Las otras drogas, las Iegales

Me atrevo a declarar incompetente a nuestra sociedad para atajar el problema de la droga ilegal por lo que tiene de rid¨ªculo que pretenda realizar dicha labor quien da el visto bueno y pone todos los medios necesarios para promocionar otra serie de drogas de, mayor repercusi¨®n y trascendencia.El caso mas sangrante es el del alcohol, resultando que por cada treinta personas que fallecen a consecuencia de la hero¨ªna fallecen 10.000 personas en Espa?a a consecuencia del alcohol, provoca el 35% de los accidentes ce tr¨¢fico y el 40% de los ingresos en psiqui¨¢tricos. La OMS la califica de droga dura, y no s¨®lo no est¨¢ prohibida , sino que goza de todo tipo de bendiciones; se realizan grandes campa?as publicitarias y sus cosechadores son los mayores terratenientes del pa¨ªs.

Y partiendo de algo tan elemental se puede llegar a otro tipo de drogas que igualmente son bendecidas y aceptadas dentro de la normativa social m¨¢s elemental, como pueden ser los barbit¨²ricos (analg¨¦sicos, sedantes, estimulantes, hipn¨®ticos ... ), cuyo abuso les hace actuar como drogas a todos los efectos, o el tabaco, cuya privaci¨®n puede causar estragos ps¨ªquicos, que en casi nada tienen que envidiar al s¨ªndrome de abstinenela de la droga tradicional. Dejando a un lado los efectos f¨ªsicos, de puro visibles que son.

Es todo esto tan cierto, es tan cierto que unos cuatro millones de espa?oles abusan de medicamentos, que hay cerca de tres millones de alcoh¨®licos, m¨¢s de doce millones que son fumadores habituales, que un buen porcentaje es cafel¨ªcola, etc¨¦tera, que resulta grotesco que sea un sector en especial el que tenga que pagar tal desbarajuste./