??Espa?a, ent¨¦rate!!

Ent¨¦rate de que Valencia, las gentes del Reino de Valencia, est¨¢n en estos momentos bajo el abatimiento, el dolor y la incomprensi¨®n de c¨®mo las Cortes espa?olas han podido negarle al pueblo valenciano, al que habita las tres provincias de Alicante, Castell¨®n y Valencia, el reconocimiento del derecho hist¨®rico que le corresponde seg¨²n el art¨ªculo 147 de la Constituci¨®n, punto 2, extremo a).Negarle a Valencia lo que, sin discusi¨®n ninguna le han concedido a Murcia y a Cantabria, a la Rioja y a Galicia, a Asturias, a los vascos y a Catalu?a. Eso que nadie les ha discutido se le niega a Valencia desde el art¨ªculo primero de su proyecto de estatuto. Y la indignaci¨®n y perplejidad de los valencianos les hace preguntarse: ?Pero qu¨¦ delito ha podido cometer Valencia contra Espa?a para que de forma tan inicua Espa?a, representada en las Cortes, le niegue a Valencia el derecho de ser lo que es?

Valencia no ha hecho m¨¢s que trabajar siempre en beneficio de la patria com¨²n. Naturalmente, de esa patria que se llamaba Espa?a. Pero ahora, esos del "Estado espa?ol" se vengan contra Valencia por haber cometido la estupidez de trabajar para la comunidad de los espa?oles.

Valencia no se explica ni se explicar¨¢ jam¨¢s, no las torpezas de quienes llevaron la votaci¨®n de la forma m¨¢s incre¨ªble, sino tampoco la traici¨®n y las torpezas del PSOE, del PC que en Madrid juegan a ser partidos espa?olistas y en Valencia, descaradamente, act¨²an como separatistas apoyando todo el catalanismo de esa entelequia de los pa¨ªses catalanes. Seguimos sin comprender c¨®mo Alfonso Guerra descubre el imperialismo trasnochado de Jordi Pujol y le llama "Napole¨®n" por su ambici¨®n de hacerse con Valencia y las Baleares para crear unas colonias de esclavos al servicio de Catalu?a, y sin embargo, cuando llega la hora de votar, votan precisamente para ayudar a los proyectos separatistas del tal Jordi Pujol y compa?¨ªa. Y que nadie niegue que es verdad lo que estoy diciendo, porque al terminar la campa?a de propaganda para ser elegido presidente de la Generalidad, su ¨²ltimo grito fue "?Visquen els Pa?sos Catalans!. Y est¨¢ toda la Prensa de Espa?a como testimonio de que es verdad lo que digo. Pero parece que el PSOE no se entera de ese grito ni de lo que ello supone y ahora en las Cortes niegan a Valencia su denominaci¨®n hist¨®rica de Reino que es lo que defendemos la mayor¨ªa absoluta de los valencianos, porque en esa denominaci¨®n est¨¢ nuestra personalidad indiscutible.

Personalidad bien diferenciada que es una de las que crearon la comunidad nacional a la que llamamos Espa?a, aunque este nombre les haga rechinar los dientes a tantos enemigos de ella.

Esa personalidad tiene en el proyecto de estatuto los tres elementos incuestionables que la perfilan y la definen. Reino de Valencia. Senyera coronada sobre fondo azul. Y Lengua Valenciana, que es total y absolutamente distinta y diferente de la lengua catalana; a tal extremo distinta y diferente que un catal¨¢n hablando su lengua y un valenciano la suya no se entienden; y nos entendemos m¨¢s f¨¢cilmente los valencianos con los italianos en nuestras respectivas lenguas que con los catalanes. Hecho incuestionable y reconocido por todos los ling¨¹istas y fil¨®logos.

La denominaci¨®n Reino, con las ciencias de la Historia, de la Pol¨ªtica, de la Sociolog¨ªa y del Derecho Constitucional en la mano, es la ¨²nica que corresponde a las tierras existentes desde el Cenia al Segura. Y cient¨ªficamente hablando, la que se nos quiere imponer de pa¨ªs es totalmente acient¨ªfica y adem¨¢s anticonstitucional, porque la Constituci¨®n no admiti¨® dicha denominaci¨®n; las Cortes constituyentes la rechazaron; y al ser rechazada qued¨® fuera de la Constituci¨®n, imposible de ser propuesta ahora.

Con la constituci¨®n en la mano

Con la Constituci¨®n espa?ola en la mano, la denominaci¨®n que nos corresponde es ¨²nicamente la de Reino de Valencia, ya que adem¨¢s est¨¢n conformes todos los valencianos con ella, porque adem¨¢s est¨¢n conformes con lo que la Constituci¨®n dice. Los que se oponen, s¨¦palo Espa?a, son los enemigos de la Constituci¨®n los que quieren destruir la Constituci¨®n y Espa?a.

No lo ocultan. Porque ya es hora de que el resto de Espa?a se entere de lo que los valencianos sabemos y estamos sufriendo.

Sepa Espa?a que en una reuni¨®n de partidos pol¨ªticos de izquierda que pretenden el separatismo y la independencia de los pa¨ªses catalanes as¨ª lo proclamaron, sin disimulo alguno. Y para que lo sepa toda Espa?a aqu¨ª lo traducimos del catal¨¢n al castellano y lo publicamos con letras may¨²sculas.

Dicen as¨ª, sin tapujo alguno: "EL PARTIDO SOCIALISTA DE INDEPENDENCIA NACIONAL NO LUCHA PORQUE LOS PAISES CATALANES SEAN RECONOCIDOS CULTURAL E INSTITUCIONALMENTE EN EL SENO DEL ESTADO ESPA?OL. NOSOTROS, LOS HOMBRES Y MUJERES DEL PARTIDO SOCIALISTA DE INDEPENDENCIA NACIONAL NO QUEREMOS ELABORAR NINGUN PROGRAMA DE FUTURO PARA LA MAS JUSTA CONSTRUCCION DE ESPA?A. NOSOTROS QUEREMOS ABASTECER Y DIFUNDIR UNA IDEOLOGIA POLITICA QUE SIRVA PARA DESTRUIR EL ESTADO ESPA?OL, REQUISITO INDISPENSABLE PARA PODER CONSTRUIR EL ESTADO SOCIALISTA DE LOS PAISES CATALANES".

Y a esos principios de destrucci¨®n del Estado espa?ol y construcci¨®n del Estado independiente de los pa¨ªses catalanes firmaron su adhesi¨®n los que se manifestaron diciendo: "Los abajo firmantes, ciudadanos de los pa¨ªses catalanes, pol¨ªticamente independientes y de acuerdo con nuestra tarea para la libertad de nuestro pueblo, ante el primer congreso del Partido Socialista de Independencia Nacional, manifestamos: ... nuestra confianza en el hecho de que este primer congreso del ¨²nico partido nacional implantado a todo lo largo de los pa¨ªses catalanes presente un avance cualitativo del marxismo independentista en su lucha y en la ocupaci¨®n de un espacio pol¨ªtico propio de nuestras masas".

Y firmaron esta adhesi¨®n los que se llaman catalanes Joan Fuster, Vicente Andr¨¦s Estell¨¦s, Vicente Ventura y otra serie de gentes que se creen personajillos, sin ocultar sus firmas ni su adhesi¨®n.

Como en este peri¨®dico algunas veces han aparecido art¨ªculos firmados por Joan Fuster y por Vicente Ventura, sepan los lectores la ideolog¨ªa y los prop¨®sitos de esos se?ores que en Valencia no los ocultan, pero que en el resto de Espa?a, con pieles de cordero, hacen creer a las gentes lo que no son, mintiendo sobre los que defendemos a Valencia y a Espa?a.

Ese es el problema que est¨¢ viviendo hoy Valencia. EI de lucha contra toda esa ideolog¨ªa que est¨¢ ahogando al pueblo. Porque el pueblo, que tanto hizo en el siglo XV por construir la unidad de Espa?a, ni se siente ni se ha sentido jam¨¢s independentista ni separatista del resto de todos los pueblos que formamos la patria com¨²n: porque no quiere destruir lo que cre¨®. A ese pueblo, a nosotros los valencianos se nos ha ofendido por las Cortes porque con la denominaci¨®n de Reino lo que queremos es seguir siendo una sola regi¨®n llamada Espa?a. Y si rechazamos cualquier otra denominaci¨®n que no sea la de Reino es porque detr¨¢s o dentro de ella se est¨¢ llevando todo el programa de independencia y de separatismo catal¨¢n que valencia rechaza. Porque Valencia jam¨¢s ha sido Catalu?a ni a los valencianos se nos puede insultar llam¨¢ndonos catalanes. Somos valencianos y con eso nos basta porque juzgamos y creemos que bastante honor es serlo.

Y ahora no reclamamos m¨¢s que lo que se ha dado sin discusi¨®n al resto de las regiones citadas al principio de este escrito. No comprendemos como Santiago Carrillo ha defendido y votado para su Asturias la denominaci¨®n del Principado, porque en justicia as¨ª la ha tenido en la historia, y sin embargo nos niega a Valencia el t¨ªtulo de Reino que tenemos tanto derecho a llevarlo como los asturianos el de Principado.

No comprendemos por qu¨¦ los catalanes, que exigieron llamarse Principado de Catalu?a cuando en la historia jam¨¢s ha habido un solo pr¨ªncipe con ese nombre, nos puedan negar a nosotros la denominaci¨®n de Reino, que lo tiene ininterrumpidamente Valencia desde el a?o 1010 hasta nuestros d¨ªas. Hasta nuestros d¨ªas como est¨¢ el testimonio de la firma de nuestro monarca don Juan Carlos I, que en algunas ocasiones la ha estampado diciendo por ejemplo "a los valencianos del Reino de Valencia".

Valencia no invoca m¨¢s derecho que el suyo

Valencia no invoca m¨¢s derecho que a lo que es suyo; a lo que es. Y no hemos apoyado nuestra petici¨®n diciendo por ejemplo que alg¨²n derecho podremos tener cuando el Reino de Valencia est¨¢ trayendo a la econom¨ªa Espa?ola ?el 25% de todas las divisas que entran del Mercado Com¨²n!. ?El 20% de todas las divisas que entran en Espa?a del resto de todo el mundo!.

Ah¨ª esta la raz¨®n y Espa?a no la ve. La raz¨®n de que Catalu?a quiere llevarse para ella sola, esclaviz¨¢ndonos, las tierras del Reino de Valencia, para llevarse a sus arcas ese 25% de divisas de todo el Mercado Com¨²n que traemos y ese otro 20% de todas las que del resto del mundo sabemos ganar los valencianos para Espa?a. Ese es el fondo del asunto, y es hora de que Espa?a se entere. Y que no se olvide que al frente de la Generalidad hay un banquero y no un analfabeto precisamente.Por eso se oponen a la LOAPA, con la finalidad de tener las manos libres para apoderarase de Valencia y Baleares.

Valencia cumple con su obligaci¨®n defendiendo la unidad de Espa?a y solamente decimos y queremos recordar que al fin Madrid ha reconocido que por casi cien a?os de torpezas pol¨ªticas desde Madrid se ha creado y provocado el separatismo catal¨¢n.

Que esa triste verdad no la olvide Espa?a y sepa arropar y apoyar a Valencia, que probadas veces tiene demostrado que no quiere dejar de ser espa?ola. ?Pero que no se nos empuje a dejar de serlo!.

Por eso queremos ser Reino de Valencia y nada m¨¢s.