Las islas Ascensi¨®n y Georgias del Sur, dos eslabones en la estrategia brit¨¢nica del Atl¨¢ntico
Peque?as islas sirven a grandes estrategias. Este es el caso de la isla de la Ascensi¨®n. Este podr¨ªa ser el destino de las Georgias del Sur. La estrategia global saca a veces partido de terrenos desiertos. La isla de la Ascensi¨®n, en medio del Atl¨¢ntico, entre Recife y Luanda, ha demostrado ser una pieza vital en el ajedrez brit¨¢nico para recuperar las islas Malvinas, situadas a unos 6.000 kil¨®metros de esta isla de 88 kil¨®metros cuadrados, deshabitada hasta 1815, cuando Napole¨®n fue desterrado a Santa Elena.Ascensi¨®n, territorio dependiente brit¨¢nico, no cobr¨® importancia estrat¨¦gica hasta 1942, cuando, en plena segunda guerra mundial, Estados Unidos coristruy¨® una pista de aterrizaje, posteriormente transformada enbase a¨¦rea.
Con la posguerra, este diminuto territorio se convirti¨® en un importante centro de comunicaciones, con un millar de habitantes. En la Ascensi¨®n, Estados Unidos tiene una terminal para seguimiento de misiles de largo alcance, los servicios radiof¨®nicos de la BBC disponen de un rel¨¦ y la compa?¨ªa telef¨®nica brit¨¢nica la ha convertido en un nudo de cables.
All¨ª tiene su base tambi¨¦n un centro de sigint (signal intelligence), operado por un equipo brit¨¢nico, para la localizaci¨®n de barcos a trav¨¦s de sus se?ales de radio.
La base a¨¦rea est¨¢ bajo mando norteamericano, arrendada por el Gobierno brit¨¢nico que, por acuerdo especial, no ha sido hecho p¨²blico. Londres tiene derecho a utilizar la mayor parte de sus instalaciones.
Ascensi¨®n es la ¨²ltima base de que dispone el Reino Unido entre Londres y las islas Malvinas, y la ha utilizado profusamente para transportar equipos y reavituallamientos, con sus aviones H¨¦rcules C-130. En el puerto de la capital, Georgetown, se han podido ver, seg¨²n han manifestado los peri¨®dicos brit¨¢nicos, un gran n¨²mero de buques y tropas.
Fue de esta isla de donde partieron los bombarderos Vulcan que el s¨¢bado pasado atacaron el aer¨®dromo de Port Stanley, en la capital de las Malv¨ªnas. Ser¨ªa desde aqu¨ª de donde despegar¨ªan estos mismos aviones, para, tras reaprovisionarse de carburante en vuelo, atacar las bases argentinas en el continente si fuese necesario. Es tambi¨¦n el lugar desde el cual operan complejos aviones de reconocimiento Nimrod.
Si la crisis de las Malvinas desemboca en alg¨²n tipo de soluci¨®n diplom¨¢tica -y a largo plazo no parece quedar otro remedio-, Londres podr¨ªa decidir potenciar las recuperadas Georgias del Sur para su estrategia global. Informaciones no confirmadas afirman que cuando las fuerzas brit¨¢nicas desembarcaron en las islas llevaban consigo excavadoras y otros equipos para construir una pista de aterrizaje.
Si estos planes se confirman, Londres estar¨ªa pensando no s¨®lo en una base para sus operaciones contra las fuerzas argentinas en esta fase de la crisis, sino tambi¨¦n en proyectos a m¨¢s largo plazo. Un trampol¨ªn en las Georgias del Sur permitir¨ªa controlar con mayor eficacia el "territorio brit¨¢nico de la Ant¨¢rtida".
Algunos analistas han se?alado que las Georgias del Sur servir¨ªan tambi¨¦n como base para cubrir las rutas de la navegaci¨®n comercial y del petr¨®leo si alg¨²n d¨ªa se cerrara el canal de Panam¨¢. Por todas estas razones se puede asegurar que, aunque Londres accediera a ceder las islas Malvinas, insistir¨ªa en conservar las Georgias.
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