El presunto secuestrador de Tshombe cree que su juicio comprometer¨¢ a Espa?a

Francis Joseph Andr¨¦ Bodenan, de 48 a?os y de nacionalidad francesa, preso en la c¨¢rcel provincial de Palma de Mallorca, en espera de juicio como presunto secuestrador del ex primer ministro del Congo ex belga, Mois¨¦s Tshombe, hace quince a?os, ha declarado que su proceso "comprometer¨¢ los intereses mundiales de Espa?a".

El secuestro del ex dirigente congole?o se produjo mientras Tshombe, Bodenan y siete personas m¨¢s viajaban en una avioneta que cubr¨ªa el trayecto entre Ibiza y Palma de Mallorca, el 30 de junio de 1967. El avi¨®n fue desviado hacia Argelia.En unas manifestaciones efectuadas desde la c¨¢rcel de Palma, donde se halla recluido desde el pasado mes de mayo, Bodenan asegura haber recibido ayuda de los servicios secretos espa?oles para llevar a cabo la misi¨®n que las autoridades de Zaire le hab¨ªan encomendado, y que consist¨ªa en impedir que Tshombe, exiliado en aquella ¨¦poca en Espa?a, regresase a su pa¨ªs para dirigir una sublevaci¨®n contra el presidente Mobutu Sese Seko.

"Desde mi llegada a Espa?a, siempre recib¨ª facilidades por parte de mi contacto en Madrid, a quien mis patrones de Zaire hab¨ªan puesto en antecedentes sobre mi misi¨®n. Su nombre, y no creo que fuese en clave, era Gim¨¦nez; fue ¨¦l quien me proporcion¨® la documentaci¨®n necesaria para tener prioridad en los aeropuertos de Ibiza y de Palma de Mallorca", afirma Bodenan.

Cuando la vista del proceso militar a que ser¨¢ sometido el presunto protagonista de uno de los grandes misterios pol¨ªticos del siglo XX, prevista para finales de este mes, ha sido aplazada y los abogados defensores ignoran cu¨¢ndo tendr¨¢ lugar, diversas circunstancias vienen a complicar la mara?a. Declaraciones y contradeclaraciones del acusado dan opci¨®n a los m¨¢s variados comentarios desde la eventual suspensi¨®n sin fecha determinada del proceso hasta la aplicaci¨®n de la amnist¨ªa promulgada en Espa?a en 1977, a la que, seg¨²n los defensores, su patrocinado podr¨ªa acogerse.

Un caso intrincado

Para la defensa, el caso est¨¢ m¨¢s oscuro de lo que las primeras informaciones permit¨ªan prever, y los abogados argumentan varias posibilidades para que el proceso se vea frustrado. Entre ellas, que el aparato en el que viajaban Bodenan, Tshombe, cinco individuos m¨¢s y los dos pilotos, en el momento de anunciar el cambio de destino, diecisiete minutos despu¨¦s de haber despegado del aeropuerto de Ibiza con direcci¨®n sureste, se encontraba en espacio a¨¦reo internacional y no en el de soberan¨ªa espa?ola, versi¨®n que baraja la acusaci¨®n. De probarse esto, no habr¨ªa caso.Por su parte, Bodenan mantiene la tesis de que no hubo secuestro y s¨ª ¨²nicamente un cambio de planes de vuelo, a los que ¨¦l no tuvo acceso, y para corroborarlo recuerda constantemente una frase recogida en el sumario y pronunciada por uno de los acompa?antes de Mois¨¦s Tshombe, el hombre de negocios belga Marcel Hambursin, quien en la escalerilla del avi¨®n en el aeropuerto de Ibiza dijo al ex premier congole?o, mientras el acusado le hac¨ªa una fotograf¨ªa: "Presidente: ¨¦sta ser¨¢ la ¨²ltima foto que le tomen en el exilio".

Por otra parte, los abogados defensores manifestaron que solicitar¨¢n el esclarecimiento de la constitucionalidad del tribunal militar, que ellos ponen en duda, y pedir¨¢n el traspaso del juicio a un tribunal ordinario, de acuerdo con el art¨ªculo 9 del C¨®digo de Justicia Militar. En este art¨ªculo, en el que se cancelan los tribunales de excepci¨®n, se establece que el principio de unidad jurisdiccional es la base de la organizaci¨®n y funcionamiento de los tribunales y que la ley regular¨¢ el ejercicio de la jurisdicci¨®n militar en el ¨¢mbito estrictamente castrense y en los supuestos de estado de sitio.

Asimismo, los defensores est¨¢n decididos a demostrar que los hechos ocurridos el 30 de junio de 1967, durante el vuelo Ibiza-Palma desviado a Argelia, est¨¢n dentro de la calificaci¨®n de pol¨ªticos, y que el acusado ya fue juzgado por los mismos por un tribunal argelino, que le absolvi¨® sin cargos, una vez que pudo demostrar su pertenencia a los servicios secretos de Zaire y que hab¨ªa actuado por mandato de sus superiores sin da?ar los intereses de ning¨²n pa¨ªs amigo.

De todos modos, los defensores no descartan la posibilidad de un nuevo rechazo por parte de las autoridades judiciales militares de sus peticiones, aunque conf¨ªan en que la cl¨¢usula de excepci¨®n dilatoria de incompetencia, que han a?adido al sumario, sea tenida en cuenta por el tribunal, que, de momento, ya ha suspendido la vista.