"La imaginaci¨®n cambia la conciencia del lector", dice Michael Ende

"Estoy en contra del escritor como un maestro que tiene que ense?ar", dice Michael Ende, el autor de La Historia interminable y de Momo, publicados ambos por la Editorial Alfaguara. "Estoy en contra", dice, "de, toda esta literatura did¨¢ctica que pretende siempre ense?ar algo a los lectores. Creo que el sentido del arte, de todas las artes, es hacer volver al lector a su vida cotidiana con algo cambiado en la conciencia. Y este cambio se da por la imaginaci¨®n". Y ah¨ª est¨¢ la clave de esta novela que ser¨¢ llevada por fin al cine, para ser "una alternativa europea a las historias fant¨¢sticas norteamericanas, a las que les falta, como a los guerreros de Excalibur, tener rostros cre¨ªbles, no de jugadores de b¨¦isbol".

Michael Ende no pod¨ªa dejar de venir a Espa?a, donde su libro, editado, como ¨¦l quer¨ªa, en tinta roja y verde, est¨¢ siendo el gran ¨¦xito de la Feria del Libro. Est¨¢ encantado: "En ning¨²n pa¨ªs podr¨ªa ocurrir lo que en Espa?a: me cuentan que los linotipistas que picaban el libro quer¨ªan leerlo entero, porque se quedaban en la acci¨®n. Me cuentan que el corrector de pruebas tuvo que leerlo dos veces porque en la primera no era capaz de ver los errores. Me dicen que el Rey Don Juan Carlos compr¨® mi libro... Bueno. Esta es la tierra de Don Quijote", dice. Est¨¢ hablando de un azar, y tambi¨¦n de su libro, de esa rara cualidad que los editores han conseguido hacer pl¨¢stica cuando lo han hecho anfibio entre la colecci¨®n lujosa y adulta, la colecci¨®n azul de Alfaguara, y esa otra, amarilla y juvenil. Es seguramente, como todos los verdaderos libros, una historia pensada en principio para ni?os y que m¨¢s tarde se convierte tambi¨¦n en lectura deseada de mayores.

Clave fant¨¢stica

La explicaci¨®n la da el propio Ende. "Yo siempre he escrito en clave fant¨¢stica: para m¨ª la transformaci¨®n de la realidad es el acto art¨ªstico o po¨¦tico por s¨ª mismo. Ning¨²n pintor puede pintar un paisaje tal cual, tiene que transformarlo en una cosa aut¨®noma". "La historia interminable tiene adem¨¢s una motivaci¨®n muy especial. Hace diez a?os hubo un gran debate sobre la literatura de evasi¨®n, durante el cual muchos cr¨ªticos importantes dec¨ªan que toda literatura fant¨¢stica es literatura de evasi¨®n. S¨®lo la literatura comprometida, es decir, social y realista, pod¨ªa ser considerada como tal"."A m¨ª me parec¨ªa un concepto completamente equivocado. En este libro no he tratado de explicar por qu¨¦ estoy en desacuerdo, sino hacerle vivir al lector la experiencia de ese viaje a la historia contada, del que se vuelve con la conciencia cambiada a la realidad cotidiana. Y para m¨ª, ese es el sentido de todo arte. Por eso estoy en contra de la literatura did¨¢ctica".

La historia interminable es la de un ni?o para quien los libros son un refugio y el colegio un infierno, con el que de un modo u otro se ha de identificar m¨¢s de uno. Por los libros, por un libro de tapas color cobre -y quiten ustedes la sobrecubierta a esta edici¨®n- se introducir¨¢ en un mundo de dragones y criaturas. Ende explica el origen de sus personajes como "un largo proceso, que es el que ha conseguido que los personajes se volvieran reales. El primer Basti¨¢n" que es el protagonista-ni?o, "era un muchacho automarginado y solitario, que no quer¨ªa la relaci¨®n con los otros. Despu¨¦s, a mitad del libro, el personaje tuvo que cambiar, cambi¨®: ¨¦l desea estar con los otros ,pero no puede. No encuentra la vida".

"En realidad", dice, "los personajes y la historia se fueron ha ciendo solos. Yo ten¨ªa apenas una nota en un sobre: tengo que contar la historia de alguien que entra en un libro y no sabe c¨®mo salir. Luego me dej¨¦ caer en la historia misma, en la aventura. Lo que contaba el libro ten¨ªa que ser una historia capaz de atraparle a ¨¦l y, consiguientemente, al resto de los lectores, y por otro lado el chico ten¨ªa que ser un personaje capaz de ser atrapado, de dejar ' se atrapar. As¨ª se fue es cribiendo esta historia que yo mismo no sab¨ªa c¨®mo podr¨ªa terminar".

La historia, la novela, continu¨® por mucho m¨¢s tiempo del previsto. Dur¨® dos a?os, cuando su idea y la del editor era terminarla en uno, y multiplic¨® varias veces los cien folios previstos al principio. "S¨®lo termina la historia cuando Basti¨¢n quiere salir de Fantas¨ªa, y esto s¨®lo ocurre cuando ha conseguido ya todos los deseos. S¨®lo entonces puede sentir el de volver'.

En una historia de estas caracter¨ªsticas, dice Michael Ende, "lo m¨¢s importante y lo m¨¢s dif¨ªcil es encontrar las reglas del juego. Es una historia fant¨¢stica, as¨ª que tienen que ser claras, para no perderse en las aventuras diversas". Y en el transcurso de la historia es donde van apareciendo los otros personajes: Atreyu, que es la contrafigura de Basti¨¢n, el h¨¦roe a quien todo sale bien, mientras a ¨¦l le sale todo mal; el drag¨®n de la suerte, la emperatriz infantil, en fin, ese mundo que hace de La historia interminable un libro con el que, como su peque?o protagonista con las historias que acababan, se termina s¨®lo llorando.