La CEE, una de las instituciones m¨¢s impopulares en Gran Breta?a
El Reino Unido no quiso participar en 1957 en el Tratado de Roma, receloso de que su dimensi¨®n "supranacional" pudiera socavar sus relaciones con sus antiguas colonias de la Commonwealth y con Estados Unidos. En 1973, el Reino Unido ingres¨® finalmente en la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) creyendo que iba a cabalgar en un potro veloz. El potro estaba ya cansado y la crisis econ¨®mica comenzaba a arreciar. La CEE se ha convertido en una de las instituciones m¨¢s impopulares en el Reino Unido.La CEE hab¨ªa logrado cautivar al cuerpo brit¨¢nico, pero no a su alma. Las ¨²ltimas encuestas de opini¨®n dan invariablemente una mayor¨ªa en contra del Mercado Com¨²n. Pero los datos son los datos, y el Reino Unido est¨¢ en la actualidad exportando con super¨¢vit un 43% de sus ventas al extranjero a los pa¨ªses de la CEE. El hombre de la calle no es plenamente consciente de hasta qu¨¦ punto la econom¨ªa brit¨¢nica est¨¢ ya ligada a la Comunidad.
Las cr¨ªticas de fondo m¨¢s populares contra la CEE se refieren al encarecimiento de la cesta de la compra, en un pa¨ªs acostumbrado hasta 1973 a una comida barata y al hecho de que, por encima de su Parlamento, unos bur¨®cratas en Bruselas decidan sobre el tama?o est¨¢ndar de la salchicha inglesa u otros puntos menos livianos.
El ¨²nco partido que aboga inequ¨ªvocamente por la retirada brit¨¢nica del Mercado Com¨²n es el laborista, con su pol¨ªtica econ¨®mica proteccionista, si bien sigue con atenci¨®n el experimento socialista franc¨¦s. Para lograr sus prop¨®sitos, el Partido Laborista necesitar¨ªa una mayor¨ªa muy sustancial en las pr¨®ximas elecciones e, incluso entonces, las dificultades podr¨ªan ser insuperables.
El Reino Unido, cayendo en la cuenta de su error hist¨®rico, solicit¨® por vez primera en 1961 su ingreso en la CEE, y s¨®lo lo consigui¨® despu¨¦s de la ca¨ªda de De Gaulle, en 1969. Una vez dentro de la Comunidad, y habiendo perdido los a?os del gran despegue europeo, el Reino Unido comenz¨® a renegociar los t¨¦rminos de su ingreso.
Margaret Thatcher ha protestado repetidamente contra lo que considera una excesiva contribuci¨®n brit¨¢nica al presupuesto comunitario.
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