Autonom¨ªas y elecciones

( ... ) Nos satisface el nuevo acuerdo Gobierno-PSOE recomponiendo el anterior de julio de 1981, sobre las autonom¨ªas. No estamos seguros de los incumplimientos que han denunciado los socialistas o, al menos, de que esos incumplimientos hayan tenido la gravedad invocada, pero de lo que s¨ª estamos seguros es de lo que ha dicho el se?or Mart¨ªn Villa y en lo que ha convenido don Felipe Gonz¨¢lez, y esto, repetimos, debe ser motivo de satisfacci¨®n.Ha declarado el vicepresidente primero del Gobierno que sin la ley org¨¢nica de las autonom¨ªas (la LOAPA) nos quedar¨ªamos sin el Estado de las autonom¨ªas, y ¨¦ste es tambi¨¦n nuestro parecer y lo que ense?a la experiencia. P¨®ngase a la racionalizaci¨®n del proceso auton¨®mico el nombre de LOAPA o el que se quiera, pero lo indiscutible es que sin esa racionalizaci¨®n todo se ir¨¢ al traste. No es que nos quedemos sin Estado de las autonom¨ªas, es que nos quedaremos sin Estado. ( ... )

Tan obvio es esto que nos preguntamos cu¨¢l ha sido la aut¨¦ntica finalidad de los socialistas al asumir la defensa de las autonom¨ªas para acabar coincidiendo con el Gobierno, por boca de don Felipe Gonz¨¢lez, en que, si no hubiera acuerdos al respecto, las autonom¨ªas estar¨ªan reclamando la LOAFA o algo parecido. Nos preguntamos si no es posible ver en su actitud simplemente un medio m¨¢s de presionar al Gobierno, haci¨¦ndole comprender que no puede hacer nada sin contar con ellos. Vamos a razonar esa pregunta.

Estamos seguros de que los socialistas son completamente sinceros cuando rechazan la anticipaci¨®n de las elecciones generales: ?c¨®mo va a atraerles ser ahora Gobierno, si salieran vencedores, ante la magnitud de los problemas pendientes? Pero tambi¨¦n son completamente sinceros cuando piden un Gobierno de coalici¨®n y hacen todo lo posible para que su necesidad se imponga. S¨¦. explica. Un Gobierno de esas caracter¨ªsticas, con un partido en la situaci¨®n actual de UCD, les dar¨ªa todas las ventajas de estar en el poder y ninguno de sus inconvenientes. Es natural que hagan lo posible para convencer a los gobernantes de que sin su asistencia -en las votaciones parlamentarias como en los acuerdos sobre autonom¨ªas- no pueden dar ni un paso.

, 29 de enero