Peligros cancer¨ªgenos del amianto
A finales de diciembre, el Ministerio de la Presidencia respondi¨® a la interpelaci¨®n de un diputado sobre los efectos nocivos del amianto, negando que existiese peligro alguno para los usuarios. Esta respuesta estaba basada, al parecer, en que los riesgos provienen solamente del amianto en polvo o fibra, pero precisamente -seg¨²n el autor- existen en el mercado varios productos que directa o indirectamente contienen amianto en este estado, desde secadores para el pelo a determinadas aguas minerales.
La v¨ªspera del d¨ªa de los Santos Inocentes se publicaba en los peri¨®dicos informaci¨®n de Efe sobre contestaci¨®n del Ministerio de la Presidencia a pregunta del diputado comunista M. N¨²?ez sobre efectos nocivos del amianto, se?alando, en s¨ªntesis, que no existe peligro para los usuarios de productos elaborados con ¨¦l.Cabe suponer que ello no habr¨¢ querido ser afirmado respecto a la protecci¨®n ign¨ªfuga mediante aerosol de asbesto proyectado sobre estructuras y superficies, ya que el proyecto de normativa a que se alude en la citada informaci¨®n contempla, en su art¨ªculo 5?, la prohibici¨®n de dicho uso, que deja el amianto pr¨¢cticamente intacto, en bruto, en el medio que circunda al usuario y determinando poluci¨®n a niveles comparables a los presentes en industrias que fabrican emple¨¢ndolo como materia prima.
El proyecto de orden ministerial sometido a centrales sindicales, asociaciones patronales, etc¨¦tera, para observaciones y sugerencias, en julio de 1981, no obsta para que en septiembre, tras el par¨¦ntesis de las vacaciones, la Administraci¨®n, impert¨¦rrita, y en un alarde de incoherencias, incluya la fibra de amianto en el ap¨¦ndice I (BOE n¨²mero 225) de la Norma B¨¢sica de Edificaci¨®n, Condiciones de protecci¨®n contra incendio en los edificios, NBE-CPI-81.
En cuanto a los ex¨¢menes m¨¦dicos en la poblaci¨®n trabajadora realizados por el Servicio Social de Higiene y Seguridad en el Trabajo, conviene aclarar que carecen de validez estad¨ªstica, epidemiol¨®gicla y cient¨ªfica, pues mientras en Barcelona se ha practicado proyecci¨®n oblicua en radiograf¨ªas, en Sevilla, Valencia, etc¨¦tera no ha sido as¨ª. De todos es sabido que para la detecci¨®n de estadios precancerosos se requiere un an¨¢lisis cifol¨®gico de esputos. Aqu¨ª no se ha realizado.
La ausencia de peligro en el uso de productos elaborados con amianto se justifica en la citada respuesta del Ministerio en que el peligro est¨¢ en el polvo o fibra. Se asume impl¨ªcitamente, por consiguiente, que dicho polvo o fibra no trasciende al usuario. Cuando diversos hipermercados espa?oles, como, por ejemplo, el sevillano Continente, est¨¢n anunciando la venta de tablas de planchar forradas con manta de amianto y, por otra parte, en el proyecto de orden ministerial relativo a la manipulaci¨®n de asbesto, en su art¨ªculo 8-g, se contempla la prohibici¨®n de que los trabajadores lleven la ropa de trabajo a su domicilio particular, parece harto dudoso que la antedicha afirmaci¨®n ministbrial pueda aplicarse a un uso como el descrito, que es legal y lo seguir¨¢ siendo, si no se modifica el texto legal proyectado. Otro tanto debe decir de los secadores de cabello, que tienen la resistencia el¨¦ctrica aislada con amianto y cuyas fibras, incluso las microsc¨®picas, son expulsadas al hacer funcionar el secador. Si, por otra parte, atendemos al empleo de filtro con amianto para clarificar vinos, cervezas, aguas minerales, etc¨¦tera, en los que se incorporan millones de fibrillas por litro, microsc¨®picas e invisibles para el usuario, a pesar de existir soluciones alternativas sin inconvenientes higi¨¦nicos e incluso m¨¢s baratas, no creemos que pueda afirmarse que el amianto carece de peligro para el usuario, alegando que no le llegan las fibras o el polvo.
Quienes pudieran estar interesados en el tema del asbesto en agua, pueden solicitarnos relaci¨®n de 180 trabajos sobre dicho asunto, y de 53 sobre el de la ingesti¨®n de amianto, dirigi¨¦ndose por escrito a Federaci¨®n de Construcci¨®n de CC OO. Fern¨¢ndez de la Hoz-12. Madrid-4.
SI, como se dice en la informaci¨®n que comentamos, se ha procedido a una revisi¨®n de la legislaci¨®n extranjera, se habr¨¢ tenido ocasi¨®n de comprobar c¨®mo la norteamericana impone limitaciones al contenido de amianto en el agua potable y, por tanto, al desprendimiento de fibras de la pared interna de las tuber¨ªas de amianto-cemento. Por algo ser¨¢.
Veamos ahora lo relativo a productos de amianto-cemento. El corte de placas para cubiertas se efect¨²a en seco, y las pilas de dichas placas salen de f¨¢brica conteniendo polvo procedente del corte, depositado entre placa y placa. Dicho polvo incluye asbesto libre: hay numerosos estudios que as¨ª lo confirman. Adem¨¢s de lo antedicho, los hidrocarburos polic¨ªclicos arom¨¢ticos que eventualmente contaminan las fibras de amianto vendr¨ªan a dar cuenta del extraordinario efecto sin¨¦rgico del tabaco sobre el poder cancer¨ªgeno del amianto, que as¨ª es enormemente incrementado. Esto lo avalan, entre otros, los estudios de Pylev,Shabad, Herington, Roe, etc¨¦tera.
Los hidrocarburos presentes en el asbesto son solamente un contaminante accidental, resultante de su laboreo, cardado, etc¨¦tera. Pero los moldeados de amianto-cemento son ba?ados con una mezcla de aceite mineral y gas¨®leo, o a veces petr¨®leo. Con estos tratamientos industriales se potencia el poder cancer¨ªgeno del amianto incomparablemente superior al atribuible a la contaminaci¨®n accidental que ya trae el asbesto al entrar por las puertas de la f¨¢brica de amianto-cemento.
Una mezcla de aceite de linaza (no confundir con aceite de colza) se aplica a las placas de amianto-cemento a Fin de obstruir peque?as fisuras de su cara lisa para mejorar su presentaci¨®n. Dicha mezcla resulta absorbida por la placa. El tratamiento se aplica a todas las placas destinadas a ser pintadas en f¨¢brica con pintura acr¨ªlica. Habida cuenta de que la absorci¨®n sobre amianto de algunos compuestos org¨¢nicos tiene por efecto el volver mut¨¢genas a sustancias que originalmente no lo son (y, con muy alta, probabilidad, haci¨¦ndolas cancer¨ªgenas, seg¨²n la consabida correlaci¨®n entre ambas propiedades), es de suponer que un tratamiento como el aqu¨ª descrito, en un estudio a fondo, habr¨¢ sido objeto de adecuada consideraci¨®n. ?O no? Otras sustancias org¨¢nicas concurrentes en puestos de trabajo de la industria del amianto-cemento y que eventualmente pueden contaminar el producto son la resina epoxidica empleada en el pegado de piezas, y la nafta, utilizada para disolverla.
En la fabricaci¨®n de dep¨®sito de amianto-cemento con moldeo por inyecci¨®n y fraguado en auto-clave se incorpora arena lavada (generalmente de playa o r¨ªo), tamizada en la propia f¨¢brica de amianto-cemento, y sometiendo a sus trabajadores a un adicional riesgo fibr¨®geno, pues se trata, en definitiva, de s¨ªlice incorporada para obtener una mayor estabilidad dimensional que elimine tensiones que de otra suerte se generar¨ªan en el proceso de fraguado acelerado, y que ser¨ªan causa de ulteriores fisuraciones espont¨¢neas en condiciones habituales de uso y transporte, en detrimento de la calidad del producto y de su utilidad para el fin al que se le destina. En buena l¨®gica, un riesgo fibr¨®geno adicional tan evidente como ¨¦ste, al igual que por el m¨¢rmol en polvo utilizado en la fabricaci¨®n de macetas de amianto-cemento estucadas, no ha debido escapar a la atenci¨®n de un estudio a fondo como el encomendado por la Direcci¨®n General de Trabajo.
es miembro de la Comisi¨®n Amianto de la Federaci¨®n de Construcci¨®n de CC OO.
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