Stockman y la pol¨ªtica de Reagan
( ... ) Celoso por dirigir la revuelta contra el Estado de bienestar social, Stockman borr¨® las dudas de su formidable cerebro y adopt¨® la religi¨®n de la oferta: recompensar la industria de los ricos; entonces invertir¨¢n y el pa¨ªs prosperar¨¢. Para su realizaci¨®n, proyect¨® un presupuesto que recortaba los gastos de la seguridad social, y reduc¨ªa los aumentos de los gastos militares no justificados y apoyaba a Reagan en la concepci¨®n de que una disminuci¨®n de los impuestos altos aumentar¨ªa los ingresos y de esta manera se eliminar¨ªa el d¨¦ficit federal y la inflaci¨®n.Pero ya en primavera se dio cuenta de que esos planes no funcionaban. No dijo nada al Congreso, disimulando la decepci¨®n con un plan secreto: ayudar al presidente a cortar decenas de miles de millones del Pent¨¢gono y luchar a su lado para limitar el corte en los impuestos. Sin embargo, Reagan vet¨® el corte de los grandes gastos militares.
Sintiendo la magnitud de su fracaso, intent¨® un ataque a la seguridad social. El presidente estuvo de acuerdo, demostrando as¨ª que ya conoc¨ªa el fracaso de la m¨¢gica f¨®rmula de la oferta.
Pero una previsible tormenta pol¨ªtica le oblig¨® a abandonar la idea.
?Qu¨¦ queda de la pol¨ªtica econ¨®mica de Reagan? Una recesi¨®n imprevisible y la perspectiva de un amplio d¨¦ficit, lo que llevar¨¢ a una elevaci¨®n de las tasas de intereses, que frustrar¨¢ la recuperaci¨®n. Por ello, Stockman contin¨²a abogando por la implantaci¨®n de nuevos impuestos en 1983 y 1984 y cortes significativos al Pent¨¢gono.
15 de noviembre
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