Los socialistas italianos creen llegada su hora
Con gran solemnidad se celebra en R¨ªmini la conferencia program¨¢tica del Partido Socialista italiano para analizar el proyecto, lanzado el a?o pasado por su secretario, Bettino Craxi, sobre la gran reforma institucional. para convertir a Italia en un pa¨ªs "moderno y reformista".
Participa todo el partido. Por eso alguien le ha llamado "congreso extraordinario". M¨¢s de mil miembros del partido y 3.000 invitados. Asisten, como en los congresos nacionales, delegaciones de todos los otros partidos democr¨¢ticos del Gobierno y de la oposici¨®n.Se trata, evidentemente, de una propuesta de programa de Gobierno del partido socialista. Y los socialistas est¨¢n convencidos de que ha llegado para Italia la hora socialista. Y proponen una receta para salir de la crisis profunda que zarandea a este pa¨ªs. Una reforma a fondo de las instituciones que se han quedado viejas o ineficientes despu¨¦s de 35 a?os de la entrada en vigor de la Constituci¨®n republicana. Y el punto central es la gobernabilidad.
No es posible, dijeron ayer los juristas del partido, que un pa¨ªs pueda funcionar con Gobiernos que no duran, como promedio, m¨¢s de diez meses en el poder desde hace cuarenta a?os.
Contra la burocracia
No se trata, dicen, de cambiar la Constituci¨®n, pero s¨ª de introducir toda una serie de mecanismos que haga funcionar al ejecutivo, que elimine las ramas secas de la burocracia que se ha infiltrado en todos los campos, desde la presidencia de la Rep¨²blica a la del Gobierno y el Parlamento. Se pide una reforma a fondo de las dos ramas del Parlamento, una legislativa y otra de control, para que el camino de las leyes que hoy pasan por diputados y senadores no se haga eterno.Se piensa retocar tambi¨¦n la ley electoral y, hasta el mecanismo sindical de la huelga. Se piensa construir un pa¨ªs moderno cuyas instituciones funcionen, para evitar de este modo, dicen los socialistas, que se den esos fen¨®menos de continuo desgaste institucional con la implicaci¨®n de servicios secretos, de logias secretas y con connivencias entre Mafia, terrorismo y grupos ocultos de poder pol¨ªtico.
El congreso est¨¢ siendo seguido con mucho inter¨¦s pol¨ªtico y, lo que es m¨¢s raro, con simpat¨ªa entre la opini¨®n p¨²blica, que, cansada de esc¨¢ndalos y de intrigas, acepta con inter¨¦s todo lo que sean ideas positivas de cambio de la sociedad.
Pero el problema de fondo lo ha expuesto ayer el te¨®logo y polit¨®logo genov¨¦s Gianni Baget-Bozzo, quien dijo que el problema de la gran reforma no es s¨®lo de ingenier¨ªa institucional: es pol¨ªtico, es de alternativa de poder, y por ello ha preguntado a los socialistas con qu¨¦ fuerzas pol¨ªticas piensan contar para esta gran reforma.
Si piensan hacerlo con la DC, dijo, todo se quedar¨¢ en agua de borrajas, porque ella es responsable en parte de la actual ingobernabilidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.