La Guardia Civil dej¨® en libertad a un polic¨ªa que dispar¨® contra cinco j¨®v¨¦nes en C¨¢ceres
Lo que era un final de fiesta a las 7.30 horas del domingo se pudo convertir para cinco j¨®venes de AP deacentenera (C¨¢ceres) en un drama. Los cinco j¨®venes -Juan Franciscc¨ª y Ezequiel Monterroso, Fausto Rentero, Ignacio Calder¨®n y Jos¨¦ Manuel Gil- hab¨ªan estado en las fiestas de la vecina localidad de Deleitosa, y al llegar al r¨ªo, aunque hab¨ªa dos tiendas de campa?a cerradas, decidieron darse un ba?o desnudos. Una persona de las que estaban en la tienda, polic¨ªa nacional, de apellido Palacios, sali¨® de la misma con una pistola y efectu¨® tres disparos contra los j¨®venes, uno de los cuales pas¨® a escasos cent¨ªmetros de la cabeza de uno de ellos. Los tres impactos pueden verse sobre las rocas, donde a¨²n quedan restos de plomo.El polic¨ªa nacional en cuesti¨®n, que estaba acampado con otros dos matrimonios y varios ni?os desde hac¨ªa tres d¨ªas, no intercambi¨® palabra alguna con los j¨®venes ba?istas antes de efectuar los disparos, hasta que uno de ¨¦stos, que estaba fuera del agua, le recrimin¨® su acci¨®n, en tanto que otro, creyendo que le hab¨ªan hecho disparos de fogueo, se enfrent¨® a ¨¦l dici¨¦ndole: ?Si me quieres matar, por lo menos av¨ªsame?. Tras la discusi¨®n, el polic¨ªa nacional efectu¨® un nuevo disparo, ¨¦ste al aire.
Al sonar los primeros disparos, otro de los hombres acampados sali¨® de la tienda con una carabina en las manos, aunque no lleg¨® a usarla. Los j¨®venes han declarado a EL PAIS que ?no entendemos c¨®mo nos dispar¨®, a no ser por la matr¨ªcula del coche que llev¨¢bamos, que es de Bilbao?.
Lo cierto es que los dispa ros existieron, porque hay huellas, aunque los casquillos fueron recogidos por el polic¨ªa nacional, que us¨® la pistola. Los j¨®venes, considerados en el pueblo como progresistas, presentaron la correspondiente denuncia de los hechos a la Guardia Civil del pueblo, que, seg¨²n nos han dicho, ?trat¨® de quitar m portancia alcaso, ya que nos dijeron que no nos hab¨ªan matado, al tiempo que a?ad¨ªa el cabo que nos pod¨ªa meter en la c¨¢rcel por esc¨¢ndalo p¨²blico ?.
El comandante de puesto de la Guardia Civil dijo a EL PAIS que no pod¨ªa hacer declaraciones, que hab¨ªa enviado el atestado al juzgado correspondiente y que, por tanto, era secreto, aunque apunt¨® el dato de que, por otra parte, pone en duda, era polic¨ªa nacional, quej¨¢ndose de que el asunto trascienda. ?Las se?ales?, nos dijo, ?pueden ser de un pico?.
Los j¨®venes, por su parte, manifiestan que en ning¨²n momento provocaron a quien les dispar¨® y que en el cuartelillo de la Guardia Civil se les trat¨® de intimidar, amenaz¨¢ndoles con la c¨¢rcel para que no movieran el tema. Es m¨¢s: nos han informado en el pueblo que, tras la denuncia, el comandante de puesto envi¨® a un n¨²mero para que avisara al polic¨ªa nacional de -que ten¨ªa que ir al pueblo a declarar, cosa que hizo. M¨¢s tarde, levant¨® la tienda y se march¨®.
Los j¨®venes no entienden c¨®mo la autoridad del pueblo dej¨® marchar sin m¨¢s a alguien que hab¨ªa atentado contra sus vidas. Lo mismo que el senador socialista por C¨¢ceres, Juan Manuel Cuadrado, con el que hablamos en el pueblo. Dice el senador que este no es un hecho aislado y que va a presentar una pregunta ante la C¨¢mara, en la que se?ala los fallos en la actuaci¨®n de la Guardia Civil en este caso, .porque ?no entiendo c¨®mo.han intentado disuadir a los j¨®venes cuando denunciaban un asunto tan grave?. El senador dijo que ?no queremos que vuelva a ocurrir otra cosa igual?, para lo que ?vamos a ir hasta el fondo en el asunto?.
Los j¨®venes agredidos est¨¢n recibiendo numerosas muestras de solidaridad por parte de los j¨®venes de su pueblo y de otros vecinos que n¨® entienden que, con lo que ha pasado, las cosas queden igual y que no se haya detenido aquien realiz¨® los disparos: un hombre de unos 35 a?os, procedente del pueblo, aunque lleva muchos a?os fuera y que, seg¨²n dicen en el pueblo, est¨¢ destinado en los antidisturbios de M¨¦rida. Su coche, en cuya puerta se lee Jos¨¦ Antonio, es un Seat 124, gris, matr¨ªcula B-704360.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.