Haydn, interpretado por la Orquesta Inglesa de C¨¢mara

La conocida calidad de la Orquesta Inolesa de C¨¢mara -de la que es concertino-director nuestro Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Asensio- qued¨® de manifiesto, una vez m¨¢s, en un precioso programa Haydri en el que figurab¨¢n las sinfon¨ªas La ma?ana y la Sinfon¨ªa en mi beniol (n¨²mero 84, seg¨²n cat¨¢logo de Hoboken). Cierto que la legendaria flexibilidad de los instrumentistas brit¨¢nicos se vio un tanto coartada por la rigidez del director invitado, el polaco Jacek Kasprzyk, due?o, por otra parte, de un oficio seguro. La rica din¨¢mica -comentada en las excelentes notas de Alvaro Mar¨ªas- perdi¨® amplitud y con ella la entera llama de expresividad. No as¨ª la continuidad, el siempre seguido caracter¨ªstico de barrocos y cl¨¢sicos vieneses, o la transparencia sonora.El pianista Luis Galve, que hizo siempre una creaci¨®n del Concierto en re (el programa recuerda con raz¨®n su versi¨®n con la Orquesta de Von Benda), parece ahora superarla, lo que parec¨ªa imposible. Pero sin duda, el grado de hondura y convicci¨®n en los conceptos ha alcanzado en el gran pianista espa?ol los m¨¢s elevados niveles, tan altos como la claridad de juego y la imaginaci¨®n sonora. Si los movimientos extremos resultaron un prodigio de bien hacer, de ?formas que vuelan? -como dir¨ªa D'Ors-, el adagio central fue conmovedor, capaz de descubrir la humanidad trascendente de un m¨²sico al que Bcethoven debe, en gran parte, la raz¨®n de su mensaje.

Por su parte, Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Asensio toc¨® el Concierto en sol inayor, para viol¨ªn y orquesta, con la naturalidad estil¨ªstica de quien ha hecho de esta m¨²sica dedicaci¨®n cotidiana.