Una cocinera italiana encuentra cuatro perlas en un mejill¨®n

Laura Costa se llama la agraciada. Es una sencilla cocinera de un centro turista de la costa del Adri¨¢tico que, mientras preparaba el otro d¨ªa la comida para sus clientes, se qued¨® embobada alabrir un mejill¨®n: dentro hab¨ªa cuatro preciosas perlas naturales". En seguida un famoso joyero le ha ofrecido 600.000 pesetas por cada una. A la cocinera le ha faltado poco para que no le d¨¦ un s¨ªncope de alegr¨ªa. Y ya sue?a con comprarse una casa, que hab¨ªa sido la gran ilusi¨®n de su vida: "No quiero un palacio. Me bastan dos habitaciones, pero m¨ªas", ha dicho.La noticia de las perlas escondidas en el mejill¨®n ha corrido como un rel¨¢mpago en Chioggia, la ciudad marinera en cuyo mar hab¨ªa sido pescado el rico mejill¨®n. Chioggia es uno de los puertos m¨¢s activos de todo ¨¦l Adri¨¢tico, y en este mar es la primera vez que aparece una perla. La pesca ha sido realizada, concretamente, en la peque?a localidad llamada Isla Verde, que ha sido asaltada literalmente por pescadores profesionales y aficionados.

No es la primera vez en la historia que un mejill¨®n roba a las ostras el privilegio o la enfermedad de engendrar en su seno una perla. Pero en el Adritico es la primera vez que se produce este fen¨®meno. Los especialistas que han examinado ya las cuatro perlas encontradas por Laura Costa han afirmado que son s¨®lo un poco inferiores en calidad a las mejores perlas del oc¨¦ano Indico. La composici¨®n es id¨¦ntica: 92% de carbonato de calcio cristalino, 6% de sustancia org¨¢nica y el 2%, de agua, que es la misma composici¨®n de la madreperla.

Lo que m¨¢s ha chocado es que, en realidad, los moluscos que enferman de perla (ya que la joya preciosa, para la ostra o el mejill¨®n, es s¨®lo una especie de c¨¢ncer, un cuerpo extra?o, un par¨¢sito o un grano de arena que estimula la secreci¨®n que acabar¨¢ formando la perla) normalmente se hallan a grandes profundidades, mientras el mejill¨®n encontrado en Chioggia estaba casi en la superficie, pegado a un escollo.

Para la peque?a ciudad veneciana, este verano ya no habr¨¢ crisis tur¨ªstica. La noticia del mejill¨®n con las perlas ha despertado tal curiosidad que est¨¢n llegando de todas partes italianos y extranjeros que desean probar la suerte.

En el centro tur¨ªstico donde la cocinera ha encontrado las cuatro perlas alguien ha querido plantear el problema sobre qui¨¦n es el verdadero propietario de las cuatro perlas encontradas en el mejill¨®n por la cocinera. Pero ¨¦sta ha zanjado en seguida la cuesti¨®n: "Las perlas son m¨ªas", ha dicho, escondi¨¦ndolas acto seguido en el pecho, dentro de un pa?uelo, "y no me las quitar¨¢ ni el lucero del alba". Pues no faltar¨ªa m¨¢s. Lo dicen hasta los libros m¨¢s antiguos de jurisprudencia.