La guerra del Yom Kipur, en 1973 pudo provocar un conflicto mundial

La guerra del Yom Kippur, en octubre de 1973, que enfrent¨® a Israel con Egipto y Siria, estuvo a punto de provocar un conflicto armado entre Estados Unidos y la Uni¨®n Sovi¨¦tica, afirma el ex secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger en el segundo volumen de sus memorias, que empez¨® a publicar parcialmente ayer la revista estadounidense Time.El 6 de octubre de 1973, d¨ªa en que estall¨® la guerra, estaba a punto de encontrarse una soluci¨®n en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde Estados Unidos se esforzaba por convencer a la URSS de que apoyase una resoluci¨®n en la que se ped¨ªa el cese de las hostilidades y el regreso al statu quo.

"Si la URSS hubiese mordido el anzuelo, la guerra estar¨ªa ya acabada", escribe Kissinger. "Si se negaban, Jerusal¨¦n hubiese tenido entonces tiempo de organizar una contraofensiva y dije a Haig -actual secretario de Estado- que dejar¨ªamos a los israel¨ªes "darles una paliza durante uno o dos d¨ªas para tranquilizarles".

"Nuestro ¨²nico error", a?ade, "consisti¨® en que fueron necesarios m¨¢s de uno o dos d¨ªas a los israel¨ªes para restablecer la situaci¨®n militar y llegaron a encontrarse al borde de la cat¨¢strofe".

Kissinger narra a continuaci¨®n sus consultas con Anatole Dobrinin, embajador sovi¨¦tico en Washington, y declara haberse convencido entonces de que la URSS era "un pescador en r¨ªo revuelto". Su temores fueron confirmados e 10 de octubre, justamente cuatro d¨ªas despu¨¦s del inicio de las hostilidades.

La URSS, agrega Kissinger alent¨® al rey Hussein de Jordania para que participase en la batalla mientras una veintena de aviones sovi¨¦ticos de transporte volaba hacia Siria v¨ªa Hungr¨ªa y Yugoslavia. "Este puente a¨¦reo ten¨ªa qu haber sido previsto de antemano" asegura Kissinger.

Dos d¨ªas m¨¢s tarde, el 12 de octubre, Dobrinin dijo a Kissinger que los ataques "b¨¢rbaros" de Israel ser¨ªan contestados. Los cen tros de poblaci¨®n israel¨ªes no podr¨ªan permanecer protegidos indefinidamente, y Mosc¨², a?adi¨®, "se dispone a tomar medidas".

Kissinger le contest¨® halci¨¦ndol observar que "cualquier intervenci¨®n sovi¨¦tica -cualquiera que sea el pretexto- obligar¨ªa a Estados Unidos a recurrir a la fuerza"

El ex secretario de Estado afirma tambi¨¦n que el mayor reto cuando dirig¨ªa la diplomicia norteamericana consisti¨® en mantener una pol¨ªtica exterior fuerte mientras, a causa del esc¨¢ndalo Watergate, la presidencia se debilitaba y era destrozada en la Prensa escrita y televisi¨®n.