El Gobierno sovi¨¦tico dicta orden de expulsi¨®n contra el director de la compa?a Iberia en Mosc¨²

Por primera vez en la historia de las relaciones hispano-sovi¨¦ticas, el Gobierno de Mosc¨² ha dictado orden de expulsi¨®n de su territorio contra un ciudadano espa?ol. El lunes por la tarde, el Ministerio sovi¨¦tico de Asuntos Exteriores comunicaba a la Embajada de Espa?a en la URSS que el director de la compa?¨ªa Iberia, Mariano S¨¢nchez-Gracia, deb¨ªa abandonar el pa¨ªs en el plazo de una semana.

El funcionario sovi¨¦tico que dio a conocer la medida se limit¨® a leer una nota en la que se acusaba a S¨¢nchez-Gracia de realizar "actividades ajenas a sus funciones". Sin embargo, nadie duda de que se trata simplemente de una represalia por la expulsi¨®n de Espa?a del director de Aeroflot, Fedorin Vasili Nikolayevich, y del ingeniero de la misma compa?¨ªa VIadimir Lukin Tirtishnikov, que regresaron precipitadamente a Mosc¨² el pasado 28 de abril.Desde que, hace cinco a?os, Espa?a y la URSS reanudaron las relaciones diplom¨¢ticas, rotas al final de la guerra civil, el Gobierno de Madrid ha expulsado a diez sovi¨¦ticos acusados de espionaje o de "atentar a la seguridad nacional". En ning¨²n caso los sovi¨¦ticos hab¨ªan respondido a estas medidas, si bien en una ocasi¨®n se realizaron presiones contra una funcionaria de la Embajada de Espa?a, que termin¨® abandonando Mosc¨².

Seg¨²n se coment¨® en Madrid a finales del pasado mes, el Ministerio espa?ol de Asuntos Exteriores no fue partidario de expulsar a los dos representantes de Aeroflot, en la creencia de que en esta ocasi¨®n los sovi¨¦ticos tomar¨ªan represalias. Incluso se lleg¨® a hablar de que la Embajada sovi¨¦tica hab¨ªa dado a conocer al Ministerio espa?ol de Asuntos Exteriores su desagrado por la expulsi¨®n de sus dos compatriotas, sugiriendo la posible aplicaci¨®n por parte de Mosc¨² de id¨¦nticas medidas con los funcionarios espa?oles. Hasta el momento, la diplomacia de la URSS hab¨ªa respondido con el silencio a las anteriores expulsiones de personal sovi¨¦tico destinado en Espa?a.

El director de Iberia en Mosc¨², ahora expulsado, es uno de los miembros m¨¢s veteranos de la colonia espa?ola formada en la URSS a ra¨ªz de la restauraci¨®n de las relaciones diplom¨¢ticas. Llevaba viviendo en la Uni¨®n Sovi¨¦tica m¨¢s de tres a?os.

En la actualidad, las relaciones hispano-sovielticas pasan por uno de sus peores momentos. Si bien las cifras del comercio entre ambos pa¨ªses tienen cierta tendencia ascendente, los lazos pol¨ªticos se han visto muy deteriorados despu¨¦s de que Espa?a mostrara sus deseos de integrarse en la OTAN. A finales del pasado verano, la Embajada de la URSS en Madrid entreg¨® un memor¨¢ndum sobre este tema en el Ministerio espa?ol de Asuntos Exteriores, que l¨²e calificado de injerencia en medios diplom¨¢ticos de nuestro pa¨ªs.

Durante los ¨²ltimo tiempos, la presencia en mosc¨² de hombres de negocios y periodistas espa?oles -ya de por s¨ª bastante exigua- se ha ido reduciendo. La compa?¨ªa Iberia -presumiblemente, por razones econ¨®micas- ha venido anulando buena parte de sus vuelos a Mosc¨², que, te¨®ricamente, tienen periodicidad semanal.