Las universidades de la Iglesia se sienten discriminadas, seg¨²n el rector de la Pontificia de Salamanca

El estatalismo espa?ol en materia educativa provoca, seg¨²n el rector de la Universidad Pontificia de Salamanca, un efecto discriminatorio contrario a lo que establece la Constituci¨®n. Esta desigualdad, manifiesta Juan Luis Aceval Luj¨¢n, aumentar¨¢ y se reforzar¨¢ con la aprobaci¨®n del texto de la LAU, cuya discusi¨®n s¨®lo frenan, seg¨²n su opini¨®n, los conflictos internos de UCD.

La universidad del Episcopado espa?ol discrepa en tres aspectos generales de la ley de Autonom¨ªa Universitaria cuyo ¨²ltimo texto conoci¨® el consejo de rectores en el mes de octubre: las ayudas econ¨®micas del Estado a las universidades privadas, la selecci¨®n del profesorado de las mismas y la titulaci¨®n de los alumnos, no reconocida hasta que no superan las pruebas establecidas por un tribunal mixto.Sin embargo, el rector de la Universidad Pontificia ha unido su voz a la del resto de rectores espa?oles que solicitan la promulgaci¨®n de la LAU porque considera que existe un vac¨ªo legal que impide el funcionamiento de la Universidad. ?Una vez que exista una base, cada universidad mostrar¨¢ las razones de su desacuerdo, pero, al menos, podr¨¢ comenzar su andadura?.

?El texto conocido de la LAU induce a creer que no habr¨¢ ayudas a las universidades privadas a caro ' o de los presupuestos del Estado?, manifiesta don Luis Aceval. ?Esto va en contra del art¨ªculo veintisiete de la Constituci¨®n?, y argumenta: ?Si el Estado subvenciona empresas deficitarias, tambi¨¦n deber¨ªa hacerlo con estos centros, en los que estamos realizando una labor cultural digna, prestamos un servicio a la sociedad porque formamos buenos profesionales y nuestros alumnos no le cuestan un duro al Estado?.

La Universidad Pontificia de Salamanca tendr¨¢ este curso unos qastos totales de 144.600.000 pesetas. Los ingresos en concepto de matr¨ªculas se elevan a 31 millones de pesetas, siendo el precio de cada una de ellas superior en unas 5.000 pesetas a las de las facultades estatales. La Conferencia Episcopal corre con el 45% de los gastos y cubre cada a?o el d¨¦ficit existente con cargo a los presupuestos del curso siguiente. Este a?o se calcula el d¨¦ficit en 45 millones de pesetas.

Excesivo control acad¨¦mico del Estado

La universidad cuenta con la ayuda de un patronato que colabora con 1% o 2% de la cifra total y prev¨¦ que el Ministerio de Educaci¨®n les conceda una docena de millones procedentes de presupuestos destinados a centros no estatales y a investigaci¨®n. Cada curso las autoridades acad¨¦micas y religiosas que intervienen en los actos inaugurales repiten la dif¨ªcil situaci¨®n econ¨®mica por la que atraviesa su instituci¨®n. Apelan al inter¨¦s que ha demostrado Salamanca y su regi¨®n por el centro y solicitan de las autoridades civiles su colaboraci¨®n en el sufragio de los gastos. Con ello han conseguido subvenciones y ayudas ocasionales como la de cinco millones de la Diputaci¨®n Provincial, un mill¨®n del Ayuntamiento de la ciudad y la condici¨®n de publicaciones con la Caja de Ahorros. Sin embargo, el rector de la universidad se encuentra muy disgustado con el Consejo General Castellano-Leon¨¦s, que no le ha concedido ninguna ayuda, pese a su invitaci¨®n a solicitarla.Los estudiantes de la Universidad Pontificia han de revalidar su t¨ªtulo al terminar la carrera. ?Con el tribunal mixto el Estado, en realidad, examina a los alumnos a los profesores?, manifiesta Juan Luis Aceval, mostrando su desacuerdo con la. existencia de esta prueba. ?En la ense?anza media no ocurre esto, y en nuestro caso no se reconoce a unos profesores por el hecho de no ser funcionarios estatales?, y contin¨²a, ?pese a que podamos optar por tener una cuarta parte del profesorado habilitado por el Ministerio para lograr la supresi¨®n del tribunal, queremos formar nuestro propio profesorado?.

Los concursos de c¨¢tedra de la Universidad Pontificia son abiertos, y a los candidatos se les pide un m¨ªnimo de docencia, el curr¨ªculo y la memoria. El tribunal est¨¢ compuesto por un alumno y un profesor de la facultad correspondiente, un perito, una autoridad acad¨¦mica y un obispo, presidente de comisi¨®n. El rector de la Pontificia opina que por esta y otras razones se evitan las tensiones generadas en las oposiciones de la Universidad del Estado.

Los sueldos de los ense?antes son sensiblemente inferiores a sus compa?eros de la universidad civil, cobran una tercera parte del que les corresponder¨ªa en ¨¦sta. Las caracter¨ªsticas ideol¨®gicas de la ense?anza impartida en todos los centros dependientes de la Universidad son, seg¨²n su rector, claras: ?Existe libertad de c¨¢tedra, dentro del humanismo cristiano?.