El Real Madrid no cumpli¨® con las cuentas de Boskov
Era deseo ferviente en el Real Madrid que la transici¨®n concluyera con un t¨ªtulo de Liga, para que nadie negara que, a pesar de no estar Bernab¨¦u, la pol¨ªtica de la presidencia hab¨ªa estado m¨¢s del lado de la continuidad que de la ruptura. Perolos a?os no perdonan, y el club quiz¨¢s se tenga que conformar con ese suced¨¢neo en el que se ha convertido el t¨ªtulo de Copa, conseguido muy a ¨²ltima hora y con af¨¢n desesperado. Para el Real Madrid, el torneo de Liga transcurri¨® entre las cuentas de Boskov y el disgusto de los aficionados por un juego y unos resultados que no convenc¨ªan. Al final, lo que parec¨ªa un abismo irreconciliable estuvo a punto de encontrar un punto de convergencia con Boskov de ganador.
La Liga comenz¨® para el Madrid con la excusa de una viceliga y una vicecopa de Europa conseguidas en la temporada anterior. Al carro de las lamentaciones se le a?adi¨® una pizca de esperanza en la definitiva recuperaci¨®n de Cunningham y unas gotas de expectaci¨®n por comprobar la rentabilidad de los fichajes de Ito o Carcel¨¦n.Boskov dec¨ªa tenerlo todo dispuesto y amenazaba a sus rivales con apropiarse de todos los t¨ªtulos a que aspirara el equipo blanco. "Ga?ar es ga?ar, dos puntos son dos puntos y t¨ªtulo es t¨ªtulo" constitu¨ªa la breve, sencilla pero sabia, teor¨ªa del t¨¦cnico yugoslavo, cuya rotundidad y l¨®gina nadie habr¨¢ podido discutir. Por otro lado, y a la imagen ofrecida por las andanzas discotequeras de Cunningham, algo que los puristas del bernabeu¨ªsmo no hubieran consentido jam¨¢s, se le uni¨® una inusitada actividad pretemporada de Juanito, que aliment¨® las portadas de las llamadas revistas del coraz¨®n. Con todo este arsenal, el primer encuentro de Liga culmin¨® con derrota ante la Real Sociedad en Atocha por un terminante 3 a 1.
El esquema t¨¢ctico del equipo era similar al de la temporada anterior, lo que significaba la titularidad, un a?o m¨¢s, de Isidro. Ligeras variaciones lo fueron el asentamiento del joven Gallego y la p¨¦rdida de potencia f¨ªsica de Angel; as¨ª, el equipo depend¨ªa de los buenos momentos de Stielike y de alguna genialidad de Juanito. Superada la ausencia de Cunningham, la delantera "una de las mejores de Europa sobre el papel", seg¨²n Boskov, redujo su efectividad con las intermitentes ausencias de Santillana y los apagones de Juanito, que perdi¨® su puesto en la selecci¨®n nacional. En estas circunstancias no surgi¨® ning¨²n relevo y el juego del equipo empeor¨®.
La primera vuelta concluy¨® con ventaja del Barcelona, que realiz¨® fases de juego brillante y que hizo temer por un holgado y triomfant final de liga. Boskov, entonces, ech¨® mano de su matem¨¢tica y lanz¨® su dial¨¦ctica hacia la lesi¨®n de Schuster y sus repercusiones sobre el juego del conjunto catal¨¢n. Boskov sentenci¨®, para animar la segunda vuelta, al Barcelona al papel de comparsa y s¨®lo manifest¨® atenci¨®n por la Real Sociedad. El Madrid s¨®lo pudo alardear de cierta fortaleza en el Bernab¨¦u, donde malganaba a sus rivales, pero sin llegar a perder un s¨®lo punto. En campo ajeno, el resultado era pobre: dos victorias (Gij¨®n y Bilbao) y dos empates (Zaragoza y Sevilla).
Boskov prometi¨® un paseo militar en la segunda vuelta con vaticinio de desastre azulgrana. Y lo primero se cumpli¨® en la primera fase, puesto que en los cinco primeros partidos el Madrid logr¨® nueve puntos sobre diez, con s¨®lo el tropiezo ante la Real Sociedad en el Santiago Bernab¨¦u (1-1), y las importantes victorias ante el Atl¨¦tico de Madrid (2-3), esc¨¢ndalo Ur¨ªzar inclu¨ªdo, y H¨¦rcules (0-1). Sin embargo, y por segunda vez, a Boskov le fallaron las cuentas. Al igual que con el Barcelona, el Luis Casanova supuso el comienzo del bache que termin¨® con su cese. A lo largo de diez semanas, tres meses aciagos, el Real Madrid s¨®lo pudo obtener dos empates fuera ante Valladolid (0-0) y Betis (0-0); el resto fueron derrotas. En casa se perdi¨® fortaleza y s¨®lo se pudo ganar al C¨¢diz (2-0), con empates frente a Espa?ol (1-1) y Athl¨¦tic (1-1). De Las Palmas, Boskov pas¨® por la aduana su cese camuflado de dimisi¨®n lacrim¨®gena. La huelga de futbolistas impidi¨® a los titulares el honor de obtener la ¨²nica victoria fuera desde que el rumbo se torci¨®: fueron los reservas quienes derrotaron al Castell¨®n (1-2). Al final, la papeleta se resolvi¨® en cuatro d¨ªas: obtenci¨®n del t¨ªtulo de Copa y victoria de castigo sobre el Barcelona. Remitir hasta el ¨²ltima encuentro la posibilidad de ser campe¨®n de Liga era un brindis en honor de Boskov. Cada cual en su sitio: el Madrid haciendo buena su historia; el t¨¦cnico, sus cuentas.
En la Liga, el Real Madrid cosech¨® pocos goles, aunque fue el equipo menos goleado, con perd¨®n de Arconada. Para los suspicaces, al Madrid se le pitaron 5 penalties a favor y 2 en contra, cifra inferior a la del Barcelona -8 a favor y seis en contra-. Juanito, pese a todo, fue el m¨¢ximo goleador del equipo -nueve goles-, con Santillana y Stielike -8-, detr¨¢s.Otra peque?a historia fue el altercado Miguel Angel-Boskov, las denuncias de Juanito, la solidaridad de los jugadores hacia el t¨¦cnico yugoslavo y el misterio que rodea las operaciones de L¨®pez Quiles. En el terreno europeo, por ¨²ltimo, el Real Madrid tuvo su noche negra: tres expulsados en Kaiserlautern, goleada humillante inclu¨ªda, y la imagen del club deteriorada: la prensa calific¨® a los otrora caballeros madridistas de simples "le?adores".
Si De Carlos no lo impide, ¨¦ste ser¨¢ el ¨²ltimo a?o de la transici¨®n. El legado hist¨®rico seguir¨¢ pesando sobre un club que construye el futuro con la vista puesta en su pasado.
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