El abogado de Tejero no menciona la agresi¨®n al teniente general Guti¨¦rrez Mellado

?El d¨ªa 10 de enero de 1981 se celebra un almuerzo en la Capitan¨ªa General de la III Regi¨®n Militar, al que asisten el teniente general Milans del Bosch, su ayudante el teniente coronel M¨¢s, el general Armada Comyn y el coronel Ib¨¢?ez Ingl¨¦s, segundo jefe de Estado. Mayor de la III Reg¨ª¨®n Militar, con sus respectivas esposas, sosteni¨¦ndose una conversaci¨®n privada en el despacho del anfitri¨®n, teniente general Milans del Bosch, entre ¨¦ste y el general Armada, antes y despu¨¦s del almuerzo.El general Armada refiri¨® las conversaciones que hab¨ªa tenido en el Pirineo con su majestad el Rey y su majestad la Reina, manifestando el general Armada que el Rey estaba ya harto de Su¨¢rez o de la actuaci¨®n de ¨¦ste y que estaba viendo la posibilidad de cambiarlo como jefe de Gobierno; que hab¨ªan pasado revista a los futuros presidentes de Gobierno y que no encontraban ninguno id¨®neo. Que el Rey se inclinaba por un Gobierno de civiles, y la Reina, al parecer, por un Gobierno de militares.

En el transcurso de esta conversaci¨®n, el general Armada refiri¨® igualmente al teniente general Milans que en sus conversaciones con el Soberano hab¨ªan hablado de la situaci¨®n grave que atravesaba Espa?a y de la posibilidad de que hubiera alguna acci¨®n violenta, a lo que su majestad el Rey hab¨ªa dicho exactamente que ?habr¨ªa que ver la forma de reconducirla?.

Es tambi¨¦n en el transcurso de esta conversaci¨®n habida en Valencia cuando ambos generales del Ej¨¦rcito acuerdan establecer contacto con deterrninadas personas en Madrid a quienes poder transmitir la preocupaci¨®n real, para lo cual el general Armada autoriza al teniente general Milans del Bosch a hacer uso discreto de cuanto al respecto le hab¨ªa dicho.

El 18 de enero de 1981 se celebra en Madrid, en un piso de la calle del General Cabrera, n¨²mero 15, perteneciente al teniente coronel Mas, una reuni¨®n, a la que asiste el teniente general Milans del Bosch, el general Torres Rojas y los tenientes coroneles Mas y Tejero.

El d¨ªa 19 de enero de 1981 el coronel Ib¨¢?ez Ingl¨¦s se traslada a L¨¦rida, para comunicar al general Armada el resultado de las conversaciones del d¨ªa 18.

A partir del 18 de enero se sucede una serie de conversaciones favorecidas por hechos ya previstos, como el nombramiento del general Armada como segundo jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito de tierra, despu¨¦s de la dimisi¨®n del presidente Su¨¢rez, y, consiguientemente, el traslado a Madrid del citado general. En estas conversaciones se le encomienda al teniente coronel Tejero el informe sobre una operaci¨®n alternativa de entrada en el palacio de la Moncloa o en el del Congreso de los Diputados, acci¨®n que deber¨¢ llevar a cabo una vez que la superioridad, a la vista de los estudios que presente el teniente coronel Tejero, haya tomado la decisi¨®n sobre la mejor operaci¨®n a realizar, como as¨ª sucedi¨®, decidi¨¦ndose la superioridad p¨®r la entrada en el palacio del Congreso.

Intervenci¨®n de Cortina

En d¨ªas pr¨®ximos al 23 de febrero de 1981, el comandante Cortina, del CESID, hombre de confianza del general Armada e intermediario en las conversaciones entre ¨¦ste y el teniente coronel Tejero, sostiene una entrevista con el teniente coronel Tejero en presencia del capit¨¢n Iglesias, de la Guardia Civil, adscrito al CESID; en la conversaci¨®n, que tiene lugar en el domicilio particular del comandante Cortina, en la calle de Biarritz, n¨²mero 3, del Parque de las Avenidas, el comandante Cortina informa al teniente coronel Tejero que ha sido acordada por la superioridad la entrada en el palacio del Congreso, e informa de los pormenores de la operaci¨®n y de la necesidad de llevarla a cabo, transmitl¨¦ndole que debe entrevistarse -el teniente coronel Tejero- con el general Armada, a requerimiento de ¨¦ste.

La entrevista entre el general Armada y el teniente coronel Tejero se celebr¨® unas horas m¨¢s tarde y en ella el general Armada precis¨® la hora exacta en que deber¨ªa producirse la entrada en el Parlamento, y que all¨ª deber¨ªa esperar la llegada de una autoridad militar, que se identificar¨¢ por la contrase?a Duque de Ahumada. Precis¨® igualmente el general Armada que la entrada en el palacio del Congreso deber¨¢ hacerse al grito de ??Viva el Rey!? y ??Viva Espa?a!?.

Ni en esta ni en las conversaciones anteriores se le autoriza al teniente coronel Tejero, ni siquiera se le insin¨²a, que haya de proceder a la disoluci¨®n del Parlamento ni a la dimisi¨®n del Gobierno una vez que se haya producido la entrada en el Congreso de los Diputados; 16 que el teniente coronel Tejero cumpli¨® con toda exactitud, como veremos m¨¢s adelante en la narraci¨®n de los hechos, manteni¨¦ndose siempre como un mero ejecutor de las ¨®rdenes recibidas de la superioridad, consciente en todo momento, porque as¨ª se le hab¨ªa reiterado, de que era un acto de servicio a la Corona, a Espa?a, a la Constituci¨®n y a la democracia.

El d¨ªa 23 de febrero, sobre las 18.23 horas, el teniente coronel Tejero, al mando de varios guardias civiles, procedentes de diversas unidades, penetr¨® en el Parlamento al grito de ??Estoy a las ¨®rdenes del Rey y de los generales Milans del Bosch y Armada!?, invitando a todo el mundo a que guardara silencio y que se arrojaran al suelo, mientras la fuerza realizaba unos disparos de advertencia, de car¨¢cter preventivo, en evitaci¨®n de que cualquier diputado, o persona que se encontrara en la tribuna de invitados y que pudiera portar armas, tuviera la ocurrencia de hacer frente, a la fuerza, desat¨¢ndose con ello una situaci¨®n de violencia no deseable y en la que hubiera que lamentar desgracias personales.

.En ning¨²n momento se cerr¨® el contacto del Parlamento con el exterior, teniendo acceso al palacio de Congresos numerosos jefes y oficiales del Ej¨¦rcito, orden p¨²blico y polic¨ªa, as¨ª como personal civil, no exigi¨¦ndose contrase?a alguna a quienes en el edificio penetraban.

Al llegar el general Armada al palacio de Congresos solicit¨® la presencia del teniente coronel Tejero, transm¨ªti¨¦ndole la contrase?a duque de Ahumada, tras lo que el teniente coronel Tejero, en el patio del palacio del Congreso, dio las novedades al general Armada. Este le ordena: ?Tejero, quite la tropa del hemiciclo, reintegre a sus puestos a los diputados que est¨¦n fuera de ¨¦l, que les voy a proponer la formaci¨®n de un Gobierno presidido por m¨ª?, lo que fue escuchado por varios capitanes y tenientes de la Guardia Civil, que se encontraban pr¨®ximos a ambos jefes del Ej¨¦rcito.

Diputados de UCD, PSOE, y PCE en el "Gobierno. Armada"

El teniente coronel Tejero pregunt¨® al general Armada si el teniente general Milans del Bosch iba a ocupar alguna cartera en el Gobierno de cuya formaci¨®n hablaba, a lo que el general Armada le contest¨® que ¨¦l era el ¨²nico militar del nuevo Gobierno y que iba, repiti¨®, como presidente, y a?adi¨® que iban en ¨¦l los diputados Felipe Gonz¨¢lez, Sol¨¦ Tura y M¨²gica Herzog, por el PSOE, y varios otros de UCD.

Ante tales manifestaciones, el teniente coronel Tejero respondi¨® que eso no se lo hab¨ªa comunicado ni el teniente general Milans del Bosch, capit¨¢n general de la III Regi¨®n Militar, hab¨ªa proclamado reuniones que hab¨ªan tenido, respuesta que, igualmente, fue o¨ªda por capitanes y tenientes que, como se hab¨ªa dicho anteriormente, se encontraban en las proximidades.

Ante los rumores que llegaban al Parlamento, a trav¨¦s de quienes en completa libertad entraban y sal¨ªan del mismo, se?alando que la entrada y permanencia en el palacio del Congreso por el teniente coronel Tejero y la fuerza de la Guardia Civil a sus ¨®rdenes era una rebeli¨®n, los ocupantes decidieron el env¨ªo de un comun¨ªcado a los medios informativos, expo-

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