Le?o, la fidelidad tambi¨¦n se premia

Lo que hace unos pocos a?os parec¨ªa una entelequia, que un grupo espa?ol pudiera llenar el pabell¨®n de deportes del Real Madrid, se va convirtiendo en un hecho habitual. Hasta ahora los protagonistas han sido grupos de rock duro, y es justo reconocer que ellos han sentado un precedente esperanzador.El pasado viernes le toc¨® el turno al grupo Le?o. Hace apenas un a?o este tr¨ªo hab¨ªa grabado un elep¨¦ en directo desde la sala Carolina, lugar que ellos, y de forma milagrosa consiguieron convertir en acogedor. El paso ha sido gigantesco, pero tambi¨¦n previsible. A lo largo de unos cuantos a?os, Le?o ha sido uno de los grupos m¨¢s coherentes de este pa¨ªs. Tanto es as¨ª que eran (y son) respetados por las hornadas m¨¢s o menos irritantes que conforman la nueva ola madrile?a, por lo dem¨¢s tan iconoclasta. La honradez, la fidelidad a lo que uno cree se valora hasta por los enemigos, y en eso a Le?o no hay quien les gane.

El concierto en s¨ª comenz¨® con la actuacion del grupo Alarma, un tr¨ªo formado por m¨²sicos experimentados que en esta formaci¨®n pueden encontrar su nicho natural. No sonaron demasiado bien, pero tambi¨¦n es cierto que esta era casi su primera actuaci¨®n y que sin duda ir¨¢n a m¨¢s a poco que se lo propongan en serio.

Le?o, con un equipo de lujo (hasta guitarras inal¨¢mbricas, como AC/DC) y unas luces muy bien manejadas, respondieron a cualquier esperanza, demostrando que, junto a Ob¨²s y Bar¨®n Rojo, son uno de los triunviros del rock duro espa?ol. Y puestos a matizar o a subjetivizar, tambi¨¦n son, desde el punto de vista generalizado de la cr¨ªtica, los proconsules del invento. El tr¨ªo a estas alturas funciona como un reloj (con alg¨²n salto de minutero, eso s¨ª), y tanto las canciones como la guitarra de Rosendo Mercado o la base r¨ªtmica poseen una densidad y un sentido dif¨ªcil de encontrar en otros. Le?o, como su mismo nombre indica, es un grupo contundente, directo.