Desconcierto centrista y moderaci¨®n en el PSOE tras las elecciones

Viene de la primera p¨¢ginaAs¨ªmismo, el "grupo de los treinta" parlamentarios y destacados militantes socialdem¨®cratas parece ser que mantuvieron otra reuni¨®n, que habr¨ªa contado con la presencia del titular de Transportes, Luis G¨¢mir.

La gran inc¨®gnita contin¨²a siendo la actitud que adoptar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas el expresidente Adolfo Su¨¢rez, que durante todo el d¨ªa de ayer permaneci¨® reclu¨ªdo en su despacho de la calle Antonio Maura y declin¨® hacer comentarios sobre la derrota sufrida en Andaluc¨ªa. El expresidente no abandon¨® el bufete ni para almorzar, y mand¨® que le subieran la comida al despacho. Seg¨²n sus colaboradores, la causa oficial de este enclaustramiento fueron "asuntos pendientes, exclusivamente profesionales, que el expresidente tiene que tratar". Los partidos permanec¨ªan ayer en una jornada de reflexi¨®n sobre los resultados andaluces.

Los suaristas, que oficialmente mantienen la misma actitud de reserva que su jefe de filas, conf¨ªan en que Calvo Sotelo presente su dimisi¨®n como presidente del partido. Un destacado miembro de este sector asegur¨® ayer a EL PAIS que, despu¨¦s de lo ocurrido, "lo normal y lo l¨®gico" es que Calvo Sotelo presente su dimisi¨®n, en la reuni¨®n de la ejecutiva de ma?ana, y Adolfo Su¨¢rez vuelva a hacerse con el control del partido. La citada fuente, que manifest¨® que, a lo largo de todo el d¨ªa de ayer los suaristas hab¨ªan recibido numerosos telegramas de los secretarios provinciales pidiendo esta sustituci¨®n, se?al¨® que hab¨ªa llegado la hora de plantearse el liderazgo compartido: Calvo Sotelo como presidente del Gobierno y Adolfo Su¨¢rez como presidente del partido.

Para Antonio Garrigues, presidente de los Clubes Liberales, los resultados andaluces de UCD le han llevado al convencimiento, al que ha llegado por propia determinaci¨®n, de que su aportaci¨®n al partido del Gobierno se hace m¨¢s necesaria que antes. Curiosamente, el liberalismo que ahora se ofrece como tabla de salvaci¨®n, tuvo en Soledad Becerril y en el secretario de organizaci¨®n de UCD, Pedro L¨®pez Jim¨¦nez, a dos destacados puntales de la campa?a centrista en Andaluc¨ªa. Garrigues ha llegado tambi¨¦n al convencimiento de que no es posible su entendimiento con Su¨¢rez.

El presidente Calvo Sotelo trata de mantener la cohesi¨®n del partido, cada vez m¨¢s amenazado con una escisi¨®n interna, a base de no adelantar las elecciones, evitar ahora una crisis de Gobierno y reestructurar a fondo la UCD, tal vez incluso forzando alg¨²n tipo de pacto con Alianza Popular. En su reuni¨®n de ayer con los nueve ministros en La Moncloa, el presidente expres¨® la decisi¨®n de no proceder, por ahora, a la disoluci¨®n de las c¨¢maras. Triunf¨® la tesis, expuesta por Rodr¨ªguez Inciarte y Jaime Lamo de Espinosa, de "prolongar la Legislatura lo m¨¢s posible", porque, de lo que se trata, seg¨²n palabras de uno de los ministros, presentes, "es de ganar tiempo para reestructurar el partido y poder ofertar a los electores, en 1983, algo m¨ªnimamente digno, coherente, y, sobre todo, de centro". Jaime Lamo fue muy duro en sus cr¨ªticas al partido. En opini¨®n del ministro adjunto al presidente, lo que ha ocurrido en Andaluc¨ªa no es m¨¢s que el resultado del alejamiento que ha experimentado UCD en los ¨²ltimos a?os con respecto a su electorado natural, aquel que le di¨® el triunfo en las dos elecciones generales.

Tambi¨¦n se lleg¨® al acuerdo de no reestructurar ¨¦l Gabinete, manteniendo, en este sentido, las opiniones expresadas por Calvo Sotelo en privado la semana pasada: continuar al frente de la presidencia del Gobierno, concurrir a los pr¨®ximos comicios como candidato de UCD, sin coaliciones, y completar normalmente, dentro de lo posible, la Legislatura.

Resulta dif¨ªcil saber con exactitud si, al margen de lo acordado ayer en la reuni¨®n del "sanedr¨ªn ampliado" de La Moncloa, Calvo Sotelo podr¨¢ mantener todos estos extremos. En especial, lo que respecta a las coaliciones: un ala importante de ucedistas se proclama, tras ver los resultados andaluces, partidaria de un inmediato acercamiento a Manuel Fraga. Jaime Lamo plante¨®, en la reuni¨®n, su temor a que, se produzca una nueva fuga de diputados centristas hacia las filas de Alianza Popular. El ministro de Justicia, P¨ªo Cabanillas, parece ser el m¨¢s proclive a este entendimiento con AP.

El reclamo de Fraga

La tesis mantenida por los socialdem¨®cratas, en el sentido de que precisamente el descalabro andaluz proviene de no haber sabido presentar una oferta claramente diferenciada de la de Manuel Fraga, apunta a que, efectivamente, el entendimiento en el partido del Gobierno parece cada vez m¨¢s improbable.

Anoche, en la mencionada cena a tres bandas, se plantearon las posibles modalidades de este acercamiento. Lo primero que hizo Manuel Fraga ayer al levantarse fue llamar al presidente Calvo Sotelo y recordarle que si, oferta de formar cuanto antes la "mayor¨ªa natural" segu¨ªa en pie, y esta vez, tras el ascenso de Alianza Popular en Andaluc¨ªa, con m¨¢s argumentos que nunca, en opini¨®n del presidente aliancista. En las diversas reuniones que las familias de UCD mantuvieron ayer para analizar los resultados andaluces, el ambiente era, de acuerdo con todas las fuentes consultadas, de claro desconcierto, al haber sido estos resultados peores de los esperados y, en todo caso, mucho m¨¢s negativos de lo que suger¨ªan los sondeos encargados por UCD.

Una vez que las diversas, familias hayan profundizado. en sus an¨¢lisis, se podr¨¢n apreciar con m¨¢s claridad las posiciones, en las que no van a faltar, en todo caso, ocasiones de confrontaci¨®n entre las diversas posturas ucedistas. El calendario previsto es el siguiente: hoy, la ya citada reuni¨®n del grupo parlamentario centrista, a la que asistir¨¢ Leopoldo Calvo Sotelo. Ma?ana lo har¨¢, en La Moncloa, el Comit¨¦ Ejecutivo, reuni¨®n de la que estar¨¢ ausente Su¨¢rez . Pasado ma?ana, Consejo de Ministros; el lunes, el comit¨¦ regional de UCD-Andaluc¨ªa, y, finalmente, el martes, los presidentes y secretarios provinciales de UCD de toda Espa?a. Un calendario aut¨¦nticamente maratoniano en el que, seg¨²n fuentes pr¨®ximas a La Moncloa, se debatir¨¢ un nuevo esquema para el partido centrista y, tal vez, alguna sustituci¨®n en los organismos dirigentes. Ayer se rumore¨® de manera insistente la posible sustituci¨®n de I?igo Cavero como secretario general centrista, aprovechando que no hace muchas semanas hab¨ªa presentado su dimisi¨®n. Este neg¨® que tal cosa hubiera sucedido.

De todas estas reuniones, la que en principio se plantea como m¨¢s conflictiva es la que ma?ana celebrar¨¢ el comit¨¦ ejecutivo. En ella, Calvo Sotelo plantear¨¢, previsiblemente su modelo de partido futuro, semejante a la Democracia Cristiana italiana, con sus alas izquierda, centro-centro y derecha. Pero resulta veros¨ªmil pensar que surgir¨¢n voces planteando frontalmente la alianza con Fraga, y no faltar¨¢ quien plantee las sustituciones en los puestos clave del partido. Aqu¨ª es donde, puede surgir el conflicto abierto con los suaristas. Tambi¨¦n es probable que alg¨²n miembro de la ejecutiva ponga sobre el tapete la vieja idea de que los futuros carteles electorales de UCD "no pueden seguir siendo unipersonales". La efigie de Calvo Sotelo tiene que ir acompa?ada de otros rostros: Landelino Lavilla, Adolfo Su¨¢rez. Los partidarios de Antonio Garrigues ofertan tambi¨¦n al presidente de los Clubes Liberales. Es la operaci¨®n "lavado de fachada" planteada por los socialdem¨®cratas. '

Lo que parece claro es que ahora el partido ha dado la vuelta. Lo mismo que le ocurriera a Su¨¢rez en 1.980, le pasa en estos momentos a Calvo Sotelo: se est¨¢ fraguando, desde algunas familias ucedistas, la operaci¨®n acoso y derribo.

Los restantes partidos consumieron el d¨ªa de ayer en reuniones de sus directivas, igualmente analizando los resultados de las elecciones. Destaca la postura del PSOE, rehuyendo cualquier extrapolaci¨®n al resto del pa¨ªs de lo que ocurre en Andaluc¨ªa. Un dirigente socialista, en su af¨¢n por mantener la cautela, lleg¨® a emplear los mismos argumentos que los centristas: tambi¨¦n en la Rep¨²blica Federal Alemana pierde el Gobierno, en favor de la oposici¨®n, las elecciones regionales.