El episcopado argentino levanta su voz ante la grave crisis por la que atraviesa el pa¨ªs
La Iglesia argentina ha hecho escuchar su voz en la grave crisis que afecta al pa¨ªs, que muchos definen como la m¨¢s grave de su historia. No puede decirse que la voz haya sido destemplada, pero s¨ª ha sido fuerte.
Y sus ecos retumbar¨¢n en una Argentina brutalmente flagelada por el paro, la inflaci¨®n, la recesi¨®n, la depreciaci¨®n de la moneda -casi un 500% en lo que va del a?o-, el terco silencio oficial sobre los desaparecidos por razones pol¨ªticas y la renuencia a aceptar la palabra del Papa en el secular pleito lim¨ªtrofe austral argentino-chileno en la zona del canal de Beagle.La Conferencia Episcopal argentina afirm¨® en un documento de diecis¨¦is puntos, finalizadas sus deliberaciones en la casa de ejercicios espirituales Mar¨ªa Auxiliadora, de San Miguel, cerca de Buenos Aires, que le preocupa la inflaci¨®n, la p¨¦rdida de productividad, el cierre de las fuentes de trabajo, los bajos salarios, los precios desorbitados, la alta presi¨®n fiscal, la especulaci¨®n, la usura y el aumento, en progresi¨®n geom¨¦trica, de los precios de bienes y servicios.
El documento eclesi¨¢stico, hecho p¨²blico al cabo de cinco d¨ªas de deliberaciones sobre la actualidad nacional, es el m¨¢s cr¨ªtico desde que los militares se instalaron en el poder mediante un golpe de Estado, en marzo de 1976.
Un 13% de desempleo
Fuentes sindicales establecieron recientemente que el desempleo y el subempleo afectan a casi un 13% de los once millones de poblaci¨®n activa con que cuenta este pa¨ªs de veintiocho millones de habitantes. Se considera activa aqu¨ª a la persona que trabaja, al menos, una vez por semana con remuneraci¨®n.La asamblea de los obispos puso el dedo en otra llaga, de las muchas que sufre Argentina actualmente: los detenidos pol¨ªticos que han desaparecido, secuela de la lucha entre los militares y los organismos de seguridad contra la guerrilla de izquierda, que combati¨® hace m¨¢s de un lustro en los ambientes urbano y suburbano de toda la Rep¨²blica.
El episcopado mostr¨® su preocupaci¨®n, "a riesgo de ser reiterativos", por el problema de las decenas de miles de desaparecidos y se hizo eco de "la situaci¨®n angustiosa de sus familiares".
Un p¨¢rrafo especial fue dedicado a recoger "el dolor de las v¨ªctimas del terrorismo y la subversi¨®n", en una definici¨®n que, a juicio de los analistas, pone a la m¨¢xima jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica argentina en una posici¨®n de moderaci¨®n frente a los extremos en los que se sufre el da?o de una de las heridas m¨¢s graves del pa¨ªs.
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