Gran pol¨¦mica e incidentes en la construcci¨®n de un muro en torno al Psiqui¨¢trico de B¨¦tera
Las obras del pol¨¦mico muro en torno al Hospital Psiqui¨¢trico de B¨¦tera (Valencia), dependiente de la Diputaci¨®n Provincial, se han iniciado con un mes de retraso sobre la fecha prevista (v¨¦ase EL PAIS de 12 de diciembre de 1981). Su construcci¨®n ha desencadenado una fuerte pol¨¦mica entre los profesionales partidarios de derribar las tapias para reinsertar a los pacientes en su medio social y los defensores de reforzar el aislamiento de los internos de B¨¦tera para evitar conflictos con las poblaciones colindantes.
El inicio de las obras ha estado rodeado de un conjunto de incidencias que supondr¨¢n la apertura de expediente disciplinario al psiquiatra C¨¢ndido Polo, que el d¨ªa en que se iniciaron las obras se encontraba de m¨¦dico de guardia. Seg¨²n se?al¨® el diputado encargado del hospital, Pedro Fos (PSPV-PSOE), el m¨¦dico, dirigente de la coordinadora contraria al muro, se excedi¨® en sus funciones, "llamando a la Guardia Civil en vez de cuidar a los enfermos".
El m¨¦dico ordena parar las obras
El m¨¦dico de guardia, seg¨²n relata el parte entregado a la direcci¨®n del centro, orden¨® que se detuvieran los trabajos para desmontar la actual valla met¨¢lica que rodea el hospital y que ser¨¢ sustituida por ladrillos y cemento, "al no llevar los trabajadores la correspondiente autorizaci¨®n de los responsables del centro". "Al no poder contactar con el Juzgado de B¨¦tera", prosigue el parte, "solicit¨® la presencia de la Guardia Civil para que hiciera constancia de lo que consider¨® una arbitrariedad asistencial: dejar una abertura de m¨¢s de cien metros en la valla de delimitaci¨®n del recinto hospitalario, con el consiguiente peligro para las personas internadas". Por otro lado, el m¨¦dico de guardia recomend¨® al encargado de obras de Dragados y Construcciones, empresa adjudicataria del proyecto, que "volviera a poner la valla en su sitio".Las obras han comenzado con un mes de retraso sobre el plazo previsto. El presupuesto definitivo para levantar los 2.600 metros de valla es de 32 millones de pesetas, y la empresa constructora se ha comprometido a concluirla a finales de marzo. Esta inversi¨®n ha sido justificada por los responsables de la direcci¨®n t¨¦cnica y pol¨ªtica del hospital como medida necesaria para evitar las sucesivas fugas y muertes de internos de B¨¦tera y para calmar la inquietud que las frecuentes escapadas de enfermos provocan en las poblaciones pr¨®ximas al recinto hospitalario.
Las entidades que forman la coordinadora contraria a este nuevo aislamiento del hospital han recordado, a ra¨ªz del comienzo de las obras, "la falta absoluta de respeto a las generalizadas y autorizadas opiniones contrarias a la construcci¨®n del muro" por parte de "una Corporaci¨®n supuestamente democr¨¢tica, que deber¨ªa basar su actuaci¨®n en el di¨¢logo previo con los afectados". Con este tipo de actuaciones, asegura la coordinadora, "la Diputaci¨®n est¨¢ tratando de imponer por la fuerza lo que no ha logrado por la raz¨®n".
Muchos profesionales han frenado los ingresos
En los ¨²ltimos a?os, profesionales que ahora se oponen al muro del centro han frenado de hecho los ingresos en el hospital de B¨¦tera, al acercar la asistencia psiqui¨¢trica a las comarcas con la ayuda de instituciones benefactoras o iniciativas municipales. Los ingresos de enfermos han disminuido y, si se producen, son por pocos d¨ªas, para despu¨¦s atender al paciente directamente en su domicilio. De los 550 internos de B¨¦tera, unos cuatrocientos llevan m¨¢s de quince a?os encerrados. La reinserci¨®n social de este sector, para progresivamente ir desmantelando el hospital, es el aspecto m¨¢s dif¨ªcil de compaginar, seg¨²n los especialistas, que mantienen una postura antimuro, con la pretensi¨®n de la direcci¨®n de encerrar m¨¢s a los actuales pacientes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.