La ficci¨®n teatral re¨²ne en un escenario de Mosc¨² a Stalin y Breznev
El espect¨¢culo esta basado en un libro del actual presidente sovi¨¦tico
Stalin y Breznev han vuelto a encontrarse. Esta vez en un escenario: el del teatro Bajtangov, de la calle Arbat de Mosc¨². Naturalmente, se trata de una ficci¨®n. La obra Pravda pameti que se podr¨ªa traducir por La verdadera memoria, est¨¢ basada en Resurgimiento, uno de los libros autobiogr¨¢ficos del l¨ªder sovi¨¦tico Le¨®nidas Breznev.
El p¨²blico que asiste a la representaci¨®n contempla en un nervioso silencio la breve escena de madrugada, Stalin llama por tel¨¦fono a Breznev, que se encontraba dirigiendo la reconstrucci¨®n de unos altos hornos en la regi¨®n de Zaporozhie, destruidos por los nazis durante la segunda guerra mundial. Por aquel entonces -a?o 1946-, Breznev era secretario del partido en esa zona y su trabajo hab¨ªa sido ¨¢cidamente criticado por Pravda.Puesto en pie, el actor que representa a Breznev escucha atentamente las palabras que Stalin le dirige a trav¨¦s del tel¨¦fono y se queja de la presencia en la regi¨®n de un funcionario enviado desde Mosc¨² por el Comit¨¦, Central que, a su juicio, s¨®lo serv¨ªa para obstaculizar el trabajo. De modo seco, Stalin responde con unas palabras que resultan m¨¢s inquietantes a¨²n a esas horas de la madrugada: "Tomar¨¦ medidas. Ya sabr¨¢s cu¨¢les son ma?ana por la ma?ana".
"En aquellos d¨ªas", comenta para s¨ª Breznev, "el trabajo s¨®lo me permit¨ªa dormir tres horas. Aquella noche no pude dormir nada". Pasadas esas horas de intensos nervios, Breznev puede comprobar que las medidas tomadas por Stalin son beneficiosas para ¨¦l. A la ma?ana siguiente, el vag¨®n especial que albergaba al representante del Comit¨¦ Central desapareci¨® de la estaci¨®n: Stalin le hab¨ªa ordenado volver a Mosc¨².
Indudablemente, Stalin resulta ser un personaje positivo en esta obra de teatro. El p¨²blico, al menos, parece verlo as¨ª cuando aplaude al final de la escena. En Resurgimiento, el libro autobiogr¨¢fico de Breznev en el que se basa el drama, la conversaci¨®n con Stalin no se encuentra recogida con tanto detalle.
Pero el atractivo de esta obra no reside s¨®lo en este ins¨®lito di¨¢logo teatral entre Stalin y Breznev. Hay tambi¨¦n algo que en principio, podr¨ªa ser un lapsus del censor y que da lugar a picantes comentarios entre los enterados de Mosc¨².
Complicidad del p¨²blico
Una de las actrices de la obra es Larisa Pachkova, 62 a?os, que est¨¢ casada con Anatoli Kolivatov, el ex director general de la ,administraci¨®n de los circos sovi¨¦ticos que a comienzos de este a?o fue detenido por corrupci¨®n.Este asunto dio mucho que hablar entonces, ya que la hija de Breznev, Galina, ten¨ªa gran amistad con los implicados.
Larisa, esposa de Kolivatov, estuvo tambi¨¦n detenida temporalmente. Pues bien, en la obra interpreta a una anciana que tiene a su marido enfermo y muestra a Breznev sus quejas por los problemas de abastecimiento alimenticio. Ya casi al final de la representaci¨®n, Breznev pregunta: "?C¨®mo est¨¢ tu marido?". "Mal, muy mal", responde Larisa. Entonces, los enterados, aquellos que conocen al dedillo los ¨²ltimos rumores que rodean al Kremlin, no pueden evitar la sonrisa.
Babelia
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