelga general, organizada para reclamar aumentos de sueldo, el relanzamiento del aparato productivo y el retorno a un sistema de gobierno democr¨¢tico, no ha sido seguida por el sector sindical dialoguista, integrado por la Confederaci¨®n Nacional del Trabajo y el grupo de veinte sindicatos independientes (CNT-20). Este sector mantiene desde hace un mes una estrategia de di¨¢logo con el Gobierno militar del general Viola.

Los representantes de la CGT, ¨²nicos organizadores del paro, hab¨ªan advertido la v¨ªspera sobre las dificultades de preparaci¨®n del movimiento de protesta, debido a las numerosas intimidaciones sufridas por responsables sindicales y al n¨²mero de sindicatos intervenidos por funcionarios gubernamentales. El Gobierno militar argentino hab¨ªa recordado que estaban rigurosamente prohibidas todas las huelgas.

Desde el lunes, los principales dirigentes de la CGT se hab¨ªan desperdigado por las provincias para evitar arrestos masivos como los que siguieron a la ¨²ltima huelga general, en abril de 1979. A pesar de ello, cinco dirigentes obreros han sido detenidos.

Tambi¨¦n ayer los peque?os comerciantes de Buenos Aires iniciaron una protesta consistente en apagones de escaparates en defensa de la reactivaci¨®n econ¨®mica.