R¨¦plica a Garc¨ªa M¨¢rquez

Me refiero al art¨ªculo de Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez "Nicaragua, entre dos sopas", aparecido en su diario.Sin duda alguna, el se?or Garc¨ªa M¨¢rquez es una de las glorias de la narrativa hispana contempor¨¢nea y sus libros pueden ser considerados como cl¨¢sicos dentro de nuestras letras. Sin embargo, en el terreno pol¨ªtico demuestra una candidez e inocencia totales, como buen representante de una t¨ªpica gauche divine latinoamericana que se recrea utilizando conceptos totalmente pasados de moda y, sobre todo, que no concuerdan ya con el continuo espacio-temporal (pol¨ªtico, hist¨®rico y social) qu¨¦ nos ha tocado compartir, am¨¦n de denotar un absoluto desconocimiento de la situaci¨®n actual en Nicaragua. Yo tambi¨¦n ten¨ªa una idea rom¨¢ntica de la revoluci¨®n nicarag¨¹ense, m¨¢xime habiendo vivido y conocido la corrupci¨®n y podredumbre, somocista. Sin embargo, el encarcelamiento totalmente arbitrario de mi padre, empresario noruego radicado desde hace a?os en Managua, el pasado mes de mayo, sin que hasta el momento haya tenido la oportunidad de un juicio imparcial, y los consiguientes viajes que he debido realizar a Nicaragua para tratar in¨²tilmente de ayudarle me han puesto en contacto con la triste realidad de la situaci¨®n actual de aquel pa¨ªs y de su pueblo.

Al se?or Garc¨ªa M¨¢rquez le recomiendo que deje su sill¨®n de profeta-gur¨² de la compleja problem¨¢tica de nuestra ¨¦poca, que abandone por alg¨²n tiempo su figura de jet-set de las letras" y se vaya a Nicaragua a hablar y convivir con el pueblo para que se d¨¦ cuenta del clima de terror institucionalizado, de miseria econ¨®mica, humana y cultural que sus buenos amigos los dirigentes actuales en el poder est¨¢n intentando implantar en el pa¨ªs. ?Ah!, y que mientras se encuentre all¨¢ intente escribir sobre lo que se le pasa por la cabeza, a ver si puede o le dejan. ?Zapatero, a tus zapatos!/