El Parlamento Europeo, a favor de la adhesi¨®n de Espa?a y Portugal a la CEE en enero de 1984

El Parlamento Europeo aprob¨® ayer, a las 23.30 horas, una resoluci¨®n por la que se pide a la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE), y concretamente a los jefes de Gobierno y de Estado de los diez, que confirmen p¨²blicamente que la fecha de adhesi¨®n de Espa?a y Portugal a la CEE no se producir¨¢ m¨¢s tarde del 1 de enero de 1984. El texto fue aprobado por 115 votos a favor, siete en contra y dos abstenciones. El debate sobre la adhesi¨®n de Espa?a y de Portugal al Mercado Com¨²n europeo se prolong¨® durante dos horas y media, bastante m¨¢s de lo previsto -y de lo deseado- por los miembros de la Comisi¨®n Europea y los negociadores espa?oles.

Las resoluciones del Parlamento Europeo, aunque pueden servir como presi¨®n ante la cumbre del pr¨®ximo d¨ªa 26 en Londres, en la que los jefes de Estado y Gobierno de los diez estudiar¨¢n unas declaraciones sobre Espa?a y Portugal, no tienen poder vinculante.Aunque el voto se realiz¨® electr¨®nicamente y no es posible saber con seguridad cu¨¢l fue el voto exacto de cada grupo parlamentario, se puede deducir de las intervenciones de los distintos portavoces que la proposici¨®n fue apoyada por los socialistas (excepto los franceses), los comunistas (excepto los franceses), los liberales, los democristianos (excepto los asimilados, como los giscardianos y gaullistas franceses) y los conservadores brit¨¢nicos.

Aunque en principio se puede afirmar que el voto del Parlamento Europeo supone una victoria para las tesis espa?olas, seg¨²n las cuales las negociaciones deben desbloquearse inmediatamente para hacer posible la adhesi¨®n en 1984, el desarrollo del debate fue m¨¢s complicado de lo previsto y deseado por el vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Lorenzo Natali, encargado de las negociaciones para la adhesi¨®n. Por el contrario, Ignacio Camu?as, presidente de la comisi¨®n mixta Cortes Espa?olas-Parlamento Europeo, que asisti¨® como invitado a la sesi¨®n, lo calific¨® de "muy positivo".

Argumentos a favor

Los defensores de la inmediata apertura de las negociaciones y de la adopci¨®n de un compromiso para la fecha de adhesi¨®n fueron los siguientes:

Lord Douro (conservador brit¨¢nico); critic¨® la lentitud de la comisi¨®n, y afirm¨® que hab¨ªa que mantener la presi¨®n sobre el Consejo Europeo. Recalc¨® asimismo el apoyo que la CEE deb¨ªa a las democracias de los pa¨ªses candidatos.

Tomas van der Vringt (socialista alem¨¢n): no hay raz¨®n para que la adhesi¨®n no se produzca en 1984. El retraso es lamentable. La reforma de la Comunidad Econ¨®mica Europea no puede ser un pretexto, porque se trata de una adaptaci¨®n y no de un cambio de sus fundamentos.

Hans Lucker (Partido Popular, alem¨¢n): la adhesi¨®n de Espa?a y de Portugal no supone incorporar nuevos problemas. Ya existen ahora mismo.

Carlo Galluzzi (comunista italiano): la adhesi¨®n de Espa?a favorecer¨¢ el equilibrio interno en la CEE entre el Norte y el Sur.

Le¨®nidas Kyrkos (comunista griego, rama interior, eurocomunista): los espa?oles y los griegos lo quieren y tienen derecho.

En contra se pronunciaron, sin paliativos:

Michel Junot (gaullista franc¨¦s): no es posible una negociaci¨®n que perjudique a unos y otros. "Nos oponemos a una ampliaci¨®n no lograda".

George Sutra (socialista franc¨¦s): s¨ª a la apertura de la negociaci¨®n con Espa?a, no a la fijaci¨®n de una fecha. Es prioritario salvaguardar el Tratado.

Olivier d'Ormesson (democristiano franc¨¦s): se plantean demasiados problemas.

Maffre-Bruge (comunista franc¨¦s) y Henriette Poirier (del mismo grupo): la ampliaci¨®n puede ser dram¨¢tica para el suroeste franc¨¦s, as¨ª como para los trabajadores espa?oles.

Dos brit¨¢nicos, Peter Beazley y Ann Clwyd, introdujeron un elemento desagradable para los espa?oles, al proponer que no se vinculara la suerte de Portugal a la de Espa?a, puesto que son dos casos distintos.

Natali apuesta por 1984

El vicepresidente, Lorenzo Natali, defendi¨® que la fecha de 1984 era "factible" si los Estados miembros se decid¨ªan a cerrar la negociaci¨®n en 1982, de forma que la ratificaci¨®n del tratado se pudiera realizar en 1983. Se?al¨® que el retraso actual era debido no a la mala voluntad de la Comisi¨®n, sino a las "dudas" de algunos Estados miembros, y afirm¨® que cuatro a?os (el tiempo que hace que Espa?a solicit¨® la adhesi¨®n) era "mucho, incluso dir¨ªa que demasiado". Record¨® que la adhesi¨®n a la CEE era una "bandera" para los dem¨®cratas de Espa?a y Portugal, y explic¨® que la reforma de la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n era una simple "adaptaci¨®n" que no pod¨ªa impedir la negociaci¨®n con los pa¨ªses candidatos.

Los socialistas franceses, cuya postura es fundamental para el futuro de, las negociaciones hispano-comunitarias, si bien no votaron la fijaci¨®n de una fecha para la adhesi¨®n, aprobaron otros p¨¢rrafos de la declaraci¨®n, en la que lamentan la lentitud de las negociaciones y acent¨²an la importancia de la ampliaci¨®n.