El ministro de Defensa del Reino Unido anuncia el env¨ªo de otros diez nav¨ªos de guerra a las Malvinas
A pesar del pu?etazo que ha supuesto para los brit¨¢nicos la p¨¦rdida del destructor Coventry y del carguero mercante Atl¨¢ntic Conveyor -veinticuatro muertos- en el masivo ataque a¨¦reo argentino del martes, el Gobierno brit¨¢nico dio pruebas de firmeza. "Nuestras fuerzas est¨¢n preparadas para empujar sobre Puerto Stanley", asegur¨® el ministro de Defensa, John Nott, se?alando que otros diez destructores y fragatas hab¨ªan llegado a las islas Malvinas en los dos ¨²ltimos d¨ªas.
La ofensiva a¨¦rea del martes, seg¨²n Nott, comenz¨® a las 14.30 horas (hora de Madrid), cuando el destructor Coventry, acompa?ado de la fragata Broadsworth, se hallaba al noroeste del canal de San Carlos, protegiendo con sus radares y misiles la cabeza de playa brit¨¢nica. El destructor detect¨® un avi¨®n enemigo, probablemente en una misi¨®n de reconocimiento, y lo derrib¨® con sus misiles Sea Dart. Cuatro Skyhawk argentinos realizaron otra incursi¨®n y fueron asimismo abatidos, con lo cual, seg¨²n la versi¨®n brit¨¢nica, Argentina ha perdido al menos 37 de sus cazabombarderos.Seis horas despu¨¦s, los aviones argentinos volv¨ªan a la carga por el Oeste, protegi¨¦ndose de los radares con las colinas de la isla de Pebble. Lanzaron sus bombas sobre el Coventry, que zozobr¨® hacia un lado. La primera cifra de bajas arroja veinte muertos y otros veinte heridos, de una tripulaci¨®n de 280 hombres. Se entiende que la fragata Broadsworth fue tambi¨¦n alcanzada, pero no severamente da?ada.
A las 21.30 horas, cuando el carguero Atlantic Conveyor, requisado para esta guerra, se estaba acercando a la desembocadura del canal de San Carlos protegido por buques de escolta, dos Super Etandard aparecieron por detr¨¢s, disparando sus misiles Exocet a unos treinta kil¨®metros de distancia. El barco se incendi¨® y hubo de ser abandonado. Hubo cuatro muertos y varios heridos entre los 170 hombres que se encontraban a bordo en esos momentos.
En esta guerra han perdido ya la vida 99 brit¨¢nicos. Fuentes oficiosas del Ministerio de Defensa se?alaron que las bajas del martes no constitu¨ªan el desastre que se hab¨ªan esperado. La v¨ªspera, el comunicado oficial afirmaba que "varios buques" hab¨ªan sido tocados, sin mayores precisiones. Miles de mujeres y familiares de soldados estuvieron toda la noche intentando averiguar de qu¨¦ barcos se trataba, y ayer criticaron duramente al Ministerio de Defensa por esta raz¨®n.
Se piensa que los argentinos se equivocaron, creyendo disparar contra el portaviones Hennes, que no se encontraba lejos. De hecho, el Atlantic Conveyor, carguero de 14.946 toneladas, hab¨ªa sido transformado para poder llevar los refuerzos de aviones Harrier desde la isla de la Ascensi¨®n. Seg¨²n el Ministerio de Defensa, ninguno de los aviones estaba sobre el barco cuando ¨¦ste fue atacado. Con el Atlantic Conveyor "cargado de suministros", los brit¨¢nicos han tenido que abandonar materiales vitales para sus fuerzas, entre los que se entiende figuraban helic¨®pteros y piezas de recambio para los Harrier. Es el primer grupo mercante que pierde el Reino Unido en esta guerra.
Ficticia destrucci¨®n
La presencia de los Super Etandard viene a disipar las dudas sobre su ficticia destrucci¨®n en Argentina por unos comandos especiales brit¨¢nicos. Reavituallados en vuelo, llegaron el Este volando a menos de veinte metros sobre las olas para evitar ser detectados por los radares. Los Exocet han demostrado de nuevo su mort¨ªfera precisi¨®n, y aunque algunos c¨¢lculos se?alan que s¨®lo les quedan dos de estos misiles a los argentinos, los medios oficiosos brit¨¢nicos piensan de otro modo.
A pesar de estas p¨¦rdidas, se?al¨® ayer Nott en una declaraci¨®n en el Parlamento, el destacamento naval brit¨¢nico cuenta hoy con m¨¢s barcos escolta que una semana atr¨¢s. Nott revel¨® que diez destructores y fragatas hab¨ªan llegado a la zona en los ¨²ltimos d¨ªas.
"Nuestras fuerzas est¨¢n ahora preparadas para empujar sobre Puerto Stanley", afirm¨® Nott, a?adiendo que en las ¨²ltimas veinticuatro horas hab¨ªa habido un notable aumento de la actividad operacional. "En general, el objetivo militar para recuperar las islas se ha desarrollado exactamente como lo planeamos. Hemos sufrido bajas, pero puede haber m¨¢s", asegur¨® John Nott.
La primera ministra, Margaret Thatcher, vestida de negro, escuchaba atentamente estas palabras. Poco antes, ante un congreso de mujeres, Margaret Thatcher hab¨ªa dicho que, "a pesar de estas dolorosas p¨¦rdidas, nuestra determinaci¨®n y confianza no se ha debilitado". El Gabinete de crisis se reuni¨® de nuevo ayer, y un portavoz del Gobierno asegur¨® que por el momento se descarta un bombardeo de las bases argentinas en el continente, operaci¨®n cuya dificultad militar no escapa a Nott.
Cautela laborista
El liderazgo laborista prosigue con su l¨ªnea de cautela, insistiendo en no cerrar las v¨ªas diplom¨¢ticas para una soluci¨®n negociada. Su comit¨¦ ejecutivo se reuni¨® para aprobar una resoluci¨®n responsabilizando a Argentina del recrudecimiento de las hostilidades. La ejecutiva laborista rechaz¨® una rnoci¨®n del izquierdista Tony Berin pidiendo un alto el fuego.
En los Comunes, 277 diputados, frente a veintisiete en contra, votaron por la expulsi¨®n temporal del .laborista Andrew Faulds, despu¨¦s de que ¨¦ste se enfrentara con Speaker, quej¨¢ndose de que la oposici¨®n estaba siendo silenciada en el tema de las Malvinas.
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