El 18 de febrero, elecciones generales en Irlanda

Tras la ca¨ªda del Gobierno de Garret Fitzgerald en la noche del mi¨¦rcoles, por un voto en contra, de su severo presupuesto, la Rep¨²blica de Irlanda se prepara para unas elecciones generales el 18 de febrero.

Pendiente a¨²n la decisi¨®n del Sinn Fein Provisional, el ala pol¨ªtica del IRA, de presentar candidatos, la campa?a se ver¨¢ seguramente dominada por la cuesti¨®n econ¨®mica en un pa¨ªs con un 23% de inflaci¨®n, un 11% de su fuerza laboral en paro y un d¨¦ficit presupuestario que supone un 17% del producto nacional bruto.

Esta dif¨ªcil situaci¨®n econ¨®mica hab¨ªa empujado a Garret Fitzgerald, cuyo partido gobernaba en coalici¨®n con los laboristas y con el apoyo de cinco independientes desde las elecciones de junio, a intentar hacer gala de realismo econ¨®mico. Su ¨²ltimo presupuesto propon¨ªa una subida sustancial de los impuestos indirectos, sobre el valor a?adido, la gasolina, las bebidas alcoh¨®licas y el tabaco, para sanear las finanzas del Estado y la deuda exterior irlandesa. El voto en contra de un socialista independiente bast¨® para provocar la crisis.

Durante la campa?a electoral de las elecciones generales de junio, Fitzgerald centr¨® su campa?a en el tema econ¨®mico, mientras que la del Fianna Fail, encabezado por Charles Haughey, entonces primer ministro, insist¨ªa en la importancia de las relaciones entre Londres y Dubl¨ªn y el futuro de Irlanda del Norte.

La cuesti¨®n norirlandesa

La cuesti¨®n norirlandesa no lleg¨® a dominar aquellas elecciones, a pesar de la crisis de las huelgas de hambre de los presos republicanos. Dos de estos presos fueron, sin embargo, elegidos al Dail (Parlamento irland¨¦s). Uno de ellos, Kieran Doherty, muri¨® el 4 de agosto de 1981, en la c¨¢rcel de Maze (Belfast), tras 73 d¨ªas de ayuno.El Sinn Fein Provisional, brazo pol¨ªtico del IRA (Ej¨¦rcito Republicano Irland¨¦s), decidir¨¢ el s¨¢bado si presenta candidatos a las elecciones en la Rep¨²blica. Ya hab¨ªa indicado recientemente la posibilidad de este cambio en su t¨¢ctica pol¨ªtica, pero incluso si deciden concurrir a las urnas, y logran alg¨²n resultado, ya han determinado no tomar posesi¨®n de sus esca?os en una Rep¨²blica que califican de "neocolonial".

Poco despu¨¦s de junio, Fitzgerald lanz¨® su cruzada para reformar la Constituci¨®n del Norte y del Sur, permitiendo el control de la natalidad y el divorcio. El Sur resultar¨ªa as¨ª m¨¢s atractivo para los protestantes del Norte, favoreciendo una soluci¨®n a largo plazo para el problema del Ulster.

Charles Haughey levant¨® su voz contra estos planes y contra, la creaci¨®n del Consejo anglo-irland¨¦s tras la visita de Fitzgerald a Londres hace unos meses. La realidad, sin embargo, es que gane Haughey o Fitzgerald, las relaciones entre Londres y Dubl¨ªn seguir¨¢n su curso, habiendo sido buenas en los ¨²ltimos a?os, especialmente en el campo de la seguridad y de la lucha contra el terrorismo.

Haughey, si no consigue levantar pol¨¦mica con la cuesti¨®n norirlandesa, intentar¨¢ capitalizar el arraigado miedo irland¨¦s a nuevas experiencias econ¨®micas, cuyo resultado a¨²n no ha dado ning¨²n fruto positivo.