El Rayo no prescinde a¨²n de su entrenador por falta de dinero

Francisco Font¨¢n, presidente del Rayo Vallecano, adimit¨® ayer a EL PAIS que "si el Rayo no reaciona en los pr¨®ximos dos o tres partidos, habr¨¢ que adoptar alguna medida dr¨¢stica". La directiva el club rayista escuch¨® el lunes las argumentaciones del t¨¦cnico, Eduardo Gonz¨¢lez, sobre la irregularidad del equipo, y se le ha concedido un "margen de confianza". El Rayo no ha prescindido todav¨ªa del entrenador porque su econom¨ªa no lo permite.Pese a esta circunstancia los partidos que el Rayo jugar¨¢ el pr¨®ximo domingo en Mallorca, el de vuelta de la Copa frente al Oviedo, y en Vallecas frente al Getafe, seg¨²n clave para el futuro de Eduardo Gonz¨¢lez, que en la temporada anterior realiz¨® una magn¨ªfica campa?a y que a punto estuvo de lograr el ascenso a primera divisi¨®n. En la directiva se suscitaron diversas opiniones y hay quienes st¨¢n a favor de la marcha del t¨¦cnico.

Una de las razones que propiciaron el comp¨¢s de espera ante la situaci¨®n del equipo, del que se piensa que tiene plantilla para intentar estar arriba, es la mala situaci¨®n financiera. El Rayo tiene una deuda de casi 150 millones de pesetas y no est¨¢ en condiciones de realizar el despilfarro que supondr¨ªa un cambio de entrenador en plena temporada. La media de recaudaci¨®n no suele llegar al mill¨®n de pesetas, y por este concepto s¨®lo hay previsto recaudar 22 o 23 millones. El presupuesto del equipo, rebajado en relaci¨®n con la anterior temporada, es de 112 millones. El Rayo se encuentra, adem¨¢s, con deudas atrasadas de la anterior gesti¨®n de Francisco Encinas, como la ya c¨¦lebre de la moqueta del palco, que origin¨® el embargo de la taquilla del pasado domingo. La directiva tuvo que pagar los contratos denunciados por varios jugadores para poder iniciar la campa?a, por valor de casi dieciocho millones de pesetas, aunque a¨²n se adeuda dinero a varios ex futbolistas del equipo.

Una de las causas de la irregularidad del Rayo radica en que Eduardo Gonz¨¢lez ha contado con m¨¢s de diez nuevos jugadores, lo que obliga a un per¨ªodo de tiempo para su acoplamiento. Asimismo la pretemporada no se planific¨® de manera adecuada.