William Wyler, director de "Ben-Hur" y "Horizontes de grandeza", muri¨® a los 79 a?os

William Wyler, el director de cine norteamericano que realiz¨®, entre otras, la pel¨ªcula Ben-Hur, muri¨® a ¨²ltima hora del lunes pasado en su casa de Beverly Hilis (California, Estados Unidos), a consecuencia de un ataque cardiaco. Wyler hab¨ªa nacido en Mulhouse (Francia) en 1902 y seinstal¨® definitivamente en Estados Unidos en 1920. Es uno de los directores m¨¢s prol¨ªficos de la historia del cine. ?Lo primero que exijo de un filme?, dec¨ªa recientemente en una revisi¨®n de su obra, ?es que contribuya a darnos a conocer el testimonio social de una ¨¦poca?.

William Wyler acababa de regresar de Londres, donde hab¨ªa pronunciado varias conferencias en el Instituto Cinematogr¨¢fico. Al d¨ªa siguiente de regresar de Europa le sorprendi¨® el ataque cardiaco que termin¨® con su vida, seg¨²n anunci¨® la hija del director, Judith Sheldon.Wyler, que fue en su momento discutido por las corrientes cr¨ªticas de los j¨®venes cineastas, sobre todo por los de la llamada nouvel vague francesa, viv¨ªa en las sombras en los ¨²ltimos tiempos desde que se retir¨® del cine, en 1970, tras el estreno de su ¨²ltima pel¨ªcula, La liberaci¨®n de L. B. Jones. Su obra, sin embargo, ha llenado casi medio siglo de cine americano y mundial.

Obtuvo tres oscars como director y fue presentado por la Academia de Ciencias y Arte Cinematogr¨¢fico para la obtenci¨®n del Oscar en trece ocasiones. Algunas de las 35 pel¨ªculas que realiz¨® a lo largo de su vida han batido marcas de exhibici¨®n y taquilla.

Tras estudiar comercio y m¨²sica en Lausana y Par¨ªs, Wyler emigr¨® en 1920 a Nueva York, donde comenz¨® a adaptar obras para el cine (Esos tres, Punto muerto y La loba, de Lilliam Hellman. En 1925 comenz¨® a trabajar como director y realiz¨® veinte cortometrajes del g¨¦nero western. En 1928 adquiri¨® nacionalidad norteamericana y en 1934 contrajo matrimonio con la actriz de teatro Margaret Sullivan, a la que dirigi¨® en el filme Una chica angelical. Dos a?os despu¨¦s se cas¨® con la actriz Margaret Taulchet.

Durante la segunda guerra mundial realiz¨® pel¨ªculas de car¨¢cter militar para el Ej¨¦rcito de Estados Unidos (The Menhis Belle y Thunderbolt). Para entonces ya hab¨ªa rodado La se?ora Miniver.

En 1945 fund¨®, en colaboraci¨®n con Samuel Briskin, Frank Capra y George Stevens, la compa?¨ªa Liberty Films, que se fusion¨® en 1947 con Paramount. Entre tanto, Wyler aparec¨ªa ya como el cineasta ideal de los norteamericanos en una d¨¦cada de austeridad econ¨®mica y moral. Su nombre se asoci¨® r¨¢pidamente a un concepto de calidad, a una garant¨ªa de seriedad que le prohib¨ªan cualquier veleidad.

El cine que defend¨ªa y practicaba Wyler reposaba en gran parte sobre un aparato dram¨¢tico convencional, pero tambi¨¦n eficaz (Dead end, 1937; Jezabel, 1938, en la que dirigi¨® por primera vez a Bette Davis; Cumbres borrascosas, 1939).

Como director, William Wyler trabaj¨® con muchas de las grandes figuras del cine americano, a quienes utilizaba como soporte de ¨¦xitos de ventas. Gary Cooper, Montgomery Cliff, Bette Davis, Audrey Hepburn, Olivia de Havilland, Hugh Griffith y Charlton Heston fueron algunos de los ?monstruos de Hollywood? que trabajaron con Wyler.

A pesar de que la mayor parte de sus pel¨ªculas fueron dramas sentimentales dirigidos casi exclusivamente al p¨²blico femenino, consigui¨® salirse de esta t¨®nica en una obra de factura moderna: El coleccionista (1964).

A partir de 1966, Wyler se entretuvo en pel¨ªculas de menor significaci¨®n (C¨®mo robar un mill¨®n de d¨®lares), hasta llegar a la ¨²ltima, La liberaci¨®n de L. B. Jones (1970). Despu¨¦s se retir¨® del cine activo comercial. ? Mis proyectos y reafielades?, dec¨ªa en 1978, ?son los de descansar, dormir, viajar y no sentirme presionado para rodar ninguna nueva pel¨ªcula?

Wyler ten¨ªa una c¨¢mara super-8 equipada con los ¨²ltimos adelantos de la t¨¦cnica y con la que filmaba escenas de la vida de su familia. ?Ahora soy un cineasta amateur, cuando los aficionados sue?an con ser profesionales. Soy un profesional que ha terminado en el cine amateur?.

?El trabajo de un realizador de cine?, dec¨ªa en otra ocasi¨®n, ?es particularmente ingrato. Su tarea y responsabilidad es enorme, pero est¨¢ peor pagada que cualquiera y nadie conoce su nombre. Lo primero que exijo en un filme es que contribuya, aunque sea un poco, a darnos a conocer desde la pantalla el testimonio social ele una ¨¦poca. El trabajo de un cineasta es el de contar lo mejor posible una histor¨ªa con la c¨¢mara y de potenciar los valores del gui¨®n y de los actores?.